El mundo se detuvo, o al menos para mí.
El... El era muy parecido a mí, es como si me estuviera viendo a mi mismo. Claro, este tenía el cabello negro, sus ojos son azules muy oscuros.
Tiene la piel más pálida que la mía. Pero sin contar eso, tiene las mismas marcas que yo.–RESPONDE!- Gritó aquel desconocido.
Sentí mi cuerpo temblar, escalofríos me invadía mis labios temblaban.
–No responderas?!- Dijo mientras se lanzaba hacia mí.
Por instinto cerré mis ojos. No ocurría nada, no sentí nada, será que se fué?
–Responde... O esto pasará por aquel cuello..- Susurró.
Sentí una respiración muy cerca de mi, tome un poco de valentía y comencé abrir los ojos poco a poco.
Me arrepiento, abrí los ojos de inmediato, este estaba a centímetros de mi, sentía su respiración en mi rostro. Eso lo era todo, sentí algo frío en mi cuello, baje un poco mi vista para ver que era, aquí es cuando de verdad me sentí morir, tenía una navaja en mi cuello.
–Y bien?- Preguntó con semblante serio.
–E-eso d-debería preguntar yo...- Dije con la poca habla que me quedaba.
–Ah si?... Por qué?- Dijo mientras me tomaba de la barbilla.
–Por que estás es mi casa!- Dije casi gritando.
Ésto lo sorprendió y lo noté en su rostro, aproveché el momento. De un momento a otro yo estaba fuera de su agarré y también fuera de su alcancé.
Aquel desconocido me busco con la mirada, cuando me encontró suspiró para después empezar a caminar a mi dirección.
–Alejate!- Grité con enojó.
El contrario no detuvo su caminata al contrario, camino más rápido.
–Basta Menma...
Tanto como el desconocido y yo, miramos de dónde probenia aquella vos, de ese espejo..
Se pudo ver como de aquel espejo salía una luz azul para después dejar ver a una segunda persona.
Un pelinegro con los ojos ónix y una piel tan pálida casi blanca.
Este igual se sorprendió por un momento gracias a mi presencia, pero no tardó más de 15 segundos para volver a su estado serio.–Tú quién eres?- Dijo con semblante serio mientras sacaba suba pequeña espada de su espalda para después apuntarme con ella.
–Qué?!- Dije con sorpresa, es decir, no sería al revés? Esta es mi casa!
–Qué haces aquí Sasuke?- Dijo el contrario mientras guardaba aquella navaja con la que casi me mata.
–Ahora no...- Dijo mirándolo de reojo –Quién eres tú?!
–No es necesario Idiota, el es el dueño-
–Qué?- Dijo mientras miraba a ¿menma? – El?- Dijo con burla.
–¿Dueño?- Dije con duda.
–Si, que mala suerte no?- Dijo el pelinegro con marquitas.
–No entiendo.
–Ah?- Suspiró mientras me miraba.- Te lo dejo Sasuke... suerte.
–No estoy en desacuerdo, pero.. mamá tiene que saber sobre ésto- Dijo con la cara de amargado sabes?
–Basta! No entiendo! Quiénes son?! Qué hacen aquí?! Y qué es eso sobre dueño?!- Grité casi sin paciencia.
Ambos me miraron de la misma manera, serios.
No dijeron nada, solo pasaron nuevamente por aquel espejo.¿Qué mierda?!
Primero salen de un espejo como si fuera de lo más normal, casi me matan... Y ahora se van si decir nada más?!------------------------
Ten lindo día....
Si notas alguna falta de ortografía dímelo. :)