Jamais Vu - Jeon JungKook

27

[Jin]

—Me está frustrando ésto—se revuelve el cabello molesta, llevamos una hora parados cerca de un parque, la lluvia no cesa impidiendo que pueda ver a través del parabrisas

—Solo esperemos otro rato—intento parecer tranquilo pero no sé si funciona, Dahye sigue mirando a través de la ventana sin percibir nada, su celular lo revisa cada treinta segundos esperando una llamada de los chicos o de alguien que le asegure que su amiga está bien

—¿Crees que Yerim esté bien?—muerde su labio tiernamente, se remueve en el asiento abrazando una de sus piernas, el frío ya está haciendo de las suyas—siempre es ella la que nos busca cuando nos enfadamos, no sé cómo hacerlo ahora

—Es muy inteligente, sabe lo que hace

—Tal vez—agacha la cabeza—Jungkook no es nada como antes, hasta yo me he dado cuenta

—¿Porqué lo dices?—parpadeo un par de veces esperando no escuchar nada raro, creo que todos hemos contribuido a la mala fortuna de esa pareja

—Mmm...cuando estuvimos en Nueva York, Yerim solía llegar de sus citas muy alegre, dejaba su bolso sobre la mesa y se acomodaba en el sofá de su sala para poder hacerme un videollamada, su sonrisa era enorme—rie melancólica—me detallaba todo, a dónde iban, que comían, incluyendo las veces que Jungkook la acompañaba en su oficina por las noches, antes de conocerlo su vida era tan monótona, levantarse e ir a trabajar, salir e ir a dormir, muy aburrido, ¿No crees?

—Los trabajos de oficina siempre me aburren, es como vivir en una jaula—bromeo

—¿Verdad que sí? En algo estamos de acuerdo Sojin

Quiero corregirla nuevamente pero es caso perdido, siempre ignora mis palabras

—Te decía, aunque Yuna y Eunbi organizaban planes, pocas veces nos acompañaba, estaba trabajando como loca para poder pagar el dinero a su hermano

—¿Taemin le prestó dinero?—pregunto más interesado que antes—¿No viene de una buena familia?—asiente cerrando los ojos, suelta un suspiro y acomoda su cabello detrás de sus orejas, no se porque me enfoco en ese tipo de detalles

—Sus papás le quitaron todo, empezando por el apellido, y Taemin pagó sus estudios, Yerim no quería pero termino aceptando con la condición de devolver todo algún día, por lo que sé, ya está pagado—da un corto vistazo a su celular que ahora está sin señal, en algunas zonas cercanas, la luz se ha ido y supongo que también los cables de teléfono—así era ella, por un tiempo la ví cambiar y ser feliz, pero creo que regresó al pasado y ahora está estancada, problemas con sus padres, es señalada por la prensa, y su relación no es buena, cada que regresa de ver a Jeon, solamente dice que todo va bien y esfuerza una sonrisa, no insinuo que no lo quiera, pero todos sabemos que hay algo malo aquí—¿Tu sabes algo?

Me mira directamente a los ojos sin titubear, su mirada es profunda y difícil de mantener, me siento nervioso y un poco sofocado, no sé si es por el encierro, porque estoy con ella o porque me pregunta cosas que tampoco sé cómo responder.
Jungkook es mi amigo, mi familia, siendo yo el mayor y él el menor siento ganas de cuidarlo y protegerlo, ha sido así desde que lo conocí y supe que estaríamos juntos cumpliendo nuestro sueño, hemos vivido muchas cosas, momentos de felicidad y también de tristeza, donde recurre a mí para un consejo sin importarle que suelo tomar las cosas a broma la mayor parte de las veces, después de Jiah todo cambió, ella marcó su vida al ser su primera novia y la persona que sin darse cuenta, lo ayudó a ver su realidad.
En esos tiempos, éramos unos novatos, Kookie tan sólo de 15 años vivió su enamoramiento con una joven pelinegra de mejillas regordetas, tristemente años después, estar con ella no era su destino. La llegada de Yerim no sólo afectó su vida, la de todos también, y nada saldrá bien, de eso estoy seguro.

Pasamos otro rato pero no dejaba de llover, sólo calmó un poco, arranqué el auto muy despacio, Dahye se quedó dormida con la cabeza recargada en la ventana, respiraba tranquilamente y sostenía con fuerza su celular, llegamos a casa y no tenía idea de cómo bajarla del coche, por un momento pensé en...no Jin, ni de chiste, recuerda que ha sido demasiado molesta para tí.

—Ya, Dahye despierta—doy un leve manotazo sobre su cabeza solo logrando que la mueva al otro extremo—¡Dahye!

—¿Eh?—abre sus ojos lentamente, bosteza y mientras baja, estira su cuello

Entramos a la casa y se han quedado dormidos, Suho recargado en el respaldo del sofá con la cabeza de Eunbi en sus piernas, Yoongi acomodado junto a Nam y Hoseok en otro sofá, la luz está encendida.

—Puedes quedarte en mi habitación—propongo quitándome la chamarra que está un poco húmeda, sin previo aviso, Dahye golpea mi espalda tan fuerte que apenas logró contener un gito—¿Qué te pasa?—susurro molesto

—¿Cómo me ofreces eso?—susurra de igual manera—recuerda que mi tipo es ese hombre de allí—señala a Namjoon que no se remueve ni un poco

—Eres tonta, claramente ibas a dormir sola, pero olvídalo, duerme en el sofá sobrante—camino hacia las escaleras

—Sojin, perdóname—alcanza una de mis manos y habla achicando sus ojos—solo hazme la propuesta una vez más—guiña un ojo divertido

Rio bajó, siento mis orejas arder y no entiendo la razón, ¿Es porque está agarrando mi mano? La quito de inmediato pasándola detrás de mi espalda.

—No, ahora ve a dormir—la ignoro mientras subo las escaleras

La puerta de la habitación de Jimin está abierta, parece que sacó algo de su armario y salió inmediatamente, la puerta de Tae está cerrada totalmente y aunque no escucho respuesta, decido abrir encontrándolo profundamente dormido, mi habitación está frente a la de Kook, Hoseok me había dicho que desde su discusión con Yerim, se encerró y no ha salido para nada. Muchas veces entra sin tocar entonces tengo derecho de hacerlo también.

—¿No deberías dormir ya?—cierro tras de mi, está sentado en un pequeño sofá que tiene junto al ventanal, parece algo ausente—¿Comiste?

—¿La encontraron?—habla sin mirarme, camino hasta el sentándome en la orilla de su cama, la única iluminación es la lámpara de noche que Jimin le regaló en su cumpleaños anterior

—No, pero suponemos que está bien, ya sabes que es muy responsable y sabe cuidarse—intento restarle importancia

—Todo es mi culpa, sabes que pensé en decirle la verdad al volver de Busan, sin embargo, ya era demasiado tarde, ahora la culpo de todo aunque claramente el responsable soy yo

—No digas eso, las circunstancias son responsables, creo que puedes encontrar otro momento para hablar con ella. Nunca es demasiado tarde

—Para mí sí—cierra fuertemente los ojos, quisiera encontrar una solución para no verlo sufrir, y aunque me niegue, ni hay una sola en en todos salgan ilesos

No quiero imaginar en todo lo que va a pasar cuando Yerim sepa la verdad, y tampoco sé cuándo será.