Baby Honey

Track 16: I Plead Home

I Plead Home es una canción desgarradora que ruega por un perdón que se sabe no merecido.

Fue uno de los singles de su primer álbum y sorprendió tanto al público como a la crítica, cautivada por un grupo de mocosos rockeros recién salidos de los locales de los barrios humildes del este de Londres, que interrumpían los conciertos de música doloramente joven y despreocupada, y bajaban las luces para interpretar una canción profunda, poética y madura a nivel lírico e instrumental que parecía fuera de lugar en el escenario.

Styles es un mero apoyo bajo durante el estribillo y completa el primer puente solo, como un maestro de ceremonias que presenta e introduce a la estrella de la canción.

Tomlinson, por su parte, es la voz protagonista e imbuye la canción de una emoción estremecedora que llega a los huesos; si bien es cierto que su carisma y desparpajo se habían ganado al público desde mucho antes, su interpretación de I Plead Home fue un toque de atención a los expertos que escudriñaban y despreciaban abiertamente a las nuevas bandas que insuflaban sangre nueva en el panorama del rock and roll. Era un rockero de corazón, pero le sobraba talento interpretativo para destrozarles el corazón con una disculpa sobrecogedora llena de notas y acordes arriesgados, si era necesario.

Por aquel entonces, la banda estaba empezando a promocionar tímidamente su primer álbum de estudio, pero Tomlinson lanzó con sus interpretaciones una clara advertencia de que no consentiría ser ignorado.

Crossing Mirrors los lanzó a la fama, pero fue I Plead Home la que hizo que la gente recordase sus nombres.

JOEY DAVIS (fotógrafo). —Fue la noticia jugosa que estábamos esperando.

Las fotos saliendo de rehabilitación valen oro, siempre. Pero es que eran la banda del momento; eran el centro de todas las polémicas, los reyes de las listas de éxitos y los más famosos. El tour se había cortado en seco; simplemente nadie se subió al escenario en el estadio aquella noche. La gente se enfadó muchísimo, aquello dio la vuelta al mundo. Y ya sabes lo que dicen: no existe la mala publicidad.

Hasta entonces, la localización de los miembros de la banda era un misterio. Liam y Niall se dirigieron a los fans para disculparse por la cancelación del concierto de Twickenham. A Zayn lo habíamos pillado llegando a un hotel. Pero Harry y Louis se habían esfumado. Ni una foto, ni una noticia, ni un rastro.

Todos sospechábamos que se estaban desintoxicando, pero no teníamos nada más que cuatro rumores sin valor. Todo el mundo estaba escribiendo noticias sin ninguna base; bueno, nosotros también. Pero había que entregar algo, tío. No podíamos perder el shock de la gente. Si la competencia se inventaba algo gordo, tú tenías que inventarte algo más gordo todavía.

Y entonces nos llegó la llamada de que acababan de aterrizar. Nos lanzamos a por ellos.

La mejor foto la saqué yo. Se les ve la cara. Bueno, Harry lleva gafas de sol, pero ya me entiendes.

Los reyes del rock, los más carismáticos y rebeldes, que estaban en la portada de todas las revistas, escondiéndose de las cámaras. ¡Y juntos! Recuerda que aún intentaban venderlos como "camaradas de juergas" por aquel entonces. Fue la fotografía del año. Y la más cara que he vendido nunca.

Ese chico no ha parado de darnos fotografías para el recuerdo; ésa fue la segunda, pero no la última.

ALICE PARKS (periodista). —La desintoxicación no fue el centro de ninguna noticia, y eso que en aquellos años la sociedad occidental era más fácil de escandalizar en lo que a adicciones se trataba.