Capitulo 15 El reino Qishan Wen

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Sonidos de voces se podían escuchar como el ruido de una enorme puerta ser abierta, sus ojos se abrieron de apoco y todo estaba borroso, su cuerpo se sentía pesado y adormecido, sintió como unas fuertes manos lo tomaron y lo cargaron para después de ser recostado en algo suave y cómodo. Luego se pudo escuchar como una puerta era cerrada, el silencio abundo y entonces...se reincorporo de golpe
-¡Lan zhan!- exclamo sintiendo una fuerte punzada en la cabeza y entonces mira hacia todos lados para ver que estaba en un cuarto y todo a su alrededor era de color rojo, tanto las cortinas como las frazadas y sabanas, Wei wuxian bacilo hasta que recordó todo y entonces se puso de pie, pero un mareo casi provocó que se cayera, pero se sostuvo de la pared. Con pasos lentos se acercó a la puerta, que para su mala suerte estaba cerrada, entonces miro la venta y se acercó abrió las cortinas y sus ojos se abrieron muy grande al ver que estaba en un castillo y no en cualquiera sino que en el reino Wen, ahora sí que estaba jodido estaba en la boca del lobo.

-Estos hijos de....- Decía mientras arrogaba un almohadón contra la pared, trato de abrir la ventana pero no pudo, con un suspiro se dejó caer al firme suelo en una esquina de la habitación, con un suspiro susurro
-Lan zhan ¿dónde estás?-

Y entonces las puertas de la habitación fueron abiertas, para dejar ver como una mujer con aspecto bello se acercó a él con unas prendas de ropa.

-Ponte de pie, el rey quiere que te cambies y que lo acompañes al almuerzo de hoy.

-¿Almuerzo? Quieres decir que me secuestro para que sea su acompañante- dijo mientras fingía una risa, la mujer solo suspiró y coloco las prendas en la cama y antes de salir dijo -No lo sé yo solo sigo las ordenes en 5 minutos paso por ti- Wei wuxian solo arrojo otra almohada contra la puerta gritando -Déjenme salir- después de 5 minutos como la mujer había dicho lo paso a buscar pero solo suspiró al ver que no se había colocado la ropa que le llevo.

-¿Porque no te lo pusiste?- pregunto y este se puso de pie.

-Porque no quiero- respondió, esta solo lo miro seriamente y abrió la puerta -Bien como quieras, sígueme- exclamo, Wei wuxian con los brazos hacia atrás la siguió para ver que fuera de la habitación había dos guardias que estaban cuidando su puerta, este resoplo y le saco la lengua a uno de esos guardias quienes no le prestaron atención -Aburridos- bufo.

La mujer lo guió por los amplios y lujosos pasillos que para colmo también había una variedad de rojo por todos lados, caminaron en silencio en todo el recorrido hasta que este no lo soporto -Dime cómo te llamas estoy curioso- la mujer solo siguió caminando.

-No me lo dirás bueno...

-Has silencio- respondió y este suspiro.

-Oh vamos si moriré aquí por lo menos me gustaría saber el nombre de alguien tan bella como tú- la mujer se detuvo y dijo -We qing ese es mi nombre y no morirás, ahora has silencio que hemos llegado- en ese instante las puertas se abrieron para dejar ver una enorme mesa llena de comida y aun hombre alto y robusto sentado.

-Su majestad lo he traído- exclamo Wen qing este hizo seña de que pasará.

-Adelante príncipe Wei wuxian no seas tímido- exclamo mientras seguía comiendo, este con resoplo se acercó a la mesa y tomo asiento a donde le indicaron.

-....-

-Veo que no te has puesto lo que te mande, es una lástima te hubiera quedado muy bien- decía mientras tomaba vino.

-Lo siento no era mi talla- exclamo mientras tomaba el cuchillo y tenedor para cortar la carne y comerla, este sonrió de lado.

-Ya veo- respondió.

-Digame ¿Que quieren de mí? ¿Qué paso con mi reino? ¿Dónde está Lan zhan?- preguntaba, este se empezó a reír.

-Que le parece tan chistoso su alteza- dijo mirándolo serio.

-Nada solo que no sabes cuál es tu lugar aquí ¿verdad?-exclamo cambiando la risa por una vos gruesa, dejo de comer y se recostó hacia atrás en su silla.

-Oh lo siento se supone que debo de ser sumiso y con clase, siento mucho decepcionarte- grito clavando un cuchillo en la mesa, este solo suspiro.

-Pare que los rumores eran ciertos, pero no puedo hacer nada, cuando mi hijo quiere algo lo aferra tanto hasta tenerlo, yo solo cumplo su deseo- decía poniéndose de pie.

-¿Qué quiere decir?- pregunto.

-Mi hijo quiere casarse contigo- menciono, este se pudo se pie.

-No lo haré- grito.

-Uh jovencito no te estoy preguntando, lo harás- exclamo agarrándolo del mentón, Wei wuxian permaneció firme no se dejaría pisotear y mucho menos manejar.

-En tus sueños- respondió escupiendo en su rostro.

-¡Guardias!- grito Wen ruohan.

-Llévenlo al calabozo para que piense en sus acciones- dijo y los guardias asintieron, pero antes de soltarlo le susurro en el oído -Mañana llega mi hijo así que espero que sepas comportarte- y entonces lo soltó, Wei wuxian fue llevado a los calabozos, era un lugar frió y silencioso todo era oscuro. Wei wuxian miro el suelo para ver que había una especie de líquido viscoso con un mueca de asco tomo asiento y suspiro dejando caer unas lágrimas, recordando a sus padres a su maestro y a su amado, solo quería que esa pesadilla terminara de una vez, solo quería que todo volviera a ser como antes -Mama..- susurró dejando caer más lágrimas. Después de unas horas Wei wuxian se había quedado dormido, la luz de la luna ya se hacía presente y sonido de unos pasos acercándose de podía escuchar hasta que una vos susurro -Joven príncipe Wei- este abrió sus ojos rápidamente para ver como un joven del otro lado de la reja sostenía una bandeja con lo que se podría decir que era comida.

-¿Quién eres?- pregunto poniéndose de pie.

-Mi nombres es Wen ning no quiero hacerte daño solo te e traído un poco de comida debes de tener hambre ¿verdad?- exclamo mientras hacía pasar la bandeja por debajo.

-Sabes que pueden encerrarte por esto- dijo Wei wuxian y este bajo la cabeza.

-Si lo sé, pero...-

-Está bien, gracias- respondió tomando la bandeja, este se puso feliz, Wei ying sonrió, cuando de pronto se escuchó un ruido.

-Son guardias ya debo irme o se darán cuenta, hasta luego príncipe Wei- dijo este pendiéndose de pie.

-Ten cuidado y solo llámame Wei ying- exclamo y este asintió marchándose del lugar, este solo suspiro y sonrió al parecer si quedaban gente bondadosa en el reino wen.

Wᴇɪ ᴡᴜxɪᴀɴ ᴜɴ ᴘʀɪɴᴄɪᴘᴇ ʀᴇᴠᴏʟᴛᴏso.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora