Men For Men *Libro 1* (Mew-Gulf)

20. El cierre

- Por el amor de dios, Mew, no de nuevo- decía Gulf medio dormido. Su amado estaba frotándose contra él en el incómodo suelo en el que habían dormido. Mew estaba muy duro contra el culo de Gulf y unos simples bóxer no lo iban a detener.

- Joder Gulf, es que anoche fue tan caliente- decía dejando besos en el cuello de su amor.

- ¿Qué hora es? - preguntó Gulf dándose la vuelta, necesitaba alejarse de aquella erección antes de perder la cordura.

- La hora de follar...- respondió Mew acercándose más y más. Pasó su pierna por debajo de la de Gulf para presionar contra el miembro de su novio. Uno de sus brazos presionó la cintura de Gulf contra él - la hora de que te corras, la hora de dejarnos llevar, la hora de...- no pudo terminar de hablar porque su teléfono empezó a sonar.

- La hora de contestar- dijo Gulf soltándose y riéndose.

- Si, tenía que ser este imbécil el que nos jodiera el momento, por supuesto- dijo Mew mirando quien lo llamaba.

- ¿Otra vez Mark? - preguntó y Mew asintió- contéstale de una buena vez, podría ser algo bueno- dijo Gulf levantándose rápido para empezar a prepararse.

- Podría ser malo, no quiero tener nada que ver con ese sujeto. Me humilló- dijo poniéndose la camisa y arreglándose su erección. Después se puso de rodillas para recoger las cobijas.

- Bien, pero entonces deberías bloquear su número, es un poco estresante- Gulf se puso su camisa del uniforme y se dirigió al baño.

- Lo haré- respondió Mew mientras guardaba las cobijas en el bolso- no volveremos a dormir aquí, es demasiado incómodo, me duele mucho el culo- se quejó. Gulf lo escuchó en el baño y al principio sintió una punzada de dolor, efectivamente no volverían a dormir allí, pero no por lo que Mew decía, que también, pero la razón más certera era porque aquel sitio ya no sería de Gulf. Después sonrió cuando una idea traviesa llegó a su mente.

- Es una lástima que te duela por las razones equivocadas- dijo Gulf saliendo del baño.

- Puede ser que después de que veamos a mi padre te deje hacerme esa razón que consideras no equivocada para que me duela el culo- Mew respondió con un tono seductor.

- No puedes estar hablando jodidamente en serio- dijo Gulf con los ojos bien abiertos por la sorpresa, pero luego su boca se secó de imaginarlo. Joder, él adentro de Mew, al menos una vez, hacerlo gemir, gritar y ver su propia corrida en el otro. Bendita vida, si eso llegara a pasar.

- Si lo estoy amor, ya lo he deseado antes- dijo Mew acercándose con sus ojos negros de lujuria a Gulf que estaba petrificado por la información que acababa de recibir.

- Joder, Mew- dijo Gulf abrazando con todas sus fuerzas a su novio y besándolo con violencia, con pasión. No se iba a separar de Mew, no ahora, cuando su unión era más real que cualquier otra cosa. Si, podía volver a levantar su negocio en el futuro. En cambio, con Mew no era lo mismo, así que mejor no jugar con eso, mejor conservar a Mew, mejor ser su apoyo, su aliento, su equipo, su pareja, su amante, su fortaleza, su puerto seguro.

- Pronto serán las nueve, es mejor que me vaya y que tú, empieces tu día- dijo Mew besando más y más.

- ¿Qué te parece si te quedas aquí en la mañana? Podemos desayunar juntos...- pidió Gulf dejándose lamer las comisuras de su boca.

- ¿Sabes qué? – preguntó Mew separándose un poco

- No, dime...- Gulf tenía los ojos cerrados entregándose a las sensaciones y a la voz sensual y ronca de su amado.