Las noches en aquel calabozo fue terrible, las paredes estaban húmedas y frías, ya que el invierno se había hecho presente y la nieve empezaba a caer lentamente. Wei wuxian se abrazaba así mismo mientras trataba de calentarse un poco, solo quería que todo terminara –Lan zhan...- susurraba mientras temblaba, después de unos minutos unos pasos apresurados desde lejos se podían escuchar, pero el mantuvo sus ojos cerrados. Los pasos terminaron justo en su celda.
-Príncipe Wei...soy yo Wen ning- dijo aquel joven, Wei wuxian abríos su ojos para ver a aquel joven con una bandeja con una taza de té con rodajas de pan integral.
-Joven no tenía que venir de nuevo, si lo llegan a atrapar- decía Wei wuxian, este suspiro –No se preocupe mi hermana es doctora y yo me encargo de llevar la medicina a los pacientes, hace unos días un guardia se enfermó así que uso esa excusa para poder entrar- menciono con valentía.
-Ya veo...hace un segundo mencionaste que tu hermana es doctora me podrías decir cómo se llama- pregunto curiosamente, este asintió con entusiasmó –Claro su nombre es Wen Qing- Wei wuxian sonrió, sabía que se traba de esa mujer.
-Conque es ella...
-Príncipe Wei tome coma un poco, el príncipe Wen no estará aquí hasta hoy en la tarde, pero no se preocupe lo sacaran de aquí en unas horas, hablare con mi hermana para...
-No tienes que hacer nada, si se involucran conmigo pueden salir heridos ya has hecho suficiente me gustaría que ya no vinieras, no te preocupes por mi estoy bien- menciono con una sonrisa forzada, Wen ning sabía que el solo no quería que los descubrieran, pero tampoco lo podía dejar así, para ser exactos su hermana no sabía nada de lo que él estaba haciendo a escondidas y si lo llegaba a descubrir no lo dejaría salir por un mes como castigo, sabe cuál es el temperamento de su hermana, pero que podía hacer no podía ver como una persona tan hermosa y frágil como él estaba en ese lugar frió y feo.
Wen ning sabía que Wei wuxian estaba comprometido con el príncipe del reino GusuLan, los rumores se habían esparcido por todos lados, pero eso no le importaba al príncipe Wen Chao, un príncipe que no merecía ser heredero o es lo que casi todos pensaban, ese tipo era asqueroso, pervertido, despiadado y retorcido un ser incorregible, con solo pensar que se casaría con ese tipo Wen ning apretaba sus puños, él estaba empeñado en ayudarlo, esa tarde hablaría con su hermana para que lo ayudara.
-Padre he vuelto- exclamo mientras se inclinaba frente a este en modo de saludo, quien lo miraba seriamente.
-Que te tomo tanto tiempo, debías de haber llegado en la tarde- menciono irritado, este trago en seco mientras se ponía de pie.
-Lo siento padre en el camino nos encontramos con unos bandidos, eso retraso nuestra vuelta al palacio, como también algunos caballos fueron heridos-
-¿Ladrones? No es de esperase, me imagino que acabaste con todos ellos- dijo poniéndose de pie, este asintió.
–Claro que si no dejamos a ninguno vivo- respondió mientras el rey se acercó a este y antes de marcarse toco su hombro y dijo –Oh por cierto el príncipe Wei wuxian está aquí lo traje como querías, espero mi parte del trato después- este abrió grande sus ojos y sonrió –Pero no lo veras hoy tuve que reprenderlo un poco así que lo mande al calabozo, no tienes permitido verlo hasta mañana- y sin más se marchó dejando a Wen chao con una sonrisa de oreja a oreja.
Horas antes....
-No...en que etas pensando quieres que nos maten- se escuchó una vos femenina gritar en aquella habitación, este se asustó e hizo señas de que no elevará su voz –Hermana no grites...
-Cómo quieres que no grite, te escuchas a ti mismo, estoy en desacuerdo con esto.
-Pero...hermana reconsidéralo, el príncipe Wei es una buena persona tu sabes lo que les hace Wen chao a sus concubinas.
