Siempre en mi mente

Ocho meses

-Hola, buen día- Lucrecia llegó con café a la oficina, Nadia se había ido de Luna de Miel, y ella sabía que estaban en pláticas con Guzmán de tomar otro sector de la empresa, y dejar el constructor de un lado para siempre. Nadia le sería de mucha ayuda a su esposo, y ella sabía que en parte también lo hacían por ella, para alejarse y no sufriera viéndoles juntos. Si Nadia supiera que Guzmán también lo hacia para poner distancia con Rebeka... Pero bueno, que sí ahora iba a perder a su única amiga de nuevo, tendría que hacer más, y acercarse de nuevo a Carla también la ayudaría.

-Buenos días- la francesa y ella no se llevaban muy bien que digamos, Lu la odiaba por que se metió con Ander y no supo respetar su relación con Rebe, fuera como fuera, aún para la chica era inconcebible meterse con alguien que tenía una relación, y aunque ella se enrolló con él rizado, por lo menos no estaba más con su novia.

-Donde está Rebeka?-

-En su oficina, viene muy distraída eh, no está poniendo caso a nada- Amelie volvió a centrar su atención en su computadora y Lu entró a ver a Rebeka.

-ate he traído café y donas- Rebe levantó la ceja con sorpresa

-Gracias- dijo desconfiada

-No tienen veneno Rebeka...- la chica asintió con la cabeza y tomó el café débilmente, y al terminar se quedó viendo un punto específico de la pared

-Qué te pasa?- Lu preguntó, la francesa tenía razón, la chica venía muy distraída.

-He firmado Lu- Rebe no necesito dar más explicaciones, y en cuanto escucho eso, la mexicana dejo caer su café con sorpresa.

-Cómo?- sus ojos se llenaron de lágrimas en ese momento -Ander ya no está?- esas lágrimas cayeron con su declaración

-El médico me pidió 3 meses más, pero ya están firmados todos los papeles. En cuanto se cumpla ese tiempo...

-Adios- Lu lloró

-Voy a darle la noticia a todos cuando se acerque la fecha, para que puedan ir a despedirse de él. - la mexicana se sentía horrible y francamente Rebe lo entendía, quería mucho a Ander.

-Quieres tomarte el día libre? Creo que la noticia no te cayó muy bien.

-Sin Nadia aquí no te puedes dar el lujo de un día sin mi- eso hizo reír francamente a la ojiazul

-Claro que puedo- mostró su sonrisa sincera

-No, es mejor trabajar- dijo con seguridad -Mejor descansa tú, estás súper distraída-

-Necesito trabajar para no volverme loca, ir a casa ahorita sería un martirio.

-Leonora te va a necesitar mucho Rebe, por favor no la vayas a dejar- la pelinegra sintió un dolor en su corazón al escuchar a la mexicana

-Nunca. Cuando sea lo de Ander... me voy a tomar un mes de vacaciones y nos vamos a ir de viaje, para poder superar ese golpe juntas.

-Que bueno, eso la ayudará demasiado. Eres fuerte Rebe, has pasado por cosas horribles, y lo siento mucho, pero esto será el golpe final...

-Espero, por que te juro que ya no puedo resistir perder a nadie más. La terapia ayuda, pero joder, a veces solo quiero tirarme en la cama y llorar, y me siento tan...- se silencio

-Dilo, no te voy a juzgar por lo que dirás

-Me siento desafortunada- confesó en voz baja. -Se que no debería, estoy muy bendecida con Leo, pero...- negó con la cabeza

-Lo se Rebe, hey- se acercó a ella cuando comenzó a llorar-te puedo abrazar?- ambas quedaron sorprendidas por esta declaración, Rebe no espero que Lu algún día le ofreciera consuelo, pero lo necesitaba. Así que se limitó a asentir con la cabeza y ahora entendía por que todas las personas amaban a Lu con tanta fuerza, era muy buena consolándote y dando aliento.