El engaño rompe, destruye, quema y desgarra pero, es un método que te permite mostrarle al mundo esa cara dulce y angelical con la que logras persuadir a los demás. Sin embargo, es un arma de doble filo que si no sabes usar, terminaras siendo herido...
Mery y yo compartíamos la clase de Biología, así que nos encontrábamos ya en el salón, llegamos bastante temprano ya que el profesor nos daría algunos datos extra sobre cómo podríamos complementar nuestros ensayos, y obviamente queríamos entregar los mejores de la clase.
Llegó el profesor y junto con él, el resto de los alumnos, entre ellos el ya famoso Hucth Marchand, tomó asiento junto a mí y se limitó a mirarme. No sé qué tiene este tipo que me hace sentir tan nerviosa, pero tan a la defensiva a la vez.
La clase pasó bastante rápido para mi gusto, faltaban exactamente cinco minutos para que terminara, pude sorprenderme a mí misma mirando al chico junto a mi más veces de lo necesario y al parecer no fui suficientemente discreta para que él no lo notara.
—¿Otra vez babeando, jollie?—No había notado que me encontraba con la barbilla recargada sobre la palma de mi mano, mirándolo fijamente, perdida en ese perfecto perfil suyo.
—¿Qué? ¿De qué hablas?—Posé ambas manos sobre mi regazo jugando nerviosamente con mis dedos
—Creo que deberías limpiarte—De nuevo hizo ese movimiento con su pulgar sobre sus labios, simulando limpiar algo.
Esos lindos y rojos labios.
Al parecer se había vuelto uno de sus hobbies, hacia esta acción cada que me descubría mirándolo y eso solo provocaba que mi cara se sintiera caliente y estaba segura que con cada señal el carmesí invadía mis mejillas.
Me giré sobre mi asiento para mostrarle el dedo de en medio—¡Señorita Myers!—La voz del profesor me hizo girar de nuevo al frente en un rápido movimiento.
Antes de que pudiera decir algo más, la campana sonó, indicando que la clase había terminado. Hutch soltó una risa burlona y en unos cuantos segundos desapareció del lugar. Guardé mis cosas dentro de mi mochila, la coloque sobre mis hombros y salí los más rápido posible arrastrando a Mery detrás de mí.
—¡Hey gorilla!—Como si supiera que me refería a él, Hutch giró lentamente para mirarme en la distancia— Aléjate de mi
—¿Qué estás haciendo?—Mery preguntó nerviosa tomando mi brazo, su voz apenas se escuchó.
El chico que hace unos segundos se había girado para mirarme, ya se encontraba parado justo frente a mí ¡Que velocidad! ¿Cómo llego hasta mi tan rápido? Todo el valor con el que le había gritado hace segundos, se había desvanecido cuando su imponente altura se posó frente a mí, haciéndome sentir diminuta.
—Y si no ¿Qué?—Se inclinó un poco para decir eso tan cerca de mi rostro, que pude sentir su fresco aliento sobre la piel caliente de mis mejillas
—Yo... —Su cercanía me hacía sentir tan nerviosa—... Yo haré que te boten del equipo —Tragué grueso, sin despegar mis ojos de los suyos esperando que no notara mi nerviosismo al sentirlo tan cerca
—¿Me estas amenazando, jollie? —La burla presente en su rostro
—Te estoy advirtiendo—Sin más me giré para salir del pasillo, sin embargo, una mano me tomó del antebrazo haciéndome girar con brusquedad
—Y yo te advierto—susurró tan cerca de mi oído que sentí un fuerte escalofrió recorrer todo mi cuerpo— que no voy a alejarme—Pasó suavemente su lengua sobre el lóbulo de mi oreja y desapareció
Quedé ahí en medio del pasillo mirándolo alejarse a paso apresurado, paralizada por reciente acontecimiento. Mery me hizo volver a la realidad chasqueando sus dedos frente a mí, salimos del pasillo y nos dirigimos a la cafetería para comer algo y después continuar con nuestras clases.
***
En casa todo era tranquilo como de costumbre, Klay encargándose de las cosas de la empresa, Ol'ga perdida en sus labores del hogar y yo como de costumbre mirando bobadas en facebook y guardando ideas para re-modelar mi habitación en Pinterest.
Los últimos dos meses habían estado llenos de tareas y proyectos, estar en último año de preparatoria era una tarea bastante difícil, ya debíamos comenzar con las solicitudes de admisión a la Universidad y la verdad es que yo aún no tengo ni la más mínima idea de que quiero estudiar. ¡Ah! Estoy perdida.
Al menos el odioso de Hutch se ha mantenido alejado de mi durante este tiempo, no sé si es porque realmente le aterra ser botado del equipo de fútbol o simplemente no le ve sentido seguirme molestando. Cualquiera que sea la razón, le agradezco inmensamente al cielo porque mantenerlo alejado de mi, me permite seguir pensando con claridad y enfocarme en lo que realmente me interesa ahora, mis calificaciones. Aunque una parte de mi, desearía que ese idiota siguiera molestándome.
Mery quedó de pasar por mi esta noche para ir juntas a la fiesta de primavera. La verdad es una celebración a la que no le veo mucho sentido, solo es una nueva estación del año, aunque al parecer cualquier cosa es motivo para realizar una fiesta. El año pasado hicieron fiestas incluso cuando a Brat, uno de los chicos del equipo, perdió un par de dientes en una pelea, hicieron fiesta cuando Abby fue nombrada en la lista, como la chica que más sexy se veía vomitando, hicieron fiesta cuando el señor Phillips reprobó a todo el salón por haberle pegado el trasero a una silla. En fin, todo se celebra en el Instituto Bilingüe.
Tomé una relajante ducha con agua helada, la llegada de la primavera hacia que los días fueran mucho más calurosos que de costumbre y yo nunca he sido muy fan del calor. Salí a mi habitación con una suave toalla de color blanco enredada alrededor de mi cuerpo y secando mi cabello delicadamente con una un poco más pequeña.
Decidí usar un lindo vestido floreado de color azul con un par de sandalias plateadas que se ajustaban a mis tobillos. Me sentía muy fresca y bastante cómoda. Puse un poco de crema hidratante sobre mi rostro, seguí por mis hombros, brazos y piernas, puse un poco de rimel sobre mis pestañas, no suelo rizarlas, el rimel ayuda a que se eleven, puse un poco de hidratante para labios de color rosado y me coloque mi perfume favorito.
Cepille mi cabello, aplique un poco de crema para peinar y me senté sobre mi cama a esperar por una emocionada Mary que no tardo más de dos minutos en hacer sonar la bocina de su auto para que bajara.
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Nota de la autora: Bueno antes de cualquier otra cosa, quiero disculparme por no haber subido capítulo estos últimos días, he tenido un montón de tarea y proyectos de la U.
Esta semana al parecer tendré un poco mas de tiempo libre por lo que tratare de subir la mayor cantidad de capítulos que me sea posible.
¿Qué creen ustedes que pase en esa misteriosa fiesta de primavera? *Risas malvadas*
