Bueno, aclaraciones, se que no a todos les gusta sexualisar personajes, pero los puse y son mayores, (los menores) en todas dice advertencia y aclara los puntos de vista.
-No en todas hay mayor 18
Pero, es decir,,, hay besos y abrazos y lo puse com...
•Palabras: 3635. •Tema: Polifacética. •Advertencia: +18. •Explicación: Zhongli a estado muy ocupado durante estos días y Childe cree que necesita despejarse por lo que decide llevarlo a un burdel donde tu y el se conocen.
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お金 [Dinero]
—¿De verdad crees que debamos ir?
Dijo serio ajustando sus guantes y caminando al lado mientras su amigo iba platicando y contándole de aquel burdel donde podrían ir.
—Vamos, se que no te aburriras...
Platican tranquilos, últimamente Zhongli a tenido pesimos días y había estado algo agotado, con lo de la muerte de Rex Lapis los ciudadanos han entrado en pánico y le preocupa el estado mental de aliados.
—Nobile.
—Te dije que me llamaras Tartaglia.
Respondió sereno adelantándose a su amigo con cierta sonrisa cálida y amistosa en un minuto, era raro para el sesino despiadado en un rato y al otro un buen tipo. Su personalidad cambiante e impredecible puede dejarlo corto a la hora de describirlo.
—Vamos sígueme, no te quedes parado.
Sonrió inquieto llevándolo dentro de una casa pequeña donde fueron saludados por un vendedor de maíz. El chico de pelo naranja se inclinó sobre el mesón para susurrarle en el oído para que los clientes no escucharan.
—En la habitación de al lado a la derecha y bajan por las escaleras.
Respondió con una sonrisa traviesa y jugando con su bigote sin abrir los ojos.
—Gracias abuelo.
Respondió caminando con su invitado a un lado y siguiendo las explicaciones hasta llegar bajo las escaleras a una habitación subterránea.
—Buenas noches. ¿Que necesitan?
—Queremos... ¿De qué tipo quieres?
—Ah....
—Dele una de piernas gordas y no tanto pecho.
—¿Con que pagarán?
—Efectivo.
Respondió el muchacho sonriendo y viendo a la mujer mayor alejarse algo desconfiada.
—No tengo dinero...
—Confía en mi.
Respondió tirando la lengua y apuntando a un sofá donde habían unas mujeres. Zhongli se quedó callado junto al barandal pidiéndole algo de tomar al cantinero.
