Heron [+18]

Capítulo 38

Decisiones.

Hela Hanks.

Al día siguiente de la fiesta me levanté con una resaca del demonio, ese día tuve mi día de duelo, me pasé en mi cama viendo películas románticas con finales felices y trágicos, lloré a mares con cada película, lo sentí y sufrí con ellas. No quería saber nada de nadie, tenía mi teléfono apagado, ese día era especialmentepara mí.

No supe nada de nadie, lo que recuerdo de esa noche se pone borrosa luego de que Cameron y yo hablamos en el baño. Me niego a creer que el me habló de esa forma estando borracho, él nunca me mostró indicios de ser un cretino. No se acercó a mi luego, yo me pasé a lado de Mateo, Liam y Josue a veces me iba con el resto de nuestros amigos pero cuando no estaba Cameron con ellos. Recuerdo ver a Will en la madrugada, recuerdo haber bailado en la mesa con Josue, recuerdo estar con un grupo que nunca vi en mi vida tomando pero siempre con Mateo a lado.

—Llamando a Hela, la diosa de la muerte que más bien parece muerta a la tierra —habla Mateo con tono divertido haciéndome volver a la realidad— ¿Cuánto pasó desde esa fiesta?

—Fueron 2 semanas.

Mateo fue la primera y única persona en saber de mi propia boca lo que pasó, él sabe de mi perspectiva en en todo.

—Sigo diciendo que tengo que insistir más en eso de darle una oportunidad de que le dejes explicarte la situación y así ves que haces tu o para que cierres etapa con él.

La primera semana me buscaba para hablar conmigo a todos lados, en la entrada del instituto, en las clases, en las horas de descanso e incluso llegó a venir en casa tres veces que tuve que decirle que se largue de ahí y me dolía porque todas las veces me quise rendir ante él, su cara contrariada mientras intentaba acercarse a mi de alguna manera.

—Mateo —le advierto—. Él sólo intentó hablar conmigo durante una semana y luego se rindió.

—¿Para una persona como Cameron es fácil abrirse con los demás?

Lo pienso durante unos segundos y la respuesta es no. A él le cuesta abrirse sentimentalmente con los demás y la única vez que dijo algo en su pasado fue cuando Finn estaba en el hospital.

Niego con la cabeza —Eso no lo justifica.

—No. No lo justifica pero si por alguna razón los papeles se invirtieran creo que tú ibas a querer que te dé una oportunidad de explicar lo que pasó.

—Es que me duele hablar con él...

Él agarra mi mano y entrelaza nuestros dedos —Lo sé, pero también con lo poco que te conozco sé también que eres lo suficientemente fuerte para poder hablarle y hacer lo que creas correcto.

—Es verdad pero...simplemente no lo sé.

El me sonríe y llama a Tita, la dueña de este local tan especial para mí, pide nuestro pedido. Ella me reconoció y no dudó en darme un abrazo que correspondí sin dudar, su esposo también se acercó y los dos miraban curioso a Mateo, supongo que tuvieron curiosidad de saber quien era y porqué Cameron no estaba conmigo como en anteriores ocasiones, los podía sentir incluso recelosos con él. Me causaba gracia como me intentaban cuidar.

Esa tarde de sábado me pasé con Mateo, las risas nunca faltaron durante todo el día, ambos nos molestamos con estupideces para pasar el rato, el ambiente entre nosotros era ameno e incluso hicimos videollamada con Liam para hacer que nos tenga envidia y así de rápido como pasó el día también llega el momento de despedirnos

—Nos vemos la próxima semana —digo mientras me bajo de su camioneta.

—Emm...yo voy a viajar mañana, me voy a la casa de mis padres durante un tiempo —lo miro desde la ventana de su auto, su miraba baja a mi escote durante un milisegundo—, piensa en lo que te dije hoy, creo que todos merecemos una oportunidad para poder explicarnos.