ʟɪᴍᴇʀᴇɴᴄɪᴀ✞ᴄʜᴀɴsᴏᴏ

d i e c i s é i s

Mesas cubiertas con manteles pulcros en un color blanco, con comensales vistiendo ropa elegante, con joyas caras decorando a las féminas y una luz amarillenta creada por el gran candelabro en el centro. Las velas son parte de la decoración en aquel ostentoso restaurante, en el que jóvenes meseros pasan de un lado a otro con charolas en mano en busca de servir a la perfección  para evitar cualquier regaño, accidente  y solo tal vez una propina de un par de billetes.

En una mesa alejada y sin ser muy consiente de su entorno, por el simple hecho de no interesarle en lo más mínimo ver como aquellos falsos refinados  piden platillos con sabores exóticos y con un valor  de lo más ridículo, para solo dar la primera probada con la punta de un cubierto para después olvidarse de el. La luz es más tenue en aquel lado del lugar, una vela a su costado le da un ambiente más sombrío, creando una sombra en la pared detrás de su recta postura.

La corbata en su cuello a sido quitada y dejada de lado, el primer botón de la camisa que viste a sido desprendido y las mangas de su saco ahora remandadas dejan ver las venas marcadas de la área expuesta.  El mesero que lo a atendido desde que llego da una reverencia y se retira, después de dejar la botella de vino junto a una copa. Su pierna derecha se cruza sobre la izquierda, coloca un codo sobre la mesa y con la otra mano sirve el vino hasta la mitad, gira la copa entre sus dedos y da un gran trago degustando el gran sabor.

La noche a sido pesada, el día lleno de sangre y ruidos desagradables que le han hecho ganarse un dolor de cabeza. La soledad es la mejor solución junto a un buen vino, y que mejor que visitar a un gran amigo en su famoso restaurante, aun que este este tan ocupado atendiendo el lugar como para prestarle demasiada atención, eso era mucho mejor. 

Las miradas no faltan, mujeres jóvenes acompañadas por sus esposos mayores le miran por el rabillo del ojo, algunas otras mujeres mayores que buscan saber quien es tan atractivo hombre, otras solteras que van en grupos y le miran fijamente sin importarles ser demasiado obvias y desagradables. Las caras llenas de maquillajes, el labial perfectamente colocado  y peinados de caireles en sus largas y falsas cabelleras. Feminas gastando la herencia que le ha dejado el marido difunto y algunos atrás más en espera de que aquello suceda.

Los minutos pasan de manera lenta, sin despegar la mirada de su copa ve el reloj en su muñeca solo para comprobar que pronto sera media noche, y cuando ve que tan solo falta un cuarto de hora para eso por fin alza la vista. Sus oscuros ojos suben, topándose con unos labios acorazonados un color pálido, sintiendo como imanes que le dejan sin habla e incapaz de mover un dedo al no poder dejar de ver a aquel muchacho perteneciente a tan bonito rostro que a descubierto en un laberinto lleno de falsedades sin salida.

Cabellos castaño relamidos en gel hacia atrás, dejando ver unas cejas tupidas y unos lindos ojos redondos, su piel clara casi amarilla. Pero eso no se puede afirmar si las luces del lugar son de aquel tono. Posee un cuerpo delgado, enfundado en una camisa de color blanco, un chaleco negro que es sujetado por detrás en su delgada figura y unos pantalones del mismo color al igual que su calzado. Un joven mesero que deja un par de platillos en la mesa que atiende a unos metros lejos, dando una reverencia de 90° para luego retirarse con la cabeza gacha y la mirada fija en sus pies.

Se siente hipnotizado por tan bello ser que a llegado ante sus ojos tan repentina-mente. Deja que su mente viaje, quedando en trance por algunos minutos hasta que se despabila al sentir vibrar su teléfono celular sobre la mesa, la imagen del chiquillo no desaparece, aún y cuando ve el nombre de su madre iluminar la pantalla. Desliza su dedo indice rechazando la llamada, pronto lo puede volver a ver salir para recibir una nueva orden.

Cuando se supone que debe irse a la media noche, se queda hasta que el lugar cierra y el ultimo cliente se va, incluso los trabajadores se han ido a casa y el espera en su automóvil a que el mesero de labios inigualables salga. Con sigilo lo sigue por calles poco transitadas, el chico camina por largos minutos una gran distancia hasta llegar a un edificio deplorable, puede ver antes de que el entre al edificio como soba sus rodillas y nuca. 

Su día termina cuando lo ve desaparecer de su campo de visión y ahora si, conduce hasta el lugar al que llama casa. El sueño se esfuma y el cansancio que llego a sentir también se va, los recuerdos persisten, por aquella noche y el resto de noches que vuelve al restaurante solo para ver al lindo mesero, sin ser el afortunado que atenderá. Nunca llega a ser el mesero que tome su orden, siempre son distintos pero nunca el, pero no por eso se queda como siempre, sin saber nada más que su profesión. Las semanas pasan y con ello lo va conociendo de poco a poco por sus medios, conoce su nombre, su edad, el nombre de sus padres y hasta el nombre del preescolar al que asistió.

Una obscesión que se convierte en una necesidad, por liberarlo de aquel infierno al que llama vida. Trabajando día y noche, comiendo de manera miserable y lastimando su cuerpo por las tareas que le dan a realizar. 

Un nuevo sentimiento relacionado al chiquillo con el que nunca a hablado, manteniéndose en las sombras observándolo, hasta que el día más esperado de su vida llega y puede verlo de cerca. Apreciar los lindo lunares que decoran su cuello y orejas, el rostro aun aniñado y aquellos labios que ha soñado tantas veces que le es imposible contarlas. 

Nada es fácil, aun más cuando parece ser el malo de la historia siendo rechazado por temor. Puede entender las razones pero no por ello se dejara vencer, a trabajado duro, mucho tiempo para llegar a donde esta y tener lo que tiene. Ahora quiere tener a Kyungsoo, darle una mejor vida a su lado, porque le ama. Desde el primer momento fue y sera él.

Hará todo para que sus sentimientos sean correspondidos, para tener en cuerpo y alma a aquel joven mesero que puso de cabeza su vida sin ser cociente de ello. 

ɴᴀᴛ_ᴊɪ⑦

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20.03.21

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NT: No me convence del todo el capitulo, pero~ la vida es una xd