Men For Men *Libro 1* (Mew-Gulf)

15. El amor es... 🔥

Se recostaron en el sofá y se besaron sin cansancio por más tiempo del que se imaginaron. Mew sentía que no quería perder nunca más ese delicioso néctar en que se había convertido para él los labios y la lengua de Gulf. El día anterior había temido por perderlo, por eso ahora parecía mejor que antes. Tenía mucho más significado ahora. Sin duda alguna se debía a la libertad que sentía ahora de entregarse por completo a la persona que ama. Después de que sus labios estuvieron hinchados se separaron y se miraron por un largo tiempo. Sonrieron, se hicieron cosquillas y luego se abrazaron de nuevo.

- Gulf... gracias por llegar a mi vida- dijo Mew olisqueando el cabello de Gulf que estaba en su hombro – cada vez que miro hacia atrás siento ganas de reírme de mi mismo- soltó una pequeña carcajada- antes pensaba que lo normal era tener trabajo, un grupo de amigos correcto, pero ahora no concibo mi normalidad sin ti- besó la frente de su amado.

- Tienes una obsesión con la normalidad, cariño- dijo Gulf levantándose lentamente.

- ¿Desde cuanto que sufres de vértigo? - preguntó Mew siguiendo a Gulf en el movimiento. Gulf se tensionó ante esa pregunta. Recordar lo ponía nervioso.

- Hace un tiempo, es por cuestiones del oído- dijo tratando de evadir el tema y bajarle importancia. No le iba a decir que gracias al golpe recibido por su ex.

- Te sorprenderá que alguna vez lo he tenido y he aprendido una forma de hacer que se vaya pronto- dijo Mew señalando unos círculos de colores colocados de manera estratégica en la sala y que Gulf sabía que estaban en toda la casa, pero parecían parte de la decoración de las paredes y a juego con la pintura, por lo que había asumido que era parte de la decoración.

- ¿Cómo es eso? – preguntó Gulf atónito.

- Si, esos círculos son puntos fijos a los que puedes mirar y tratar de enfocar cuando sientas que te llega el ataque de vértigo, el mareo se va yendo, pero te enseñaré a profundidad luego. Por ahora, vamos a la cama ¿sí? - rogó haciendo un puchero.

- Pero primero, quiero mostrarte algo – Gulf se paró y caminó hasta donde había dejado sus compras – tenía pensado prepararte una pequeña sorpresa, pero la sorpresa que tú me has dado la supera con creses- volvió con un par de cajas.

- ¿Qué es esto? – preguntó Mew cuando recibió las dos cajas. Una era pequeñita y la otra mediana. Ambas estaban muy bien decoradas.

- Unas cositas que compre que son de parejas. No sé si a ti te guste usar esas cosas, pero a partir de ahora te tendrán que gustar, porque a mí me gusta muchísimo- Gulf se acercó coquetamente a Mew y le dio un beso.

- No me molesta, pero hay cosas de pareja que son un poco...-

- ¿Cursis? ¿molestas? ¿demasiado para ti? - lo interrumpió Gulf.

- No, a veces hay cosas que no tienen mi estilo- dijo mirando con detenimiento la caja pequeña.

- Bueno, ábrelas y miremos si esto es de tu estilo- dijo Gulf con un toque de malicia.

 Mew soltó una carcajada cuando abrió la caja más grande de las dos- y yo que pensaba que eras el más inocente de nuestra relación- dijo limpiándose las lágrimas.

- ¿de nuestra qué? – preguntó Gulf con los ojos brillantes

- Nuestra relación, nuestro noviazgo- respondió Mew orgulloso de que aquellas palabras hicieran ese efecto en su amado.

- Te amo- dijo Gulf rápidamente. Él no había dicho eso todavía. Lo que causó que Mew se le tirará encima para darle muchos besos. Después de juguetear un rato más diciéndose te amos por aquí y por allá, Gulf preguntó - ¿te gustó ese regalo? –