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La gala benéfica tenía lugar en un lujoso hotel de cinco estrellas ubicado en el centro de Atenas. Nada más mirar por la ventanilla del coche y ver el brillo de los flashes, Louis sintió que se le revolvía el estómago.

ㅡRelájate, agapi. Cualquiera diría que estás a punto de meterte en la jaula de los leones, en lugar de en una fiesta en la que eres el invitado estrellaㅡrecomendó Harry al ver la tensión de su rostro.

ㅡCasi preferiría los leones ㅡmurmuró él.

ㅡNo seguirás preocupado por el traje, ¿verdad? Ya te he dicho que estás guapísimo. Nadie podrá dejar de mirarte.

ㅡNo quiero que todo el mundo me mire. Siempre se me han dado mal las relaciones sociales ㅡadmitió Louis con amargura.

ㅡSeguro que asistías a muchas galas en Aristo.

ㅡSí, pero nunca me gustó. Lottie es la experta en ese tipo de cosas; además, ella tiene la belleza y la seguridad necesarias para entrar tranquilamente en un lugar lleno de desconocidos. Yo nunca sé qué decir. Me temo que te vas a sentir muy defraudado, Harry
ㅡañadió con profundo pesar.

ㅡNo sabía que te resultara tan difícilㅡdijo, sorprendido de su confesiónㅡ. Pero te aseguro que no voy a sentirme decepcionado, Lou. Voy a estar a tu lado todo el rato para presentarte a la gente. ¿Se te ha ocurrido pensar que seguramente los demás se pongan nerviosos al conocerte?

ㅡ¿Por qué iba alguien a ponerse nervioso por mí?ㅡpreguntó, desconcertado.

ㅡPorque eres un príncipe. Hay muchas personas que se sienten intimidadas por la realeza; por no hablar del hecho de que eres un hombre inteligente y muy preparado. Piénsalo ㅡle dijo justo en el momento en que Stavros abría la puerta del coche.

Estaba tan asombrado por la idea de que alguien pudiera sentirse intimidado por él, que apenas prestó atención a los fotógrafos que los rodearon nada más bajarse del coche. De pronto Harry le pasó el brazo por la cintura y se acercó a darle un beso en los labios que lo dejó aún más atónito. Respondió a él de manera inconsciente y después lo miró con los ojos muy abiertos y llenos de confusión.

— ¿Por qué has hecho eso? –murmuró al tiempo que lo agarraba del brazo para subir las escaleras de la entrada el hotel.

  ㅡSomos recién casados, Lou ㅡle recordó, acompañando sus palabras de una intensa miradaㅡ Ya era hora que les diéramos a los paparazzi algo que fotografiar.

Nada más entrar al enorme salón se convirtieron en el centro de atención de todas las miradas; el naviero más famoso de Grecia y su esposo, el príncipe. Al mirar a las demás invitadas, vestidas con trajes de alta costura y todo tipo de joyas, Louis tuvo que admitir que habría llamado aún más la atención con su traje negro. Pero con ese traje azul no tendría la menor oportunidad de escabullirse a un rincón y, además, Joel se empeñó en cumplir su palabra y no lo dejó solo ni un momento.

Fueron de un grupo de invitados a otro, con todos ellos Harry sacó temas de conversación que sabía que interesarían a Louis y sobre los que tendría algo que decir. Le sorprendió darse cuenta de que, tal y como le había dicho Harry, muchas de aquellas personas no eran tan rígidas y formales como él habría creído, sino que se sentían intimidadas por estar en presencia de un miembro de la realeza, y realmente no sabían cómo tratarlo. Con la intención de hacerles sentir mejor, Louis se olvidó de su timidez y comenzó a charlar con unos y con otros, hasta el punto incluso de pasárselo bien.

Aquello no estaba tan mal, pensó poco después mientras se acercaba a la barra a pedir un zumo. Al ver que se sentía más seguro, Harry lo había dejado unos minutos para ir a hablar con uno de sus socios, pero  Louis no estuvo mucho tiempo solo.

—¿Príncipe  Louis Tomlinson? Me llamo Zayn Malik y soy profesor de la universidad de Atenas.

Louis había visto a aquel hombre mirándolo en varias ocasiones durante la velada.

ㅡSeñor Malik ㅡlo saludó con una sonrisa.

Era un hombre muy atractivo. Louis se fijó en que había varias mujeres mirándolo, pero él sólo parecía tener ojos para él y se sorprendió al ver que se estaba sonrojando.

