Atrévete a creerlo (Rin x Lectora)

Capítulo 5

Narra Yukio

– Hagámoslo desde el inicio – si ella debía de conocer toda la escuela, entonces tenía que darle todos los detalles – Tal y como debes de saber, está prohibido salir de la academia al menos de que sea demasiado urgente.

– ¿No podré entonces enviar cartas a mis familiares?

– ¿Cartas?, por supuesto que puedes hacerlo – señalé un buzón – Allí es en donde las dejan, pero como toma demasiado tiempo en ir y regresar, me lo puedes entregar y ya yo lo dejo – seguí caminando. Llegamos hasta la entrada de la academia – Como verás, este lugar es demasiado enorme y un laberinto para los que apenas inician, es por eso que es importante tener tus llaves a la mano para cualquier ocasión. También porque hay demasiadas trampas que el Director Mephisto hizo.

– ¿Me entregarás demasiadas llaves?

– Normalmente se te asignará una sola llave sólo para tus clases de exorcismo – introduje la llave y la abrí – Pasa tú primero.

– Está bien – pasó al otro lado al igual que yo – ¿Y aquí es...?

– Unos de los patios que no tienen trampas y que son accesibles para todos – seguí caminando mientras ella me seguía el paso – Por cierto, no debes de perder tu llave por nada del mundo. Tampoco debes mencionar las clases especiales a los demás.

– ¿Son muchas las personas que están para ser exorcistas?

– No realmente, son menos de diez estudiantes – atravesamos el jardín y estábamos en el patio principal – Bueno, aquí hay algunas personas que pasan sus descansos mientras otros simplemente se quedan en la cafetería.

– Ya veo, ¿los dormitorios están demasiado lejos de los salones? ¿Son compartidos o individuales?

– En este caso son individuales, los que no estudian exorcismo los ponen compartidos. Muy bien, aho- – el teléfono me interrumpió. Lo saqué de mi bolsillo para saber quién era – TN__, ¿me permites un momento?

– Sí, está bien.

– Gracias, no tardaré demasiado – me alejé de TN__ para que no escuchara la conversación, ya que los que me habían llamado era más que nada la Orden de la Verdadera Cruz – ¿Sí? ¿Qué sucede?

– Okumura, necesito que vengas aquí inmediatamente.

– ¿Tanto como para que tú me llamaras ocupando el número de la OVC?

– ¡Oh, vamos!, si lo hacía desde mi número telefónico sabría que me ignorarías – era cierto, si hubiera visto el número de Shura, la dejaría esperando – Bueno, bueno, a lo que iba. Al parecer tienen algunos problemas con unos demonios y me mandaron para exterminarlos. 

– ¿Y eso que tiene que ver conmigo?

– Piensa, si te estoy llamando es porque quiero que me ayudes. Tengo cosas pendientes que hacer y sinceramente acabaría antes si tú me ayudaras.

– Yo también tengo cosas que hacer e incluso estoy haciendo esperar a una persona en estos momentos.

– Oh, creo que ya lo capto ~  – dijo con picardía – ¿Acaso estás con una chica de tu edad?

– Es mi nueva alumna, no te confundas con otras cosas. Ya que te oigo tan tranquila, entonces te colgaré en este instante y-

– ¡Te enseñaré una nueva técnica! – admito que capturó mi atención – La técnica que me habías dicho que te enseñara. Ahora, si estás aquí, te la enseñaré.