Bajo el brillo de las luces que resplandecían cómo estrellas Evan guío a Amaris hasta un rincón en la pista de baile, con sumo cuidado colocó su mano en la cintura de la chica mientras con la otra sostenía firmemente su mano, ella con cautela posó su mano en el hombro del cazador tratando de tomar cierta distancia, curiosamente el chico no pareció molestarse e incluso le dio espacio. Comenzaron la danza lentamente, dando algunos giros al compás de la música que era alegre, a su alrededor los otros cazadores también se unieron en la pista con sus parejas.
-¿Evan está bailando?- Lexie que había regresado de cambiarse el uniforme para la presentación por un bonito vestido negro con plata, lo miraba desde lejos y lucía muy sorprendida.
-Si... bueno... estuvo tomando clases en éstos meses con su mamá.- Le explicó Dennis, que volteó a verla de reojo, aunque la máscara de grifo le estorbaba un poco. Pudo notar que la mirada de su compañera cambió de sorpresa a tristeza en un instante, aún con el antifaz de unicornio cubriéndole el rostro. -Lexie... am... sé que tú y yo no somos muy amigos que digamos... y estoy consciente de lo que aún sientes por Evan, la verdad no sé que decirte para... bueno, ya sabes... consolarte.- Agachó la cabeza, se sentía apenado por ella.
Todos lo sabían, no era un secreto la razón por la que se unió a los cazadores, aunque ella se mantenía al margen y actuaba como solo una amiga para Evan la realidad era otra y no era complicado darse cuenta que aún estaba enamorada de él. Debía ser especialmente difícil ver a su ser amado haciendo lo imposible por otra persona, el amor no correspondido solía ser brutal.
La cazadora soltó un suspiro sin dejar de ver a la pareja danzando, luego entornó los ojos hacia su compañero y le sonrió de una forma muy sincera tomándolo desprevenido. -Descuida, estaré bien.- Puso su mano sobre el hombro del chico y continuó: -Con preocuparte por mi ya es más que suficiente, créeme. Además si soy completamente franca puedo entender por qué él se esfuerza tanto, no es cualquier chica y no hablo solo de su belleza.- Cerró los ojos un instante, trago saliva mientras respiraba hondo, como tratando de ahogar lágrimas.
Eso no pasó desapercibido por él, se quedó unos segundos pensando que podía hacer o decir, sin avisar, tomó la mano de Lexie que empezaba a resbalar de su hombro y sin soltarla se inclinó respetuosamente frente a la cazadora mientras con el brazo señalaba la pista de baile. -Señorita, ¿sería tan amable de concederme éste baile?- Ella quedó momentáneamente pasmada, le tomó un instante reponerse pero sonrió nuevamente y asintió, sin decir nada caminaron hasta un espacio libre, ambos se mostraban tímidos uno con el otro, tal como había dicho Dennis no eran amigos muy cercanos, aunque su complicidad con aquel lobo y la chica de la capa roja había cambiado las cosas. En algún punto al danzar Dennis se armó de valor, hizo girar a su compañera y cuando la tomó nuevamente de la cintura la miró directamente y solo recitó: -Tu tampoco eres cualquier chica, ¿lo sabes verdad?- Ella se ruborizó sorprendida sin poder contestar, mientras que él sin agregar nada más la miró con cierta ternura antes de desviar su vista a otra parte mientras continuaban bailando.
Del otro lado se encontraba una incómoda Amaris en brazos de quien veía como su verdugo, no quería voltear ni a verlo, seguía toda conflictuada por el comportamiento errático de Evan que solo le dificultaba las cosas, incluso en ese momento sentía como si él estuviera estudiando cada movimiento esperando el momento para poder atacar.
-Gracias por venir y permitirme bailar contigo.- Dijo finalmente el cazador. -Estás especialmente encantadora ésta noche.-
-G...gracias, tu... también te ves muy bien.- Respondió apenas con un hilo de voz.
-¿Qué te pareció el espectáculo de presentación?-
-Yo...creo que fue increíble, ahora entiendo que hablen tanto de eso cada año.- Amaris aún hablaba bajito y mirando al piso o lo que estuviera disponible a su alrededor.
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Una Historia De Caperucita, El Lobo Y El Cazador
RomanceCaperucita se dirige por primera vez sola al bosque, su encuentro con un hombre lobo que le salva la vida despliega una serie de eventos y decisiones que pueden cambiarlo todo... Pero un joven cazador la pretende sin saber el creciente afecto que e...