ㅡLlámeme Zayn, por favor.

ㅡUsted puede llamarme Louis
ㅡrespondió con sencillezㅡ Todo eso del protocolo real es una pesadez, ¿no le parece?

ㅡLa verdad es que usted me parece asombroso ㅡadmitió, sonrojándose de nuevoㅡ He estudiado su ensayo sobre las cruzadas del siglo X, y el impacto que tuvieron en Grecia y las demás islas del Mediterráneo, y me pareció una de las obras más fascinantes que he leído en mi vidaㅡ Zayn esbozó una humilde sonrisaㅡ Debo admitir que lo imaginaba con aspecto de intelectual, con gafas y una chaqueta de punto, pero acabo de descubrir que es usted guapísimo... si me permite decirlo
ㅡañadió pasándose la mano por el pelo con gesto distraído.

Louis se echó a reír al oír la descripción que había hecho de él. Hasta hacía unas semanas, había sido una intelectual con gafas y ropa de punto, más interesado en los libros que en el aspecto que pudiera tener, pero al ver la admiración con la que Zayn lo observaba, no pudo evitar sentirse agradecido hacia Harry por haber transformado a un hombre soso en uno guapísimo, por lo visto.

ㅡMe preguntaba si estaría dispuesto a considerar la idea de dar algunas conferencias en la universidad, como profesor invitado ㅡsiguió diciendo Zaynㅡ El trabajo que hace en el museo de Aristo es muy conocido aquí y estoy seguro de que a mis alumnos les encantaría conocerlo.

El corazón de Louis dio un vuelco al pensar en la idea de hablar en público, pero enseguida se paró a pensar que sería una charla sobre su especialidad y lo cierto era que le encantaría visitar la universidad de Atenas.

ㅡEstaré encantado de hacerloㅡafirmó con una repentina confianza en sí mismo.

ㅡMagnífico. Quizá podríamos reunimos pronto para acordar los detalles de la visita.

ㅡMe temo que mi esposo tendrá que consultar su agenda antes de comprometerse a nada ㅡintervino de pronto Harry, que acababa de aparecer junto a ellos con el ceño fruncido.

ㅡ Harry, te presento a Zayn Malik...
ㅡdijo Louis mientras Harry lo rodeaba por la cintura y lo apretaba contra sí como si estuviera marcando su territorio.

ㅡMe parece que sus amigos lo esperan, señor Malik ㅡle advirtió suavemente.

ㅡTiene razón ㅡel joven se alejó después de despedirse de Louis con una tensa sonrisa.

ㅡEso ha sido muy grosero por tu parte ㅡdijo a su marido en cuanto el profesor se había idoㅡ. Sólo quería hablarme sobre un trabajo que escribí hace tiempo.

ㅡQuería colarse debajo de tu traje, agapi ㅡrespondió Harry, observando la cara de enfado de Louis.ㅡLleva toda la noche mirándote.

ㅡQué tontería... ㅡse sonrojó al recordar el modo en que le había dicho que era guapísimoㅡ Y si fuera así, te recuerdo que fuiste tú el que se empeñó en que me pusiera este traje.

ㅡUna decisión de la que ya me estoy arrepintiendo ㅡmurmuró Harry mientras se dirigían a la pista de baileㅡ. Estás atrayendo demasiada atención masculina y yo acabo de descubrir que soy muy posesivo. Me parece que a partir de ahora no me va a importar que ocultes tu magnífico cuerpo de las miradas de los demás.

Debía estar hablando en broma, pensó Louis antes de mirarlo y verlo completamente serio.

ㅡHarry..., ¿estás celoso?ㅡse ruborizó al pronunciar aquellas palabras porque estaba seguro de que él lo negaría de inmediato.

Pero lo que hizo fue estrecharlo en sus brazos, lo que le permitió sentir su evidente excitación.

ㅡNo estoy acostumbrado a sentir nada parecido, Lou ㅡconfesó con dulzuraㅡ Pero si se te acerca algún otro hombre desde ahora hasta que nos vayamos, te demostraré delante de todo el mundo lo impaciente que estoy de hacerle el amor a mi esposo.

ㅡ¡Harry!ㅡexclamó él, escandalizado y excitado.




Un Príncipe para un Millonario | Larry Stylinson | adaptación Donde viven las historias. Descúbrelo ahora