Experimento 1 y 2 (Crepúsculo) (TERMINADA)

8. ¿Final feliz?

POV Bella:

 El tiempo pasaba tan rápido que daba terror, mañana en la tarde sería nuestro enfrentamiento con los Volturi. 

Lo cierto es que tenía miedo, miedo de perder a Edward aunque este se la pase diciendo que no habrá lucha. ¿Qué tal si dañaban a Esme? ¿O lograban encontrar a Vanessa? Temblé ante la idea de esa pequeña niña en las manos de Aro o Dimitri.

Aunque eso pasaría sobre nuestro cadáver, Alice me había dado indicaciones muy precisas sobre cómo encontrar a J. J., al principio no supe a qué se refería. Sin embargo al ver los pasaportes con la foto de Seth y Reneesme se me vino el mundo abajo.

Le informé a Aris lo que le esperaba a mi sobrina. Tratamos de verle el lado positivo: ella tendría un futuro... sin su familia, pero lo tendría. 

Mi hermano estaba seguro que Seth la cuidaría y yo lo apoyaba. 

Hace 2 días que Charlie fue con Sue de vacaciones gracias a los voletos que yo y Edward le regalamos para Navidad.

Ahora mismo, todos estábamos al rededor de una fogata, Vanessa dormía tranquilamente en la carpa y Leah estaba afuera por si le daba frío.

- Nombra cualquier batalla americana -dijo Garret sentándose en un tronco- yo he estado ahí

- Little Bighorn -dijo Jacob con una sonrisa.

- Estuve a punto de morder a Custer -señaló la fogata con el dedo índice- pero los indios llegaron primero.

- No te creo -llegó Laura a sentarse al costado de la compañera de Benjamín- ¿dónde estuviste durante la secundaria?

- Soy un hombre ocupado -respondió encogiéndose de hombros.

- El asalto de Oberman, Constantinopla -Kate se sentó en las piernas de Garret y él la miró como si fuera un ángel. 

Sonreí, ya había experimentado como los vampiros cambian con sus parejas.

Edward me abrazó por la espalda y poco a poco todos empezaron a juntarse al rededor. Hablando de rebeliones Irlandesas y otras batallas. Me sorprendió porque eso lo había estudiado pero ellos lo habían vivido y lo contaban con tantos detalles, era increíble.

Mi vista se dirigió, brevemente, hacia una parte del círculo donde estaban mi hermano y Carlisle abrazados. Un pinchazo en mi pecho hizo que me encogiera, Edward me miró preocupado pero yo negué con la cabeza.

Durante toda la noche estuvimos hablando, riendo y, disimuladamente, disfrutando los momentos con nuestras parejas. 

Hubo un momento en la noche en que Aris y yo hablamos a solas. Yo extendí mi escudo para tener algo de privacidad.

- ¿Cómo crees que acabe este lío? -preguntó mirando a Carlisle, él estaba tan atento a las anécdotas que no se percataba de la mirada de Aris.

-No lo sé -me removí incómoda en el tronco de árbol sobre el que estábamos sentados.

- ¿Te sientes bien? -preguntó con el ceño fruncido. Me lo quedé mirando y una extraña sensación de tristeza me invadió, pude sentir las lágrimas en mis ojos- Bella ¿qué pasa? -se asustó por mi expresión.

- Te quiero hermano -empecé a sollozar y el me abrazó.

- Yo también te quiero pero no llores -me besó la frente- todo saldrá bien.

Un vació espantoso se instaló en mi pecho, me sentía fatal.

- Promete que, pase lo que pase, siempre serás mi hermano -lo abracé por el estómago, recosté mi cabeza en su pecho y pude escuchar su corazón latir.