⌗ 𔘓 ᜑ Las reglas fueron hechas para romperse 㒙

El Imperio Tanaka se expande

Kiyotaka pasó casi todo el día siguiente paseando de un lado a otro en su apartamento.

No tuvo que ir a trabajar ese día. Estaba agradecido por eso, por el hecho de que tendría algo de tiempo para pensar antes de regresar rápidamente a la agitada vida de la oficina. Al mismo tiempo, le preocupaba lo que sus compañeros de trabajo dirían sobre el incidente y quería terminar de una vez.

Había investigado un poco en su computadora portátil en sus pocos momentos de lucidez mental. Había buscado en Google el narcisismo y la terapia que había mencionado Mondo, y sentía que tenía una comprensión lógica de los conceptos. Pero había una diferencia, por supuesto, entre saber algo y esforzarse por actuar en consecuencia.

Decidió que si no podía hacer ningún progreso real todavía, al menos podría relajarse. Sabía que tenía que aprender a hacer eso. Así que recuperó el libro que Chihiro le había dado y que no había tenido tiempo de terminar, se preparó una taza de té caliente y se dispuso a leer.

Kiyotaka había terminado algunos capítulos cuando escuchó un golpe en su puerta. Casi nunca recibió visitas. Temía que fuera uno de sus padres. Se arrastró con cuidado hasta la puerta, donde se aseguró de que la cadena estuviera sujeta antes de abrirla solo una grieta.

━ ¡Kiyotaka! ¡ Por favor déjame entrar!

━ ¡S… Sonia! Oh, gracias a Dios.

Kiyotaka se rió y exhaló un suspiro de alivio. Estaba preocupado por ella. Cerró la puerta y desató la cadena, permitiendo que su ex prometida entrara al apartamento. Ella lo agarró en un abrazo aplastante tan pronto como la puerta se cerró y trabó detrás de ella. Una vez más, estaba hablando demasiado rápido para que él entendiera lo que estaba diciendo.

Le preparó una segunda taza de té y la hizo sentarse a la mesa de la cocina con él. Un par de sorbos parecieron calmarla. No pudo leer su expresión, ya que era una mezcla de tantas cosas en conflicto. Dejó su taza antes de hablar.

━ Lo he arruinado todo, ¿no es así? ¡He arruinado nuestro compromiso!

Kiyotaka le sonrió y negó con la cabeza.

━ Técnicamente, Gundham fue quien irrumpió en tu casa. Y yo fui quien admitió que todo era mentira... ¿Te enteraste de eso?

Sonia se rió y se tapó la boca cortésmente.

━ ¡Ciertamente lo sé! Y estoy bastante orgullosa. ¡¿Qué tan fuerte lo golpeaste?!

━ Lo suficientemente duro como para dejar un moretón bastante desagradable, aparentemente, pero no saqué sangre ni saqué ningún diente ni nada. Solo recibí un golpe.

━ Oh... Que decepcionante.

━ Lo sé.

Sonia sonrió a su taza de té por un momento.

━ Aun así, no puedo creer que todo haya sido en vano. Quizás si hubiera sido más firme con Gundham, él nunca hubiera venido a buscarme, y podríamos haber continuado la farsa el tiempo suficiente para romperla en un de una manera mucho menos explosiva y confrontativa.

━ No. ━ Interrumpió Kiyotaka. ━ N-Nunca debería haber...

Hizo una pausa para aclararse la garganta. No pudo evitar sentirse avergonzado al pensar en eso ahora, el hecho de que había permitido que el miedo a sus padres casi arruinara la vida de ambos. Ahora parecía completamente loco. Había sido más fácil de ver eso cuando lo estaba mirando desde el fondo.

━ Nunca debería haber llegado tan lejos. ━ Continuó. ━ Fue absurdo desde el primer día. Quiero decir, ¿qué tan lejos lo hubiéramos llevado? ¿Y si hubiéramos seguido siendo arrastrados más y más adentro? ¿Se suponía que íbamos a fingir un matrimonio completo? ¿Un hogar? ¿Niños? si nos hubiéramos casado, nuestras familias simplemente habrían cambiado el objetivo final. Habrían comenzado a presionarnos para que tuviéramos hijos. E incluso si hubiéramos cumplido con el plan y nos hubiéramos divorciado, ¿quién puede decir que no se habrían ido? de vuelta a sus viejas rutinas y que encontráramos nuevos cónyuges?