Ya no soy la MISMA

CAPITULO 9

Luego del sermón que me dio mi hermano en la mesa del comedor, enfrente de todos mis amigos,  de las “perfects” y de Matt (A quien le resultaba más interesante su almuerzo que nuestra charla), sobre que tengo que aprender a controlar mis nervios cuando un alumno ocupa un lugar que es tuyo y bla-bla-bla.
La directora también parecía asombrada por mi comportamiento pero igual me dio una semana de castigo junto al ingrato de Codwells, cuyo nombre era Francisco.

-Ya basta Augusts, ya no soy la misma pequeña de hace dos años atrás, esta bien me metí en una grande, debí reaccionar de otra manera pero no por eso me van a llevar a prisión o algo por el estilo- grite ya cansada del verso de mi hermano “Aprende a controlar tus nervios”.

-Esta bien, pero si no los controlas vas a terminar en prisión- contesto el.

-HAY ya ¡BASTA!- le pegue en el hombro.

-Anda a tu clase de gimnasia antes que te den otra semana de  castigo.

-Ok, bien- mire el reloj y tenia exactamente cinco minutos para cambiarme e ir a la clase e gimnasia, le di un beso en la mejilla y salí corriendo hacia mi departamento.

Llegue y ni siquiera mire si había alguien en el lugar, corrí hasta mi dormitorio y busque en el placar mi ropa, la saque y me metí en el baño a cambiarme, me alce el pelo en una coleta alta y corregí mi maquillaje de ojeras que me las estaba empezando a descubrirme.

-Tarde señorita West- grito la profesora cuando empecé a correr como si nada.

-Ya se- respondí con una sonrisita falsa que ni yo me la creía.

Corrimos siete vueltas por la cancha de futbol, luego empezamos con atletismo donde un montón de chicas se quejaban porque se les rompían las uñas, tiradas de pelo, traspiración, y mas.

Terminamos tenidas en el pasto, todas traspiradas y con un cansancio tremendo, ¿Quién pensaría que Atletismo cansa tanto?

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-¿Estas mejor?- me pregunto Emily cuando entre por la puerta del departamento –Bárbara me conto que te sentías mal de la panza- ¡VIVA BÁRBARA! Le invento una mentira a Emily para  que no supiese la verdad ¡Es genial!

-Si, ya se me paso creo que es por el periodo pero nose, ¿El baño esta desocupado? Porque necesito una ducha urgente por el día que tuve hoy.

-Si, ¿Escuchaste que Matt y Lindsay terminaron?- OK lo que faltaba, hablar sobre el tema de la ruptura de Matt y Lindsay, cuando todos los datos apuntan hacia un sospechoso *todos señalándome*

-Si he  escuchado un poco sobre la ruptura pero me tengo que ir a bañar ¡bye!- apure el paso hacia el baño y cerré la puerta con  traba.

Deje que caiga el agua en la ducha y me metí dentro, donde lo mas importante era que en todo el día no había hablado con Matt, solo lo había visto en la hora del almuerzo donde nos limitamos a mirarnos o hablarnos.

“¿Por qué te afecta tanto que Matt te halla pedido ser su novia?”
“¿Por qué le dijiste que no?”
“Acaso… ¿Estoy enamorada de Matt?”

Esas preguntas navegaban por mi mente mientras el agua caía sobre mí.

(…)

Termine de bañarme y me puse mi pijama habitual de invierno ya que este se acercaba; una remera mangas largas y un pantalón.

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-Dame la libreta que le necesito no te la puedes quedar, papá pidió que yo la tenga no vos- Conocía esa voz era… era… era…un momento ¡ERA LA DE MATT!

-Es mi turno, ya me canse que siempre vos seas el mas responsable cuando sabemos que ni a un caracol podes cuidar-¿Esa era la de Bárbara?, claro ella es la hermana e Matt, pero ¿Por qué Matt esta acá y de que libreta hablan?

Me levante para saber que estaba pasando ya que me habían despertado, pero ¿Emily esta acá?, mire a su cama y si ella estaba durmiendo felizmente sin percatarse de lo que realmente pasaba.

-¿Por qué los gritos?- pregunte saliendo de mi habitación y viendo a Matt parado frente a Bárbara con una libreta en la mano.

-Hola Lola- me saludo Matt- estoy acá porque  vengo a buscar lo que es mío- señalo la libreta que traía en la otra mano.

-Ya basta devuélveme mi libreta- chillo Bárbara. 

-Para que es la libreta- pregunte en un bostezo. 

-Son nuestros documentos- me respondió Matt- papa siempre le saca fotocopias y no las da por si las llegamos a necesitar durante el año. 

-Aja-me dirigí a Bárbara – ¿Y porque tanto escándalo?

-Es que yo…- balbuceo un rato- lo uso como mi diario personal.

-A  ver que dice- Matt empezó a pasar las hojas y a leer lo que decía en la libreta-Hoy hable con Jack, fue algo súper fantástico, ¿Enserio?, no podes escribir semejante pelotudez- siguió leyendo mientras Bárbara intentaba quitárselo –Su cabellera rubia es tan atractiva, ¿Hermanita de enserio que no tienes un problema de obsesión con Jack?-Pobre Bárbara, su hermano la estaba avergonzando y yo no hacia nada hasta…- Ho mira este es de hoy, 23 de diciembre, mi hermano-“Ya basta”, “no leas mas” le gritaba Bárbara mientras intentaba quitar la libreta que su hermano tenia-es un completo idiota hizo llorar a Lola cuando le pidió ser su novia, esta le dijo que no porque antes había sufrido un engaño y no quería que Lindsay también lo sufriera por un imbécil como Matt…-el no había leído eso, Barbará no tenia eso en la libreta- espera hay mas, Lola esta enamorada de Matt pero no quiere ver sufrir a otra chica por su culpa- Matt me miraba a los ojos sin creer que yo también estaba enamorada de el- creí que odiabas a Lindsay, pero- hizo una pausa- veo que te vuelvo loca- ya había puesto su sonrisa picara y se acercaba cada vez mas a mi, mientras yo retrocedía hasta que mi espalda choco con una pared y definitivamente me tenia encarcelada, HOY NO ES MI DIA.
Luego de eso Matt ya tenía sus labios pegados con los míos y sus manos en mi cintura pero lo peor fue… le correspondí el beso, maldita sea no debí ser tan fácil.

-Así que…- suspiro y volvió a poner su sonrisa de comercial mientras Barbará nos miraba atónicamente- te tengo locamente enamorada ¿No?

-Tampoco te creas- lo mire a los ojos- solo me tienes un poquitín enamorada- ¿Pero que?, ¿Eso salió de mi boca?, vaya esto si que se estaba poniendo raro, nunca fui una chica fácil de echo en mi antiguo colegio no tenia novio porque… todos eran iguales solo se aprovechaban de las chicas fáciles y luego las dejaban con ilusiones que siempre se saben que son mentiras.

-Ok, ya me empalagaron con tanta dulzura, Matt te podes ir son las doce y media de la noche y estas molestando en el departamento de tu hermanita- protesto Bárbara.

-Buenos este bien nos vemos, chau osita- dijo mirándome y guiñándome un ojo mientras se iba ¿me llamo osita?

-Yo me voy a dormir- dije mientras me dirigía a la habitación.