Estaba...¿cómo decirlo? ¿Echa polvo? No, peor. ¡Echa mierda! Eso es lo que estaba, no podía creer que Jordan se tuviera que ir.
-Kat, acércate.- me dijo Jordan desde la puerta de la habitación, había salido un momento a comprar no sé qué y recién llegaba.
-Dime- le dije sin rodeos, él se acercó y me extendió la mano, en ella había un ramo de rosas. Lo tomé con sorpresa y lo llevé a mi nariz para absorber ese dulce aroma. De la nada sacó su otra mano y en ella estaba una caja de bombones en forma de corazón. Dejé las rosas en la mesita de al lado de la puerta y me abalancé sobre él. Lo abracé y besé sus labios, que ya estaban esperando los míos con ansia. El me devolvió el beso al instante.
Mientras nos besábamos íbamos a ciegas a la cama, cuando llegamos caí y Jordan encima de mí, me empecé a reír y el me siguió. Después de reírnos me enderece para sentarme en la cama, Jordan aprovechó y apoyó su cabeza sobre mis piernas mirando hacia arriba. Con una mano empecé a delinear todo su rostro hasta que llegué al pelo, ahí lo empecé a peinar con los dedos.
-Sabes que te quiero muchísimo ¿verdad?- me preguntó de repente.
-Yo también te quiero Jordan- le dije mirándole a los ojos.
-No quiero que te preocupes ¿si?
-Ya...- le dije bajando la cabeza, el me miró y se sentó para poder quedar casi a mi altura.
-Todo va a estar bien ¿vale? Yo no me voy a ir.- dijo seguro.
-Vale...- dichó esto estampó sus labios sobre los míos y con los suyos los empezó a acariciar suavemente, provocándome un escalofrío que solo él produce en mí.
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Me desperté con mucho dolor de cuello, estaba sentada en la cama y tenía la cabeza de Jordan sobre mi pecho, acaricié su cabello y me acomodé para seguir durmiendo.
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De la nada escuché un sonido muy fuerte desde el baño de la habitación. Me acerqué y ví que todas las cosas de la estantería se habían caído al suelo, me pregunté como podría haber pasado, pero ví que la ventana estaba abierta, levanté todas las cosas, y luego recogí los cristales rotos de una botellita que había de cristal.
Uno de los cachos estaba demasiado afilado y cuando lo fui a recoger me corté el dedo provocando que la sangre saliera muy rápido.
-¡Mierda!- exclamé, me levanté y golpeé la pared provocando un ruido que hizo que Jordan se despertara.
-Kat, ¿estás bien?- preguntó con voz ronca.
-Em... sí... sí - respondí mientras trataba de parara la hemorragia con papel. Escuché unos pasos y me dí cuenta de que Jordan estaba acercándose.
Cuando entró en el baño y vio todos los papeles con sangre su expresión cambió radicalmente.
-¡Ei!¿¿Qué... qué... qué te ha pasado??- preguntó llevándose las manos a la cabeza.
-Na...nada, solo me corté al recoger un cristal...- le respondí tranquila, él se acercó y tomó mi mano, y sacó el papel.
-Dios Kat, ¿qué te has hecho?- dijo él sorprendido.
Empezó a limpiar mi herida con desinfectante, ardía bastante, pero era aguantable, luego tomó unas gasas del botiquín y me las puso con cuidado.
-¿Cuándo aprendiste a curar heridas?- le pregunté curiosa.
-Mi madre me enseño.- me dijo más tranquilo.-Venga vamos a dormir.
-Lo siento...
-¡Bop!- dijo encogiéndose de hombros, se acostó y me indicó que me pusiera entre sus brazos, lo hice y oculté mi cabeza en su pecho.
*
Volvía a estar en la nada, todo oscuro. Ví una luz y me dirigí hacia ella pero poco a poco me fui dando cuenta de que cada vez que me acercaba la intensidad de la luz aumentaba.A medida que me aproximaba me fui dando cuenta de que esa luz era una puerta que estaba casi del todo anierta. Me acerqué y la atravesé.
De la nada vi una playa muy conocida para mí, allí estaban mi madre, mucho más joven, mi hermana, que era un bebé , también estaba mi padre, que me sonreía y me decía que me acercara. Miré para abajo, y me dí cuenta de que era una niña pequeña, bueno, más bien mi yo pequeña.
-¡Kat! ¡Ven que tenemos tu sándwich!- me dijo mi madre indicándome que me sentara al lado de ella. Hice lo que me dijo y empecé a comer mi merienda con gusto.
De la nada, ya no estaba en la playa con mi familia, estaba en el cuarto de Jordan, él estaba a mí lado mirando al techo. De la nada me empezó a hablar.
-Pues no sé que decirte...-le dije como si supiera de que estaba hablando.
-Pues entonces me iré.- dijo frío- Adiós Kat.
Dicho esto se fue, dejándome sola en su cuarto con las manos en mi cara intentando ocultar mis lágrimas.
-Está aquí, te lo avisé- dijo una voz demasiado familiar para mí. Mi padre. Él volvía a estar ahí...- Te hará sentir perdida, te lo dije.- Cuando acabó de hablar se desvaneció dejándome sola otra vez. De repente sentí una punzada en mi pecho, bajé la mirada y ví un cuchillo clavado en mi corazón.
Me desperté asustada, me giré para ver a Jordan, pero no estaba...
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Y de repente llegaste tú...
RomanceKat: chica tímida, dulce y tierna, todo eso lo oculta bajo una máscara. Lo que ella no sabe es que cuando él llegue a su vida esa máscara se debilitará y dejará a la verdadera Kat que hay detras de toda esa fachada. Jordan: chico seguro sin miedo a...