Capítulo Quince

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     —¿Y en serio quieres llevar a ese putito a casa? ¿Acaso te volviste loca, Kathy?

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     —¿Y en serio quieres llevar a ese putito a casa? ¿Acaso te volviste loca, Kathy?

     —Papá lo matará... Lo desollará.

     —Más que eso, ¡en un Ratri! Sabes cuánto odia a esa familia, Kathy. Estás cavando tu propia tumba.

     Emma miró a sus dos hermanos con severa indignación. ¿Qué comían que habían crecido tanto? Y no era lo único, comenzaban a hablar como verdaderos adolescentes, y apenas tenían trece años. Suspiró y tiró mechones de los dos para hacerlos chillar.

     —Qué se creen, par de cigotos. ¡Soy mayor que ustedes dos, hablénme con respeto! —se quejó raspando sus coronillas.

     —Ay, ay, ¡pero si decimos la verdad! Sabes que papá jamás aceptará a ese tipo en casa. —chilló Aiden sobándose su cabeza. —Eres su única hija, imagínate, lo odiará más.

     —Además... Qué tiene de lindo, es igual de feo que papá. Su único chiste es que es malditamente inteligente, demasiado para ser real... —Emma miró con una sonrisa a Aiden. —Fuera de eso, siempre lo veo con cara de culo y hablando como si todo el mundo le sobrara, el otro día escuché como le decía a un chico que era un sangre sucia inservible.

     —Pero si solo le dijo que era inservible...

     —¡Cállate, Ethan!

     Emma tomó un respiro, buscando la paciencia que en ese momento no tenía. Masajeó su sien y trató de entender a sus hermanos. Ellos la querían mucho, y solo buscaban lo mejor para ella. Pero por otro lado, estaba su otra mitad. El chico que puso toda su vida pies arriba.

     —Niños, entiendo que no les agrade Ratri, pero no hablen así de él. Es amable conmigo, muy diferente de como ustedes lo ven. Y en serio me gusta, ¿podrían por favor darle una oportunidad?

     Sabía que Norman tenía muchos defectos, sobre todo el detalle de que solía mirar en menos a muchas personas. Pero eso a ella no me afectaba, no era desagradable con ella o con sus amigas las pocas veces que habían hablado. Y era muy lindo, sobre todo cuando sonreía. ¿Cómo no lo iba a querer?

     —Si mamá lo acepta, sabré que él es bueno. Papá es un viejo amargado, no puedo esperar mucho de él. —suspiró negando. —Además, es corto de paciencia. ¿Acaso no recuerdan la vez que golpeó en la nariz al reportero?

     —En su defensa preguntó cosas que no le incumbían y se metió con mamá. —defendió Ethan. Emma solo rodó los ojos, sabiendo que en cada ocasión el menor defendería a capa y espada a Yuugo. —Incluso debió golpearlo un poco más.

     —Mhh, quizás a veces papá debería tomar un respiro. —el menor miró a Aiden con el entrecejo arrugado. —¡Vamos! Solo no fue demandado porque llegaron a un acuerdo. Las únicas polémicas que tiene son por su corta paciencia y su terrible temperamento.

Albine Snake [NorEmma AU]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora