Diamond Show es la canción con la que Crossing Mirrors acababa todos sus conciertos desde su lanzamiento como single del álbum "Midnight Sessions". La lenta acumulación de tensión instrumental durante los dos primeros tercios del tema, seguida de la explosión de percusión y aire y la culminación vocal del último minuto, le dan al tema un aire conclusivo y un halo misterioso que sabe a despedida.
El ritmo es suave; las guitarras, etéreas. Y sin embargo, la letra es cruda, y recorre en once estrofas un panorama apocalíptico plagado de referencias bíblicas y donde se aprecia una patente influencia del Inferno de Dante. Aunque describe una escena casi mágica, deslumbrada por el brillo de mil diamantes y rodeada del éxtasis de mil paraísos, la canción acaba sugiriendo la llegada del fin de todo lo conocido, y abre una puerta a un futuro más que incierto.
La canción fue cantada casi en su totalidad por Tomlinson, apoyado, sin embargo, por Styles en los estribillos, y la inmensa mayoría de las críticas profesionales que recibió en su día lo describieron como un acierto; la dulzura angelical de sus agudos suena, contra todo pronóstico, perfecta para hablar del infierno.
"Diamond Show", escribió entonces Isla Whitmore, ya redactora de la revista Rolling Stone, "suena como si describiese el cielo. Y sin embargo, cualquiera que haya desgranado su letra ha percibido una frialdad extraña, un aire inhóspito y desconcertante que no puede pertenecer a otro sitio que no sea el averno."
"Es el ritmo", insistió poco después Andrew Nicholas, productor musical. "Es ese ritmo lúgubre el que la convierte en la canción perfecta para acabar un álbum. Cualquier persona sin ningún conocimiento musical y que nunca hubiera oído hablar de Crossing Mirrors sabría con los ojos vendados que ésta es la canción que cierra el disco. La letra empieza soñadora pero acaba pseudo-autodescriptiva; los conciertos de Crossing Mirrors eran un auténtico show hecho de diamantes, y se acabaron de raíz, casi trágicamente. La instrumentación es la de una canción triunfal. Pero el compás es el de una marcha fúnebre."
En 1988, la fotógrafa Sadie Martin, una de las retratistas más famosas del mundo, realizó una sesión de fotos en San Francisco que contó con dos modelos inauditos: las ex-estrellas e integrantes de Crossing Mirrors Harry Styles y Louis Tomlinson.
La sesión de fotos acabó con más de 45 fotografías, pero sólo una vio la luz cuando Martin la vendió a la revista Rolling Stone, que la presentó en portada en su número de agosto de 1989.
En ella, Tomlinson está desnudo y tumbado boca arriba sobre una sábana blanca con gesto desmayado y mira a la cámara con un rostro casi inexpresivo donde se aprecia, sin embargo, un cariz desafiante. Sobre él, agarrando su mano, Styles está tumbado boca abajo con los ojos pacíficamente cerrados, vestido con una camiseta negra de manga corta y unos vaqueros del mismo color.
El artículo del interior, dedicado a artistas de la época que habían abandonado el estrellato de forma prematura, no contó con la intervención de Styles y Tomlinson, quienes declinaron entonces ofrecer ningún tipo de entrevista a la publicación.
No obstante, la fotografía causó un gran revuelo en el mundo de la música, que interpretó la intimidad patente de la imagen como un gesto de desprecio y despecho hacia una industria a la que habían dado la espalda diez años atrás. Totalmente apartados de la vida pública, era un secreto a voces que Styles y Tomlinson tenían una relación sentimental que se remontaba a los años dorados de Crossing Mirrors, y que la ruptura de la banda—con todas las batallas legales y los contratos rescindidos que conllevó en su momento—los dejó sin motivos para esconderse. Diez años después, con el resto de implicados apaciguados y prácticamente olvidados, la pareja seguía en pie.
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Baby Honey
FanfictionEl grupo Crossing Mirrors revolucionó la naciente escena indie-rock en los años setenta. Sus primeros álbumes de estudio, "Crossing Mirrors" y "Midnight Sessions" reventaron las listas de éxitos y los lanzaron a la cúspide del panorama musical inter...