Capitulo 18

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Una Noche

[Este capítulo está cortado por su contenido explícito sexual, prohibido en la página de Fanfiction.Net aunque la autora dice que subió este capítulo completo en fanfic.es yo no lo pude encontrar por mucho que busque así que está incompleto]


Noche 180.

La aeronave aterrizó sobre la amplia zona desértica y se abrió, dejando salir del interior a su cabreada dueña. Bulma dio un portazo al cerrarla. En aquel momento era mejor no acercarse a ella. Yamcha había probado su mal humor y su decisión esa misma tarde recibiendo un doloroso rodillazo, justo donde Vegeta le había enseñado a hacerlo en caso de que alguna vez, en su ausencia, alguien intentara dañarla. Yamcha había sido el primero en recibir su ataque desde que lo aprendió y la mujer se sentía satisfecha. Él la había consolado como buen amigo que era, pero cuando Bulma mencionó que estaba pensando cancelar su boda con Vegeta, su amigo empezó a insinuarle que, quizás, elegir al príncipe había sido una mala idea. Quizás nunca debería haberlo dejado por él, y quizás todavía no era demasiado tarde para arrepentirse.

Cuando Yamcha dijo eso, Bulma le dio un rodillazo en la entrepierna y salió del laboratorio tan malhumorada como había entrado, dejándolo en el suelo. Era hora de ponerse las pilas y dejar de esperar, y eso había hecho. Después de preguntarle a Trunks donde estaba su padre, la científica tomo una nave cápsula y salió disparada en su búsqueda.

—¡Vegeta!— gritó, buscándolo con la mirada por los alrededores tras guardar su nave. Inició un trote acelerado hacia ninguna parte, dando vueltas por la zona rocosa, algunas veces dando traspiés al encontrarse los cráteres creados, en su mayoría, por Goku y su propio hombre. —¡Sé que estás aquí, Vegeta, sal de una vez!— chilló, cada vez más enfadada. Tras una larga media hora caminando sin parar y sin rumbo fijo, Bulma empezó a cansarse, en parte, por el horrible calor que hacía aunque fuera de noche. Cayó al suelo cuan larga era tras tropezar por enésima vez y se levantó con el pelo lleno de arena y la cara ruborizada por la rabia. —¡ERES UN MALDITO COBARDE, VEGETA!— chilló una vez más antes de levantarse. Quizás fuera por culpa de la arena, por el calor o simplemente porque estaba demasiado sensible al no recibir ninguna respuesta. Lágrimas rabiosas descendieron por sus mejillas, y se las limpió con la manga de la camiseta. —¡Maldita sea!—

Dio media vuelta para buscar por otro sitio, y su cara estuvo a punto de chocar contra la cabeza de su prometido, que cruzado de brazos, se había colocado a su espalda en completo sigilo. Bulma saltó hacia atrás. Luego los sentimientos la embargaron y nuevas lágrimas que intentó tragarse volvieron a descender por su cara. No pudo contener un par de sollozos y aunque se moría de ganas de abrazarle después de estar más de dos semanas sin saber de él, lo único que hizo fue llevarse las manos a la cara para hundirla en ella.

—¿Qué haces aquí, mujer?— cuestionó.

—¿Tú qué crees que hago?— medio gritó ella entre sollozos. —¡Eres un completo imbécil, arrogante y egoísta! ¿Cómo te atreves a hacerme esto a un mes de nuestra boda? ¡Llevas más de dos semanas desaparecido y no das ni una maldita muestra de interés por volver a casa!— Bulma dejó de taparse la cara y le mostró su expresión más desencajada y furiosa, pero todavía llorosa. Vegeta casi se sintió intimidado por esa mueca, casi. —Y no eres simplemente tú. Tu hija tampoco ha vuelto a casa, ¡y eso sí que es culpa tuya!— chilló, intentando darle un empujón con el que no consiguió moverlo en absoluto. El príncipe dejó que le golpeara con los puños cerrados cuanto quisiera. Nunca sentía nada salvo, quizás, un ligero cosquilleo con los golpes más fuertes. —¿Cómo has podido pegarle de esa manera? Nada… ¡nada justifica que lo hicieras! ¡Me da igual que seas un violador o un filicida, pero si vuelves a tocar a mi niña te juro que inventaré un maldito robot lo suficientemente fuerte como para hacerte picadillo!—

INSTINTO ANIMAL [Broly x Bra]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora