Heron [+18]

Capítulo 18

  ¿Así de fácil me veo ante tus ojos?

Hela Hanks.

Mi mente empieza a maquinar escenas entre Cameron y yo en la casa, lo más probable es que estemos solos y conociéndonos eso no vamos a desaprovechar, siento que empezamos a forjar una conexión mucho más íntima que antes haya tenido con alguien.

Ahora nos encontramos dentro de su auto, en el ambiente se puede sentir una comodidad, y seguridad, la música de Ricardo Arjona se escucha por todo el auto, empieza a tararear la música, yo lo observo desde el asiento del copiloto.

¿Cómo diablos hace para verse tan sexy haciendo algo tan básico como manejar?

—No lo sé, chica rara. —me da un leve vistazo antes de volver a concentrarse en la carretera.

—¡Dios! ¿Enserio lo dije en voz alta? , ahora ni de mis pensamientos me puedo fiar.

—Al menos no dijiste nada fuera de lo normal. —coloca una mano en mis muslos.—Si supieras todo lo que pasa por mi mente con solo observar.

Se lame los labios y aprieta mis muslos, queriendo recalcar su punto con esas acciones.

—¿Esos pensamientos son buenos o malos?

—Ambos. —el me regala una sonrisa. —estoy seguro que estás frunciendo el seño ahora mismo.

¿Como demonios?,—Explícate.

—Mis pensamientos son buenos referente a tu persona, pero es malo para mí y mi pantalón. ¿Sabías que ahora la mayoría de mis boxers me quedan más ajustados que los normal?

No me da tiempo de analizar lo que voy a decir. —¿Por qué? —la pregunta suena tan inocente de mi parte.

—¿Por qué más sería, Hela? Es debido a las continuas erecciones que me causas en lo que trascurre el día.

—Ohh... —el entendimiento me avasalla.

—Sí, Hela. Oh.

Le voy a contestar ese sarcasmo con más sarcasmo pero me doy cuenta que estamos afuera de casa, entonces ambos nos miramos durante unos segundos antes de bajar el auto e ir a la casa donde definitivamente vamos a estar muchos más cómodos.

Entramos a la casa y él se pone detrás mio mientras una de sus manos se cuela en mi blusa y se queda a la altura de mi abdomen, el contacto de piel con piel es magnífico y más cuando él es la persona quien me toca, por más que solo sea la palma de su mano en mi abdomen eso no quita la intensidad de lo que siento cuando estamos cerca.

Me giro en sus brazos haciendo que su mano ahora quede en mi espalda, yo coloco mis manos en su cuello y estiro un poco su pelo para molestarlo, pero consigo una reacción totalmente diferente a la que esperaba. Él me agarra del culo y me alza, yo enredo mis piernas en su cintura, estoy lista para besarle.

—¿Hela? —escucho cómo me llaman a mis espaldas.

Mierda...

Siento como mi corazón empieza que latir de forma acelerada.

Esa voz yo la conozco...

¡MIERDA!

Me bajo de Cameron de forma rápido y lo miro con pánico durante unos segundos, él solo traga fuerte. Me giro para poder enfrentar a la persona a mis espaldas solo que ahora mismo no sé que decir, creo que mi mente no procesa nada cuando entro en pánico. 

—Hola mami.  —digo de forma inocente. —¿Qué haces aquí?

Ella arquea la ceja y se cruza de brazos.— No intentes cambiar de tema ¿me presentas a tu amigo?