-Wen ning sé que estas preocupado por él y lo sé porque desde ayer le llevas comida y medicamentos yo...
-¿Lo...lo sabias?- pregunto casi tartamudeando.
-Si soy tu hermana después de todo, se cuando estas tramando algo así que te seguí hoy en la mañana- exclamo desviando la mirada –Por un momento pensé que se trataba de una chica...
-Pero que cosas dices hermana....pero no cambiemos de tema tu misma tienes planes para irnos de este castillo- exclamo firmemente.
-Shh no es lo mismo, estamos hablando de ayudar a escapar al príncipe Wei....nos perseguirán hasta los mejores asesinos, pero si se trata de solo nosotros no nos perseguirán más que unos cuantos soldados- dijo mientras tomaba asiento refregándose la cabeza, este se sentó a su lado y tomo su mano.
–Hermana tu misma una vez me dijiste procura hacer lo que tu corazón te dice y tu alma no cargara con pecados- esta lo miro y suspiro, sabía que su hermano cuando se proponía en lago era testarudo, su hermano era una persona simple y bondadosa, un muchacho fácil de engañar, era ingenuo y un poco torpe, pero tenía un corazón puro, le gustaba ayudar al prójimo sin recibir nada a cambio eso le molestaba un poco pero verlo feliz era lo que más amaba, y bien si tenía planes de irse de ese lugar, pero llevar a un príncipe deseado por Wen Chao era peligroso no solo para ellos sino para casi todos.
-Está bien, pero no te prometo nada lo intentaremos mañana en la noche, hablare con uno amigos tu procura empacar lo que necesitaremos ¿Entendido?- menciono esta y este asintió emocionado, no podía creer que ese día llegaría serian libres de ese infierno que los mantenía atrapados tal vez su destino era encontrase con el príncipe Wei wuxian.
Ellos eran solo niños cuando sus padres murieron en una guerra, su padres eran doctores que fueron llevados a las guerras para curar a aquellos soldados heridos, pero por desgracia murieron, al morir sus padres no tenían familiares con quienes quedarse así que los mandaron el reino Qishan Wen para trabajar, en ese tiempo Wen qing tenía 13 años y Wen Ning solo 9 años trabajaron lavando la ropa como entre otras tareas.
Una vez de grande Wen qing trabajaba en la cocina cuando el príncipe Wen chao con solo 15 años de edad se lastimó el brazo mientras molestaba a unos niños, Wen Qing sin pensarlo lo ayudo dándole primeros auxilios y gracias a eso el rey Wen Ruohan puso sus ojos en ellos y como agradecimiento dejo que vivieran en uno de sus pabellones privados, cuando Wen ning enfermo no había doctor que lo atendiera y gracias a que ella observaba como sus padres trabajaban en aquellos días tenia conocimientos, leyó libros de la biblioteca y aprendió más cosas para después tener el conocimiento básico de una doctora, gracias a eso su hermano mejoro y cuando un doctor llego para revisarlo este ya se encontraba un poco mejor.
El doctor estaba sorprendido de las habilidades de la muchacha así que pido permiso al rey para tomarla como aprendiz diciéndole que tendría un muy buen futuro como doctora, el rey no se negó tampoco le tomo tanta importancia y gracias a eso Wen Qing se convirtió en una doctora como sus padres fueron alguna vez.
-Las grandes almas tienen voluntades, las débiles tan solo deseos....que se supone que haga madre, padre.
Hola corazones perdonen por tardar tanto en actualizar he estado ocupada, espero que les haya gustado se que fue un poco corto pero estoy escribiendo otro capítulo para más tarde, perdonen si hay algunos errores ortográficos, y para aquellos que me preguntan si abandone esta historia tranquilos no voy a abandonarla :)
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Wᴇɪ ᴡᴜxɪᴀɴ ᴜɴ ᴘʀɪɴᴄɪᴘᴇ ʀᴇᴠᴏʟᴛᴏso.
RomanceEn los reinos todo era tranquilo, la paz abundaba en todos lados aunque todavía había indiferencia y estatus eso no quitaba el hecho que las guerras todavía no eran presentes, el rey Wei Changze junto a su esposa tuvieron un hijo que le pusieron de...