Capitulo 1: Parte 67: La Guarida de los Ghul

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Kerim y Tina ya habían llegado a la entrada de la guarida, era un lugar horrible. Kerim tendría que pasar por el pozo lleno de los huesos de las victimas de los Ghul para así poder llegar a la guarida. El lugar era muy oscuro, no había ni un rayo de luz, solo los cristales que Kerim y Tina llevaban en sus manos, eran la única fuente de luz en aquel lugar. El eco de los gritos de los Ghul se escuchaba desde la entrada, a juzgar por el sonido, debían haber unos cien Ghul ahí dentro.

"¿Estas seguro de que quieres hacer esto Kerim?, todavía estas a tiempo de salir de aquí", dijo Tina con esperanzas de que Kerim se arrepintiese y regresase con esta a la sala de los cristales; 

"Lo siento Tina, se cuanto deseas que no haga esto, pero, ¿y si mi padre esta ahí dentro?, ¿y si todavía estoy a tiempo de salvarlo?. Si doy media vuelta ahora mismo y voy contigo, nunca me perdonaría el no saber si pude haber salvado a mi padre o no", dijo Kerim mientras le tomaba las manos a Tina;

"Kerim, no quiero perderte ahí dentro", dijo Tina mientras una lagrima bajaba por su mejilla;

"No me perderás, te lo prometo. Cuando este ahí dentro, y mi vida corra peligro, juro que pensare en ti y en que me esperas, para así obtener las fuerzas necesarias para seguir luchando", dijo Kerim limpiando la lagrima sobre la mejilla de Tina;

"Aquí te esperare, no importa lo que suceda, aquí siempre estaré", dijo Tina mientras sujetaba con fuerza las manos de Kerim;

En ese momento, Kerim mira a Tina, la cual lloraba por el miedo a perderlo. Sin pensarlo dos veces, Kerim se lanza y besa a Tina, estos cierran sus ojos y se abrazan fuertemente mientras sus labios están en contacto. Las lagrimas de ambos se combinaban al los dos rostros rozar el uno con el otro. Tras unos segundos, Kerim y Tina se miran a los ojos, el dolor que estos sentían se podía ver en sus miradas.

"No importa lo que pase, siempre recuerda que... Te amo Tina", dijo Kerim dándole un beso a Tina, soltándole las manos y corriendo hacia el pozo de huesos, mientras lagrimas bajaban por su rostro;

Mientras Kerim caminaba sobre los huesos, Tina lo observaba en la distancia mientras lloraba y caía de rodillas al suelo. 

"Yo también te amo Kerim", dijo Tina con voz baja entre llantos mientras Kerim desaparecía en la oscuridad;

Al llegar a la entrada de la guarida, Kerim sentía como su corazón palpitaba muy fuerte y rápido. Este comenzó a hacer lo que Joseph le había explicado, concentrarse en su poder, para que así, este, tuviera control y pudiera activarlo cuando el deseara. Cerrando sus ojos y concentrándose en su padre y en Tina, Kerim toma fuerzas y una luz blanca muy potente comienza a irradiar de su cuerpo. Al abrir sus ojos, estos eran blancos como de costumbre, pero esta vez parecían dos llamaradas de fuego, mientras que su cabello blanco parecía que había cobrado vida. 

"Esto es por ti papa", dijo Kerim mientras comenzaba a correr hacia dentro de la guarida;

Al correr por la entrada de la guarida, este observa como el suelo estaba cubierto de mas huesos, habían esqueletos por todos lados, parecían ser de animales. Un muy mal olor salia de las entrañas de la guarida, en cuanto mas Kerim se acercaba, mas fuerte era el olor. Bajando el ritmo, Kerim deja de correr y comienza a caminar, es ahí cuando este ve que el pasillo de la guarida, se abría paso a una gran sala. Este comenzó a ver como los Ghul tenían a por lo menos media docena de personas atadas de manos y pies, esperando solo a que estas terminaran el proceso de transformación. Desde la distancia se podía ver como algunos de estos ya tenían sus ojos verdes y sus características físicas ya cambiadas, mientras que otros no estaban tan avanzados en la transformación. Kerim rápidamente corrió hacia donde esas personas estaban con la ilusión de encontrar a su padre, pero al este acercarse, estas trataban desesperadamente de atacarlo, pero las cadenas que estaban atadas a la pared se los impedían, estos ya no era humanos. 

