Ya no soy la MISMA

CAPITULO 3

CAPITULO CORREGIDO 

Luego de unos minutos apareció mi hermano por el umbral de la puerta. Hizo una cara de disgusto al vernos a Matt y a mí solos. Sobre una cama, sin embargo se le relajó cuando vio que ambos llevábamos ropa y jugábamos con nuestros celulares.

-¿Qué paso? ¿Les quitaron los autitos y las muñecas? -Pregunto mi hermano al vernos.

-Oye Augusts, ¿Te tocó en esta habitación? -Le pregunto Matt saludando a su amigo —Porque creo que hay una intrusa que no debería estar aquí –Bromeó.

-Calla, esto es un cuarto dedicado a la familia West, por lo tanto aquí el intruso sos... vos –Lo apunté con el dedo y la ceja alzada.

El muy idiota me sacó la lengua y comenzó a hablar con Augusts sobre el equipo de rugby al que pertenecían y los nuevos horarios. Según lo que había entendido, Matt era el capital y mi hermano el hooker.

-...Bueno en fin, no había más cuartos disponibles en el edificio de las chicas, así que la intrusa estará con nosotros durante un tiempo —finalizó mi hermano.

-Mejor, así aparta a las locas de cuarto que siempre quieren entrar en éste edificio –Reí, su manera de identificar a la personas era única –Ya sabes Lola, admiradora.

Y su idiotez también...

-¿Dónde consigo los horarios de mis clases? –Pregunté.

-Antes de comer ve a recogerlos -Asentí y observé a mi hermano. Bastante concentrado en su teléfono.

-Va a venir Pamela dentro de un rato –Arrugué el entrecejo, ¿Pamela? –Quiero que la conozcas Lola.

-¿Puedo saber quién es? –Pregunté curiosa.

-Ya te vas a enterar –Suspiré, odiaba que me mantengan con la intriga, no iba conmigo.

Quince minutos después la puerta sonó, un muy emocionado Augusts corrió a abrir la puerta, dejando pasar a una chica morena. La observé detenidamente, llevaba un vestido verde bastante descubierto en la zona de los pechos. Con razón tiene algo que ver con mi hermano, pensé.

-Hola Matt –Saludó ella muy coqueta –Hola –Aquel saludo iba dirigido a mí.

-Hola –Sonreí de lado, de alguna manera no me hacía buena espina -¿Todo bien?

-Si bastante –Dirigió la vista a mi hermano -¿Es ella tu hermanita?

Augusts sonrió y me echo un vistazo: -Alégrate Lola, no cualquiera tiene tu suerte.

-Ajam... -Iba a ser algún comentario pero Pamela me interrumpió.

-Cualquiera diría que sobornaste a la directora para tener ésta habitación.

-Claro –Asentí –Eso es justo lo que quería, una habitación con mi sobreprotector hermano y el ardiente Matthew.

-Ei –Mi sobreprotector hermano me llamó -Cuida lo que decís.

Le echo un vistazo a Matt quien no había apartado la vista de su móvil -¿No piensas decirle nada?

-No –Negó mirándome divertido –Me dijo ardiente, no tengo de que quejarme –Se encogió de hombros –De echo creo, que ahora me caes un poco mejor Lola.

-¿De dónde sacas tantas estupideces para decir? –La pregunta de mi hermano provocó una sonora carcajada. Lo cierto es que el trato que éstos dos tenían hacia el otro era envidiable.