Mentiras y verdades

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El grupo de chicos logró terminar con la mantícora exitosamente, sin embargo estaban confundidos y nerviosos, la reacción del hombre lobo los tenía desconcertados y algunos miembros como Calix y Jace se preguntaban si no había cometido un error su líder al ordenarle a Dennis y Lexie acabar con el lobo igual que con las mantícoras, siendo muy francos, de no ser por la ayuda de aquel ser no la habrían librado. Evan por su parte se sentía inquieto, ¿acaso la chica que pretendía estaba confabulando con ese perro? era contra las reglas del reino entablar algún tipo de relación con esos seres desde el último incidente grave registrado, no quería pensar que su amada estuviera escondiendo de manera consiente al cánido, pero era demasiada la sospecha. Otro detalle a considerar era que esa bestia lo había salvado, se resistía a la idea por más evidente que fuera la verdad, los licántropos no hacían eso, debía tener algún motivo oculto...

Se escucharon un par de disparos a lo lejos, seguramente sus colegas ya habían cumplido con su labor, esperaron un rato su regreso mientras se daba primeros auxilios a los más lastimados, los minutos y el silencio reinante se estaba volviendo tenso, justo cuando Evan estaba por ir a indagar que había ocurrido a pesar de tener la pierna vendada por una espina que lo atravesó, escucharon unos pasos arrastrados que se acercaban hacia ellos. Cuando lograron distinguir mejor notaron que Dennis traía cargando a Lexie, quien apretaba una gasa llena de sangre contra su costado con una cara de intenso sufrimiento.

-¡¡LEXIE!! ¿Qué rayos pasó?- Evan se lanzó para ayudar a los recién llegados, Dennis recostó a la chica en el pasto, Evan sacó el material de curación que le quedaba.

-El lobo... justo cuando íbamos a terminar con él, saltó y desvió el disparo de Lexie... logró hacerle un arañazo profundo en la cadera. Conseguí dispararle antes de que nos atacara de nuevo.- Tenía las manos rojas y temblorosas.

-¿Y el cinturón de Lexie? ¡necesita más gasas, tu equipo no basta para curar ésto!- Lo regañó.

-Cuando atacó la arrojó lejos, se debió caer su equipo en el trayecto y no pude encontrarlo, yo... intenté contener la hemorragia con las vendas y gasas que traía ¡lo siento!- El pobre chico se veía bastante afectado por lo ocurrido.

-D... descuida Dennis... estoy bien, no es muy profundo el arañazo.- Balbuceó Lexie. -Solo me arde y se me dificulta caminar... No lo regañes Evan, hizo lo que pudo.-

El grupo de jóvenes se dirigió de nuevo al pueblo para atender adecuadamente a todos los heridos, esa era la prioridad, luego Evan tendría que enfrentar a Amaris y su abuela para saber si eran o no cómplices del hombre lobo... de ser así el castigo podía ser muy severo...

En casa de la abuela Ina, ambas mujeres estaban rezando por que Karan hubiera escapado a salvo, Amaris prácticamente se estaba comiendo las uñas por la incertidumbre. Los latidos de su corazón pararon cuando un par de horas después alguien llamó a la puerta, su abuela estaba igual, pero ella estaba temiendo tanto por Karan como por su nieta... Abuela Ina abrió la puerta para encontrarse al joven cazador con un semblante tan sombrío como la noche.

-Damas, vengo a informar que las mantícoras y el hombre lobo han sido eliminados.- Dijo secamente e hizo una larga pausa, como si las estuviera analizando. A caperucita se le congeló la sangre del pecho con la noticia, su corazón parecía no latir, por dentro sentía como si algo se hubiera roto, quería soltar el amargo llanto pero solo se quedó parada inmóvil...-(Miente... Miente!... MIENTE!!)- Por dentro escuchaba la voz sedosa de Karan como si lo tuviera justo al lado, rogándole que mintiera para permanecer a salvo. Lo que ella quería era abalanzarse sobre el cazador y descargar su rabia y dolor golpeando al asesino de su único amigo... pero por alguna razón desconocida su cuerpo no se movía, sus ojos se pusieron cristalinos y comenzó a llorar. -(Miente...)- Le repetía la voz interna sin parar. -No... no puedo creerlo...- Salieron leves palabras de su boca. -Él era un lobo... ¡¡UN LOBO!!- Se llevó las manos a la cara y continuó llorando.

Una Historia De Caperucita, El Lobo Y El CazadorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora