Empalagosamente Dulce

Subidón de Azúcar

En la última consulta al médico me recomendaron una semana de reposo . Mis niveles de glucosa han estado por debajo del rango objetivo . Creo que he sido muy estricto con mis raciones y he estado un período largo muy activo . Últimamente estos días en mi casa me parecieron una tortura . Me gusta estar en la comodidad de mi hogar , me acostumbré a la soledad y eso no resulta ya ningún problema . Pero algo me ha estado inquietando y se bien a qué se debe , porque desde la última vez que la ví no he dejado de pensar en ella . Usó todos los mecanismos para llamar  mi atención e irremisiblemente lo consiguió  . Quiero borrarla , la desaparecería de mi mente pero no sé cómo  . Su sonrisa me persigue , sus ojos color caramelo me persiguen , su olor dulce me persigue por cualquier rincón que me encuentre de mi casa . Y es que he comenzando hasta a creer que mi hipótesis de que es bruja es cierta . 

¡ Sugar ! ¿ por que tiene que llamarse Sugar ? Como si el solo hecho de su nombre me prohibiera acercarme a ella . Y hoy está tarde se ha presentado aquí sin más y es que no me lo explico . ¿ Por que insiste tanto en que coma algo hecho por ella ? . Mi opinión no debe significar nada , ¿ que puedo saber yo de delicias si mi paladar se acostumbró a la simpleza , a lo insípido? . ¿ Me vió como posible rata de laboratorio y ahora se le ocurrió la brillante idea de hacer postre para diabéticos ? . No lo entiendo . 

Cuándo salí de mi casa por segunda vez , minutos después de haberla dejado afuera como el idiota que soy , me di cuenta de que se había marchado . Cómo había sido tan osada en venir para acá y lo constante que se mostró estos días , creí por momento que cumpliría su palabra y se quedaría a esperar que cambiara de opinión . De haber sabido que se marcharía tan pronto hubiera salido mucho antes . Lo único que me confirmó como rastro de sus presencia y evidencia de que no fue parte de algún delirio , es la tarta que se encontraba fría sobre la mesa . La tomé y me la llevé dentro . Puesta en el mesón de mi cocina me quedé contemplándola , destilaba un olor exquisito a canela y manzana .    
¡ Manzana ! ¿ casualidad ? . El cuento de la bruja de blancanieves ya no me resultaba chistoso . 

Tomé por el mango un cuchillo y empecé a cortar un trozo de tarta . ¿ Otra clase de azúcar había dicho ? . Se tomó la molestia de usar ingredientes que no pudieran causarme daño . ¿ Quién hace eso ? . Mayor motivo para desconfiar . No espero un trato especial de la gente . De quién si lo esperé me traicionó y después de eso tengo fragmentada mi alma .
Mi propio padre acecino a mi madre . A partir de allí desconfió hasta de mi sombra . 

Tomé el trozo de tarta y me lo metí a la boca casi sin pensarlo , lo hice con rabia .  Teniendo en cuenta todos estos sentimientos que me inundaban y se arremolinaban junto a mis recuerdos . Luego ya no pude sentir nada más que alivio . Lo había hecho y ya . Di un segundo mordisco y esta vez me propuse concentrado en identificar cada uno de los sabores que recorrían mi boca . Los trozos jugosos de manzana suavemente crujían al aplastarlo con mis dientes . Era delicioso , no hay mayor palabra para describir cuanto me gustaba . 
Me acosté con el estómago lleno . Me había comido la mitad de la tarta y aunque es una exageración ya vería si he de morir mañana , pero por ahora ya puedo tachar de mi lista comer algo muy bueno hasta reventar .
Desperté y me preparé para salir de la invernación . En estos dias ha estado lloviendo y hoy parece no ser la excepción . Los nubarrones se apretujaron y encapotaron el cielo , tapando el sol que hace unos momentos era inclemente . No me quejo , me encanta este clima . Calculo la precipitación como a eso de las cuatro a cinco de la tarde y para cuando ya estaré de regreso en casa .

 Sentí que algo me faltaba cuando pasé por al frente de su pastelería y ella no vino corriendo o se escabulló para insistirme que aceptara tal o más cual dulce . Comprendí en ese momento que lo que le había hecho la noche anterior le afectó . Ratifiqué cuando de regreso , ella estaba despidiéndose de un hombre vestido de oficial de policia en las afueras de su local y al verme se metió de inmediato sin mediar palabra o saludar con la mano como lo hacía antes . Traté de no darle importancia y mentiría si les digo que me resultó fácil . A media cuadra de llegar a mi casa me regresé y entré abriendo las puertas de su local de par en par . Ella colocó cara de sorpresa al verme , tragó saliva y empezó a pasarse las manos por el delantal , comprendí de inmediato que se sentía nerviosa . Me dirigí al mostrador y  apoyandome en mis dos manos me incliné y acerqué lo más que pude  a su rostro . Ella palideció y se apartó como en autoreflejo golpeando con la repisa de atrás y dejando caer un frasco con galletas que al estrellarse en el suelo se hicieron migas . Estaba asustada y verle así me hacía parecer un monstruo . Relajé la expresión de mi cara y traté de sonreír para influirle un poco de confianza . El resultado fué al contrario del que esperaba , porqué giró la cabeza de derecha a izquierda y tomó un paraguas que se encontraba recostado en una esquina . 
—No te acerques —  Me amenazó . 
— Cálmate , no he venido a hacerte daño—. Dije en un susurro y levanté las dos manos en señal de rendición .
—Sí , eso dicen todos , pero la gente te engaña y roba .
— ¿ Algo te ha ocurrido esta mañana ? estas muy alarmada —. Me pareció notar que quería llorar , los labios le temblaban y hacía pucheros . Parecía una niña indefensa y bajé más la guardia .

