La empleada de Los Park || 𝐏.𝐉𝐌

•Capitulo 6•

''Estimados pasajeros, hemos arribado a Seúl. Gracias por viajar con nuestra agencia''- comunicó el portavoz del avión 

La vista increíble que tuvo en todo el recorrido fue algo hermoso pero asustadizo para Jisoo, hubo una que otra turbulencia lo que la obligaba a mantenerse alerta. Seguro su hermano la recibiría en el aeropuerto, para llevarla a casa y desempacar juntos la gran maleta que llevó consigo por tan solo 4 meses, y ver los obsequios que le compró en Italia. 

Jin después de tanta insistencia por contactar a ________, terminó durmiéndose por más de 8 horas de viaje continuo, sin percatarse que ya han llegado. 

—Oye, Jin, ya llegamos- le avisó su amiga, mientras bajaba por cuenta propia su maleta del estante que está sobre los dos.

No se levanta, su sueño es tan profundo que ni el ruido de las hélices del avión podrían levantar a Jin de inmediato. 

—¡Vamos, dormilón! Taetae se cansará de esperarme- dijo tomando de sus hombros con desesperación

A los pocos segundos abrió los ojos, mirando a Jisoo con las manos en sus hombros parando de sacudirlo miles de veces.

—Al fin decidió levantarse el bello durmiente de su profundo sueño- se burló cruzada de brazos

—Sabes que soy bello- sonrió egocéntrico, guiñándole el ojo

—Ya llegamos, andando- le ordenó ignorando el anterior comentario, saliendo de los asientos hacia la salida

—Espera un rato más, tal ves ______ no ha...- enmudeció al recordar que no pudo hablarle, y se volvió a recargar en la silla

—Lo siento- sobó ligeramente su cabello para compadecerse de él, podía ser mandona y demás pero sí comprensiva- te guardé donas que nos dieron en el vuelo ¿Quieres?- trató de animarlo

—Ya qué- aceptó poniéndose en pie, caminando con ella a la puerta y comiendo del pan con una mano y con la otra arrastraba su maleta.

Se siente bien al regresar a Seúl,  el frío clima que hay ya puede sentirse, siendo las 6 pm.

Jisoo y Jin bajaron del aeroplano, para dirigirse a unos asientos no tan lejanos de dónde están. Tomaron asiento, comiendo aún de las donas del viaje.

—Y entonces Tae vendrá por tí- habló él a modo de pregunta

—Claro, me dijo que estaría aquí pronto. No creo que le moleste llevarte a casa, o al menos al centro de la ciudad-

—Eso se oye bien, Jisoo. Pero lo intentaré una última vez- encendió su celular, y miró las llamadas perdidas de su mejor amiga, marcaría una última vez, pero...

—¡Kim Jisoo!- un chico alto corriendo con rapidez hacia los dos se aproxima con una inusual sonrisa, sin dejar de mencionar el nombre de la chica

—¿Quién es ese?- Seokjin lo miró extrañado, y lo apuntó para que ella lo distinguiera de entre la multitud de gente en el aeropuerto

—¡Es Taehyung!- se formó una sonrisa en su rostro, saludándolo con la mano y saltando para que la notara

. Mansión Park.

—Señorita Lee, debemos irnos- me dijo Jimin, entrando al cuarto, no sin antes pedir permiso para pasar

 ¿Nos vamos?

—Precisamente guardo mi ropa para eso, pero ¿Irnos?- cerré la cremallera de mi mochila

—Mi padre acaba de llamarme. Dijo que el chófer no podrá venir por usted para llevarla, así que tendré que hacerlo yo- explicó con sus dos manos tras él.