Kerim siguió buscando a su padre, ya era muy tarde para salvar a esas personas, ya no eran humanos, tenia que enfocarse en Trevord. Mientras este continuo por la guarida, Kerim comenzó a escuchar gritos de Ghul. Al parecer, el alboroto que habían hecho los Ghul encadenados, había atraído la atención de los demás. Rápidamente, Kerim se esconde tras una gran roca mientras al menos diez Ghul llegaban al lugar. Este intentaba mantener la calma en todo momento, por lo que este solo pensaba en su padre y en Tina quien lo esperaba. Al los Ghul pasar y dirigirse hacia los encadenados, Kerim aprovecha la oportunidad y comienza a dirigirse al pasadizo por donde estos habían salido. 

El pasadizo por el cual Kerim caminaba muy silenciosamente, era muy asqueroso, sangre verde de Ghul corría por el suelo, mientras que el olor desagradable se hacia insoportable.

"Todo esto es sangre de Ghul, pero, ¿de donde proviene?", pensaba Kerim mientras se tapaba la nariz y miraba a sus alrededores;

Tras unos minutos, Kerim llega a lo que parece ser una gran sala, en la cual habían montañas de cuerpos de Ghul apiladas en las esquinas. Esto era horrendo, era... una masacre. Kerim rápidamente se escondió y vio como en el centro de aquel lugar, había un Ghul muy grande, mucho mas grandes que los demás. Los otros Ghul, formaban filas para llegar hasta el, estos llevaban casi arrastrados a otros Ghul encadenados los cuales perecían recién transformados. A Kerim le tomo un tiempo analizar lo que sucedía, pero al final entendió. Esos Ghul le llevaban los recién transformados para que el Ghul gigante los inspeccionara y determinara, al parecer, si estos eran lo suficientemente buenos como para permanecer en la manada. Los que no eran lo suficientemente buenos, era sacrificados por el mismo Ghul gigante en persona. 

"Por eso es el mal olor y la sangre verde en todos lados. Esto es, horrible", pensó Kerim mientras las nauseas se apoderaban de su estomago;

Al analizar la situación, Kerim vio como había unos Ghul recién transformados que todavía tenían algunas características de humanos, a estos Ghul, no se les permitía avanzar, por lo que estos eran asesinados. Kerim comenzó a observar de donde era que estos sacaban los recién transformados, este tenia que ver si su padre aun estaba ahí. Rápidamente, Kerim comenzó a seguir a algunos Ghul, estos salían de un pasadizo anexo a la cámara de tortura, como Kerim la llamo. Cautelosamete, Kerim logra escabullirse por el pasillo cuando ningún Ghul venia. Al final del pasillo, este ve al menos veinte Ghul recién transformados, lo podías saber por su rostro, el rostro aun era reconocible, podías ver que se trataba de una persona la cual sus características estaban cambiando poco a poco.

Estos Ghul, algunos tenían las garras ya transformadas completamente, algunos su piel ya era de color gris, otros ya tenían sus ojos verdes, mientras que otros ya se encontraban completamente transformados. Kerim comenzó a mirar cada uno de los Ghuls/personas, ninguno parecía ser su padre. Las esperanzas de que su padre estuviera vivo, rodaron al suelo. 

"Padre como lo siento, no llegue a tiempo", decía Kerim en voz baja mientras las lagrimas bajaban por su rostro; 

Cuando, desde una esquina del pasadizo, se escucho la voz temblorosa de un hombre.

"Kerim hijo, ¿eres tu?", dijo una voz al final del pasadizo;

El corazón de Kerim comenzó a palpitar muy rápido, ¿era acaso su padre?. Rápidamente, Kerim comenzó a correr hacia donde la voz había provenido. Al llegar, este pudo ver de que se trataba, era su padre!


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