— ¡ Ese no es tu problema , ahora sal antes de que llame a la policía !— . Su voz temblaba al igual que todo su cuerpo , deseaba abrazarla pero intentarlo solo complicaría las cosas . 

Me apuntó con la punta del paraguas pero su poca determinación de golpearme con él se notaba en la forma en que lo sostenía , con el codo flexionado y un aguante flojo en la mano . 

—¡ Óyeme un momento ! Tu eres la que se llegó a mi casa ayer , allanando  una propiedad privada y yo no llamé a las autoridades  , ¿ y vienes a comportarte  así ? , yo , que no he hecho más que entrar como cliente a tu pastelería . 
Bufó y puso los ojos en blanco .  —Sé que no vinistes con intención de comprar nada —. Dejó el paraguas en el suelo y cruzándose de brazos preguntó .— ¿ A que vinistes entonces  ?

El silencio que se produjo fué profanado por los truenos y relámpagos que centellaban afuera  .
De  pequeño siempre creí que estos eran blasfemias , la furia de los cielos contra nosotros . Puede  que el remordimiento  me hizo creer que el mundo nos castigaba de algún modo .
Con frenesí caían las gotas de lluvia  , las calles quedaron desiertas y fueron lavadas por las corrientes de agua que desembocaban al alcantarillado . Supe de inmediato que estaríamos aquí atrapado hasta que cesara la lluvia o por lo menos bajara la intensidad . Suspiré y me senté en una de las sillas , me quité la gorra y arremoliné mi cabello . 
Ella expectante no se perdía ninguno de mis movimientos , por eso para bajar la tensión que había entre nosotros , le dediqué un guiño y una  sonrisa de medio lado  .
La noté estremecerse y me fulminó con su mirada inquisitiva  .
— Quiero disculparme contigo , he sido muy grosero y no tengo excusa para decirte motivo por el cual me comporto así . He probado tu tarta y aunque no he probado muchas tartas durante toda mi vida puedo decirte que estaba realmente deliciosa y que supera a todas las que probé en todos los aspectos . Así que gracias por tomarte las molestias —. La contemplé morder sus labios como evitando sonreír ,   y se me escapó una  amplia sonrisa , ella inevitablemente me respondió con una más resplandeciente .  Jamás había visto esa expresión de felicidad que llevaba su rostro , ni en mi propio rostro . No recuerdo la última vez que fuí muy feliz.
Sugar se dirigió al otro extremo de la mesa y se sentó en la silla cruzándose de piernas , aún manteniendo su deslumbrante sonrisa .

— ¿ No dirás nada ? — . pregunté .
— ¿ Que quieres que te diga ? — . preguntó .
—No sé— respondí bajando la mirada y centrándome en la cerámica blanca y negra que le da al piso apariencia de tablero de ajedrez . 
— Me siento alegre , si eso es lo que quieres escuchar . Me sienta realmente bien que hayas probado mi tarta y aún más el echo de que te haya gustado . ¡ Estoy que exploto de emoción !— . Esto último lo dijo con un gritico que me dejó medio sordo  .
Nos volvimos a quedar en silencio viéndonos el uno al otro . Me incomodé por la cercanía que derepente sentí al encontrarnos los dos solos y desvíe la mirada a la ventana . Hablé del clima como todo idiota que se queda sin motivo de conversación . 
— Llueve mucho durante estos días debido a una tormenta tropical que se acerca por el caribe. 
 Ella asiente y veo que se tapa la boca para no echarse a reír . 
— Iba a cerrar temprano para no tener que esperar a que menguara aquí sola . 
—Lo siento— . Echo un vistazo a su rostro y no comprendo como no se le acalambra la mandíbula de tanto sonreír .
— No tienes por qué sentirlo , me alegra de no haber cerrado antes , me alegra estar refugiada de la lluvia aquí contigo  .
Esperen creo que entré en calor .
¿ Cómo podía decir esa clase de cosas así a la ligera ? . ¿ No tiene acaso ningún resquicio de verguenza ?.
Puede que esté acostumbrada a coquetear , pero ese rubor en sus mejillas la hacía ver tan inocente  . 
Es tan dulce que empalaga y aún así hizo que mi corazón se acelerara . Tenía un subidón de azúcar , pero este era otra clase de azúcar . Una que se introducía por mis sentidos .

Necesito de insulina . Una dosis que me ayude a combatir contra lo que estoy sintiendo