Al otro Lado del Espejo [Terminada]

IV: Curiosidad

De ante mano, Gracias por leer"

Aℓ σтяσ ℓα∂σ ∂єℓ єѕρєנσ

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"Una aventura en un nuevo mundo".

Ochako creyó que el camino hacia la biblioteca del pueblo, sería tranquilo y silencio, sin embargo no fue así. Habían caminado tan solo unos metros cuando se escuchó el sonido de un avión que pasaba por los cielos.

Aquel ruido llamó la atención del joven de ojos carmesí, tanto que este se detuvo de golpe y alzó su vista al cielo.

──Que dragón tan raro──. Susurró al ver el vehículo escabullirse entre las nubes.

Uraraka ni siquiera se había dado cuenta de que el rubio se había quedado atrás, ella seguía caminando confiada de que Katsuki venía tras ella, no fue hasta que lo escuchó maldecir a un viejo buzón que se percató que él no la seguía.

El chico siguió caminando sin despegar su vista del cielo, estaba tan entretenido mirando la aeronave que no veía por donde iba y acabó chocando con un viejo buzón, el cual terminó siendo maldecido y pateado por el rubio.

Ochako se dio cuenta que el recorrido no iba a ser para nada silencioso.

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Katsuki sentía suma curiosidad por todo aquello nuevo que veía, casi fue atropellado por quedarse viendo un letrero luminoso.

Veía curioso las extrañas ventanas que irradiaban luz y cambiaban constantemente de imagen (los televisores) que vendían en las tiendas de electrodomésticos. Miraba extrañado a las personas que hablaban por sus celulares y también las extrañas vestimentas y mascaras que algunos poco usaban, estos pocos eran los héroes del lugar.

──¿Por qué hablan solos?──. Se preguntaba a si mismo, mientras nuevamente se quedaba de pie en medio de la calle.

Ochako estaba por hablarle pero, cuando volteó hacia el rubio, este ya no estaba a su lado. Giró su cabeza a ambos lados pero, tampoco logró verlo, no fue hasta escuchar el clac son de un auto que dio con él.

Katsuki seguía de pie en medio de la calle y un auto le pitaba para que saliera del camino.

──¡Oye tú, imbécil quítate del camino! ──. Gritó el dueño del vehículo.

──¿ha? ──. Katsuki arqueó una de sus cejas, ¿Quién se creía esa chatarra para hablarle de esa forma?, así es, Katsuki creía que era el auto quien le hablaba.

──¡¿Qué no escuchaste?, quítate del camino imbécil! ──. Nuevamente el sonido del clacson se escuchó.

──¡Oblígame estúpida hojalata!──. El rubio comenzó a patear el vehículo.

Eso no podía ser buena señal.

Ochako no tuvo de otra mas que ir por él.

──Oye, ¿Qué crees que estás haciendo? ──. Le pregunto al tomarlo del brazo.

──Haré pedazos esta porquería──. Aviso, pateando nuevamente el auto.

El sujeto del auto salió dispuesto a enfrentar al rubio, pero antes de que el enfrentamiento se diera, la castaña jaló del brazo al chico, llevándoselo lejos.

El resto del camino, Uraraka llevó de la mano al rubio, como si de un niño pequeño que pudiera perderse se tratara. Esto para evitar que se quedara atrás y comenzara a hacer escándalos. Aquello lejos de molestar al rubio, le agradaba, llegando hasta sonrojarse por ello.