Capítulo 24: Una Operación Hacker

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Nuria's POV

En ese momento agradecía haber pedido el número de móvil de Indra, justo cuando terminó la llamada de Diana me apresuré a encontrar el papelito entre el desorden de mi habitación y llamarle, tuve que marcar el número tres veces para que me lo cogiera, y cuando me lo cogió parecía o recién despertado o borracho, o las dos.

-¿Hola..?-me respondió, de una manera vaga y pastosa.

-Hola, ¿Indra, eres tú?-claro que era él, incluso en esas circunstancias podía reconocer su voz, pero quería asegurarme.

-¿Qué? ¿Eres la de ayer?

-Nuria-le respondí, enfadada, hasta que pensé un poco y me tapé la boca, no debería de haberle dicho mi nombre, después de todo cuando nos vimos me negué a decirselo.

-¿Nuria? ¿así es como te llamas?-yo hice una mueca, y le respondí afirmativamente-. Al final me lo has dicho, ¿ no dijiste que..?-pero no quise dejar que siguiera, no me gusta perder, y yo iba en desventaja.

-No te llamo por eso-él debió asustarse ante mi tono, porque no lo escuché reaccionar-, ¿estás... estás con O.E.C.E.D? Me refiero en su cuartel.

-Sí, claro, sigo siendo uno de sus principales agentes-yo asiento, aunque sé que el no me puede ver.

-Necesito que me hagas un favor. Han mandado uno de los dragones cámara a la casa de mi amiga, que es una rider-ryu, necesito hackear el sistema, bueno que tú lo hagas, que borres la dirección o la cambies o algo, pero que no la encuentren.

-¿Y qué te hace pensar que te voy a ayudar?-yo me quedo helada por unos instantes, ¿no me iba a ayudar? ¿en serio? No podía ser, este no podía ser el Indra que yo conocí ayer. Iba a empezar a decir algo cuando escucho una risa al otro lado de la línea-claro que te voy a ayudar. ¿Tu amiga es a la que capturaron ayer?

-Sí.

-Para empezar decirte que he notado que esa amiga tuya tiene cierta tendencia a meterse en problemas. Segundo, dile que tenga cuidado, está todo muy agitado por aquí, y no creo que sea por el cumpleaños de nuestro general-entonces, desde el móvil escucho numerosos pasos-¿los oyes?

-Sí, de todas formas ¿crees que habría alguna manera de salvarla?-hay silenco durante unos segundos.

-Tal vez, depende de cuanto te quieras arriesgar-me dice. Yo dudo, pero no por mí.

-¿Y tú?-él no me entiende-¿cuánto te quieres arriesgar?-escucho una carcajada sin gracia, es suya, pero no lo parece.

-Créeme-me dice con voz pesada-si me echaran de aquí sería lo mejor que me podría pasar. Ya no me importa cuanto arriesgarme, es más una distracción-casi siento sus males, no sé lo que hará O.E.C.E.D pero debían de ser unos monstruos si le hacían a una persona pasarlo tan mal.

-Entiendo-no lo entendía, pero creí que podía confiar en él-¿entonces cuales son esos famosos riesgos que hay que correr?

-Pues, para empezar la dirección de tu amiga está en todos los dispositivos de O.E.C.E.D, incluso en el mío-yo no paraba de dar vueltas en mi habitación mientras mordía mi uña con impaciencia, pero pronto me arrepentí, cuando caí de bruces en la cama luego de tropezar con la ropa del suelo.

-Puto desorden-maldije, supuse que Indra no me había escuchado ya que seguía hablando.

-Solo veo una posible solución a esto. ¿Tienes a algún hacker?-me pregunta, yo asiento, tengo a uno, y a otro de reserva. Luego tengo en cuenta que no me puede ver.

-Sí, tengo.

-Bien, ¿me darás sus direcciones?-yo decidí que no pensarselo mucho y confiar directamente era lo más adecuado.

La Amiga del DragónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora