¿Por qué no? (Mayo mes del Marichat 2021)

11

Plagg quería dormir y Adrien quería hablar. Aquella habitación gigante en la mansión Agreste era un debate completo.

-Duérmete niño. Llegamos tarde porque visitas a Marinette todas las noches y por tu culpa dormiremos cuando ya esté amaneciendo.

Adrien se hincó al lado de la almohada en la que Plagg enterraba su cabeza para intentar no escucharlo y le habló.

-No puedo dormir. Necesito una respuesta a lo que siento cuando estoy con Marinette.

El kwami lo miró con su cuerpo recostado.

-Si conseguimos tu respuesta, ¿Vamos a dormir?

El movió su cabeza de arriba a abajo rápidamente dando su aceptación, mientras Plagg pesadamente sacaba la cara de la superficie acolchada.

-Bien, sabes bien el nombre de lo que sientes, es más que obvio. Aunque digas que amas a Lady Bug, tienes que aceptarlo.

El chico se levantó del suelo y comenzó a caminar en círculos, sosteniendo el amuleto encantado de la ojiazul entre sus manos.

-¡No! Es imposible. Me niego a aceptarlo. Es ilógico.

Eso había logrado estresar a Plagg, provocando que el kwami se levantara.

-Suspiras, te sonrojas, solo hablas de ella todo el día, vas a su balcón a verla día a día, el día que perdió su vista lloraste, y si pudieras besarla, no perderías la oportunidad. ¿Para que negarlo y hacer que nos durmamos más tarde?

El chico se quedó un rato callado pensando, hasta que volvió a negar.

-No, es demasiado Spiderman y Mary Jane. No quiero ser como Spiderman y Mary Jane, a mi me gusta más Flash.

Plagg lo miró con una sonrisa. No faltaba mucho para que el rubio lo admitiera, lo conocía tan bien.

-No, simplemente no voy a aceptar que... ¡Estoy enamorado de Marinette!

El kwami giró victorioso su cuerpo y le dio las buenas noches a su portador.

Finalmente lo había afirmado y eso fue sorpresivo incluso para él mismo. ¿En qué momento había pasado de amar a Lady Bug, a amar a Marinette?

-¿Es normal que ya no me caiga tan bien Lady Bug? ¡Agh, esque tiene el amor de Marinette!

Dijo antes de acostarse de mala gana en su cama e intentar dormir, lamentándose el haber desaprovechado el amor de Marinette cuando lo tuvo.
Sus ojos se abrieron como platos al recordar algo y negó.

Rayos, Tom no lo aceptaría jamás. ¿Acaso ese era el comienzo de una historia parecida a la de Romeo y Julieta?
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Marinette caminaba del brazo de Alya en la escuela.

-Hoy te hubieran quitado las vendas, pero no lo hicieron porque ayer lloraste. ¿Que te hizo llorar? Sabes que puedes contarme todo. No hay secretos entre nosotras ahora.

Marinette le llegó un flashback y se quedó callada, sumergida en sus recuerdos.

-Tengo que confesarte algo.

Escuchó al héroe gatuno decir, mientras este tomaba su mano.

-Dime.

Le contestó mientras sentía su presencia cercana a ella.

-Para nada eres una amiga.

Marinette sintió como si hubiera sido atravesada por millones de cuchillos.

Ella solo sintió como sus ojos comenzaron a humedecer, mientras el rubio miraba como los labios de la ojiazul comenzaban a temblar en un puchero.

-¿Por qué ya no somos amigos? Creí que nuestra amistad era algo bonito. ¿Qué hice mal? ¿Es porque no veo? Pronto vere y volveré a ser una amiga divertida. No quiero que ya no me quieras.

Le dijo rápidamente mientras sentía como ella se inclinaba hacia donde el casi suplicando, mientras escuchaba que el héroe negaba.

-No, no, no. No quise decir eso. Mejor olvídalo. Luego te hablaré sobre eso. No es nada malo, lo juro. Para de llorar porfavor.

La chica azabache moviendo su cabeza, regresó a la realidad.

-Nada Alya, cosas de ser la guardiana de los miraculous.

Y siguió a caminando a su lado, no diciéndole nada a su amiga, pues no quería que Rena Rouge colgara del arco del triunfo al héroe.

Continuara...

Me duele mi cabeza, así que no voy checar ortografía. Mañana veré si la mejoro.

Comí un Brownie y eso me hizo mal. El día a día de una alérgica al chocolate.

Espero que no me internen en un hospital como la vez anterior, solo por comerme un huevito Kinder ;(

En fin, disfruten.