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Skara y King condujeron en silencio, sólo acompañados por los sollozos de varias mujeres.
— King...
— Lo sé, estuve mal, lo sé.
— Al menos lo admites.
— Pero no fue solo mi culpa ¿Verdad? - Skara no respondió a eso.
— Ya llegamos.
— Aún es temprano. - la ojigris suspiró —. Tengo sueño, me cubres mientras me duermo un rato.
— Claro, amor.
La chica se recostó en el asiento, dormir en ese momento era una mala idea, pero el plan estaba tan en la mierda que no encontró mejor solución que hecharse una siesta.
Solo podía rogar para que Jerbo y Edric llegaran a tiempo. A sus espaldas, King encendió la radio.
— ... Dos sospechosos gravemente heridos fueron trasladados al hospital estatal, se desconoce su identidad hasta el momento... - cambió de estación con una mueca.
— ... Del secuestro a la Casa Blanca hace apenas unas horas...
— No, no, no ¿No hay música? - se quejó en voz baja.
— ... En condiciones críticas, puesto que recibió balazos en el pecho y piernas, mientras que el otro individuo está en coma debido a contusiones en el cráneo.- ahí King se detuvo —. Serán atendidos hasta recuperar la consciencia, y se los interrogará en busca de información útil.
— Bueno, al menos no murieron ¿No? - susurró apagando la radio.
Entonces recordó a alguien.
— Oye, Matt, oh, mi buen amigo Matt. - sonrió levantándose. El castaño se removió con sus mordazas aún puestas —. A mi también me agrada verte, bueno, pasemos a la cuestión, dime... ¿Fuiste tú quien golpeó a nuestra colega?
Le quitó la mordaza, a pesar de que él chico ya estaba negando.
— No, no, se lo juro yo no...
— Mira que no me gusta que me mientan, ya viste lo que pasó con la última tipa .- recordó con la paciencia de una maestra jardinera —. Sólo es curiosidad, además, no es que pueda hacerte nada, eres el hijastro del presidente.
Mattholomule hizo una mueca, ya que era clara la burla en la voz de su secuestrador.
— ¿A... Amber?
— Si, es misma, ya sabes, bajita, cabello verde menta...
— ¡Fue en defensa propia! .- King asintió.
— Tienes suerte de ser tan valioso, Mattholomule Jackson, de otra manera estarías colgado del techo desangrandote. - bufó volviendo a colocarle la mordaza con brusquedad.
Se sentó de vuelta en el asiento del conductor y se dedicó a hacer zapping entre las estaciones de radio locales. Tuvo la tentación de despertar a Skara para que eligiera una. En los viajes, siempre era la chica la que elegía la música, puesto que el estratega era muy indeciso.
Miró a Skara, era muy hermosa, simplemente la había aceptado. Su novia era hermosa, tanto física como mentalmente. Skara era la única persona capaz de serenarlo hasta tal punto que se podía quedar dormido ahí mismo.
King rogó para que esa tranquilidad y paz se quedara para siempre, para que no volvieran a separarse y para que pudieran al fin vivir en paz en una casa normal y con una vida al menos rozando la normalidad.
Cómo le gustaría dejar todo y largarse con Skara a una isla de esas que siempre quisieron visitar, tal vez el Caribe o las Bahamas, o Hawaii o Jamaica. Tal vez conseguirse unas vacaciones en la playa, y despertarse todos los días a las doce del mediodía y acostarse a las seis de la mañana.
Claro que la tranquilidad por la que tanto veló se fue por el caño cuando oyó el motor de una motocicleta, mas concretamente su motocicleta. Miró por el retrovisor, Jerbo y Edric le sonrieron.
— Skara, corazón, despierta, J y Eb-B llegaron.- King la sacudió del hombro levemente, Skara se incorporó de golpe.
— ¿Qué? ¿Qué pasa? ¡¿Que hicieron?!
— Nada, cálmate amor. - rió el chico.
— ¡Buen día grupo! - gritó Edric abriendo la puerta del camión de golpe, logrando que varios estallaran en llantos —. Ay, ni que fuera tan feo.
— Blight, no hables con extraños. - lo retó Jerbo empujándolo hacia adelante del camión.
— Los veo de buen humor. - sonrió Skara.
— Bueno, solo somos tres candidatos al gran premio. - sonrió Edric
— No, somos cuatro.
— Perdí una apuesta contra Ed, asi que aunque gane, el se queda con el premio.
— ¡Ja! ¡Es cincuenta porciento contra dos de veinticinco! ¡Voy a ser rico! .- festejo él.
— Tienes suerte, ustedes hicieron todo el hackeo... - se quejó King.
— Tú hiciste la mayor parte del plan.- dijo Jerbo.- Y Confirm...
Edric le pisó el pie, lo miró con seriedad.
— ... Y Confirmación no está en posición de reclamar el premio.- dijo él.
— Boscha y Adelfa renunciaron así que... Si Lucia gana el premio...
— Si Lucia gana el premio, entonces es suyo. - soltó el estratega —. Se lo merece, puso su vida en riesgo por nosotros.
— Es verdad. - concordó Jerbo —. ¿Saben algo de ella?
— Por lo que oí en la radio, está junto con Confirmación en el hospital estatal, ambas están en situación crítica. - les informó él.
— Me cago en todo. - murmuró Skara —. Bueno, terminemos con esto de una vez, me quiero ir de aquí.
Los cuatro bajaron, Edric se volteó a ver a los rehenes atados y de rodillas, y les habló.
— Pórtense bien, el sabroso ya vuelve. - sonrió cerrando de un portazo.
Los cuatro se metieron a la casa, Jerbo tomó disimuladamente la mano de Edric y entrelazo sus dedos, el peliverde le sonrió.
— Todo va a estar bien, Jer. - intentó calmarlo en un susurro.
— ¡Al fin! ¡Creí que tendría que buscarlos al camión! - Edalyn Clawthorne y sus dos guardaespaldas, estaban ya en la sala, la mujer estaba sentada en el sofá victoriano de la vez anterior.
— Solo estábamos reagrupandonos. - descartó Skara.
— Faltan varios aquí. -observó la mujer.
— Boscha y Adelfa desertaron, y... Confirmación y Lucia no están en condiciones de presentarse.
— Supongo que eso anula sus oportunidades de conseguir el dinero ¿Verdad?
— Lucia me dijo que aún participa.- dijo King
— Los demás, no. -se limitó a aclarar Edric.
— Bueno, traigan el botín ¿No? .- apuró la Dama Búho.
Jerbo y Skara salieron y trajeron a todos como si fueran una fila de esclavos, Edric y King tenian en sus rostros una Mirada de Novio Orgulloso™.
— Aquí está su ganado, Dama Búho. - King obligó a Mattholomule a ponerse de rodillas y le quitó la venda de los ojos.
La mayor sonrió y juntó sus manos con aspecto tremulo.
—Perfecto.
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Al Diablo Con El Plan || TOH Adaptación
FanfictionLos ocho mejores y más buscados criminales fueron convocados a una prueba ¿La recompensa? Más dinero del que necesitaran jamás en sus vidas. ------------------------------- - Hasta donde yo sé, solo se conocen dos cosas sobre ella. - ¿Ah, si? ¿Y cuá...