Una boda arreglada, traerá consigo pasiones dormidas de hace muchos ayeres, pasiones que se desbordarán escondiendo un secreto, un dolor, un anhelo y un deseo.
Alistándose para salir con Fluke Teerapat, se encontraba entusiasmado de poder salir de la rutina diaria a la que estaba enfrascado. Mirándose al espejo, Earth tenía razón, él no era nada feo, pero aun así la persona que él quiso en el pasado no lo notó como quería, por lo que se resignó a sólo estar a su lado.
Viendo el reloj, al escuchar el timbre de la puerta, le daba a entender que su cita había llegado antes de lo previsto.
Abriendo la puerta, se encuentra con la sorpresa de que no era Fluke Teerapat, sino Ohm que no dejaba de recorrerlo con la mirada, sintiéndose desnudo.
-¿Vas a salir?
-Si... tengo una cita
-Se puede saber con quien-cruzando sus brazos, molesto- Boun ¿lo sabe?
-Si... Fluke le pidió permiso- viendo a su amigo.
-¿Fluke Teerapat?
-Así es...
Su Noo, se veía muy atractivo y eso no le gustaba, porque estaría al alcance de otros hombres, siempre había sido muy sobreprotector con él, luego de romperle el corazón, pero ahora el saber que iba a salir con alguien, le molestaba.
Viendo como tenía dificultad para colocarse una delgada cadena al cuello, se acerca para ayudarlo, al tocar su piel, sintió una corriente eléctrica recorrerle el cuerpo, los ojos avellana de su Noo, lo miraban a través del espejo, provocando en él dificultad para respirar.
-Gracias- escuchando el timbre de la puerta.
-Pensé que me había equivocado de dirección- decía Teerapat.
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-No lo hiciste- sonriendo.
-¿Ohm Thitiwat?- decía el sujeto en la puerta- ¡Es un gusto verte de nuevo!
-Hola Teerapat- saludando desde lejos- Lo mismo digo.
Despidiéndose de su Noo y su cita, podía ver a su pequeño sonreírle al otro Fluke de una forma que a él no le sonreía, los vio subirse al auto y luego alejarse; se sentía raro ¿acaso eran celos? Tal era el grado, que por unos instantes pensó en seguirlos como si fuera un acosador.
-¡Diablos!- despeinando sus cabellos- ¡Mas vale que no intente nada con mi Noo!
Dirigiéndose al restaurante, Teerapat estaba encantado de tener al pequeño Fluke a su lado ya que durante mucho tiempo había querido pedirle saliera con él.
