Capitulo 10

5.6K 329 27
                                    

Parte 2

Estoy confundida. No sé qué pasa aquí. No sé dónde está "Matt", después de preguntarle a Kyle que pasaba volteé a ver al chico y este no estaba, solo habían manchas de sangre en el suelo.

Supuestamente, este día iba a ser MI día. Primera cita, con el chico que me gusta, todo perfecto y lindo. Pero como tengo tan mala suerte, esta cita ha sido fatal, solo la última parte que aún ni termina.

Aún me encuentro parada en frente de la grandiosa espalda de Kyle, con frío y

tremendamente asustada.

Todo mi cuerpo tiembla por lo que acabo de ver hace unos instantes. La sangre, los golpes, las heridas que se curan mágicamente, los ojos rojos... Se me han hecho familiares, como si ya lo hubiera vivido, como un déjà vu.

Junto mis manos y las llevo a mi boca para soplar y que se calienten aunque sea un poco.

—Kyle, ¿qué pasa aquí?— pregunto cruzándome de brazos—. ¿Por qué ya no tienes heridas... o por qué tus ojos están rojos?

Necesito ahora una explicación porque sé que si no me la da, toda la noche voy a estar pensando en esto.

—Vamos, te llevo a casa— dice Kyle volteándose pero no me mira a los ojos. Agarra mi mano y me jala para que camine.

—¡No! Explícame que pasa aquí— exijo zafándome de su agarre.

—Ale...

—Kyle.

Me mira y bufa. Se lleva las manos a su cabello y lo sacude. Pone sus manos en sus caderas y mira para otro lado.

—¿Quieres la verdad?— pregunta.

—Sí.

—Vamos. Acá no puedo decírtelo.

Y con eso me jala de la mano hasta su moto y nos subimos.

Me agarro fuertemente para no caerme, y pues también para sentir sus coquitos...

¿Qué?

Hay que aprovechar.

«Violadora de cocos».

MAJO POV

Después de que Ale se haya ido con el galanazo de Kyle, subí a su habitación para seguir con mi siesta. Pero no pude, tan solo recordar que yo estaba tan emocionada como ella en mi primera cita con Adam, me hace sentir nostálgica y a la vez feliz. Esos momentos en los que cuando nos besábamos o cuando hablábamos, solo éramos él y yo, no existía nadie más... eran únicos. Como nuestras manos encajaban perfectamente. Cuando se metía por la ventana de mi habitación sin mi permiso solo para dormir a mi lado porque me extrañaba. Cuando me traía Nutella y veíamos películas de acción o la vez en la que jugábamos GTA V.

Me acuerdo que en nuestra primera cita, me llevo a comer hamburguesas y derramo toda su gaseosa encima de mi polo haciendo que suelte un chillido de sorpresa por lo frío y luego rompiera en carcajadas al ver su cara de preocupación, pidiéndome perdón mientras trataba de limpiar la mancha. Ahí nos dimos nuestro primer beso, fue tan raro pero a la vez tierno.

Al recordarlo con sus ojos tan azules y con su cabello desordenado, hace que me derrumbe, aún no lo supero. Como ahorita, lágrimas silenciosas recorren mis mejillas mientras trato de callar mis sollozos con mi mano para no alarmar a Mili.

Me siento y tapo mi cara con mis manos. Los recuerdos vienen a mi cabeza como una película. Una película en la que veo a dos chicos adolescentes enamorarse poco a poco. Algo que comenzó como un juego inocente se volvió algo real. Pero que término con un final, el cual nadie se esperaba y ni se imaginaba.

—Te amo, Adam. Nunca dejaré de hacerlo— susurro tocando el collar que me regaló, símbolo de nuestro amor.

Limpio las lágrimas que están en mi rostro, tomo una bocanada de aire y me levanto dirigiéndome al baño. Lavo mi cara y puedo ver que mis ojos están rojos de tanto llorar, mientras mi ceño está fruncido y mis mejillas están rojas.

Salgo del baño, y del cuarto. Bajo las escaleras y me encuentro a Mili tirada en el sofá con una pizza en su pecho y restos, de lo que supongo son migas, por todo el suelo.

Saco una risilla y niego con la cabeza. Apago la televisión y recojo toda la comida. La despierto y le digo que se vaya a su habitación. Se va mientras se tropieza con sus propios pies, quedándome sola en la sala.

Me siento en el sofá y prendo la tv. Comienzo a pasar canal por canal hasta llegar a MTV, está dando The Vampires Diaries.

Oh. Por. Dios.

Damon, mi Damon Salvatore está besuqueándose con Elena en el hospital.

Aunque hacen bonita pareja, igual, es mío.

Me levanto y me dirijo a la cocina para prepararme canchita en microondas.

La preparo y la meto en un bol. Salgo de la cocina y me hecho en el sofá para seguir viendo mi serie favorita.

De un momento a otro siento como la puerta se abre y se cierra de un portazo. Tiro las palomitas por impresión y me siento para ver quien ha venido.

Frunzo el ceño al ver a Ale recostada en el piso con las manos en la cara. Voy hacia ella yme siento.

—¿Qué paso? ¿Por qué estás así?— pregunto mientras sobo su brazo.

Ella suspira y niega con la cabeza.

Oh, hermoso y querido, Kyle... si me entero que le has hecho algo a Ale, te las verás conmigo... y no será lindo.

"—"-"-"-"-"-"-"-"—"-"-"-"—""-

Buenoou, espero que les haya gustado el capitulo.

Cambio y fuera.

- Nicole y Yadhira.

Hasta que llegaste túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora