Capítulo 43: El único

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Ethan les contó casi todo desde que dejó el burdel.

Que trabajó en una tienda de violines, que fue ladrón y luego pirata, que robó un barco y navegó hacia el Sur, a las lejanas islas de los otros dos continentes. (Que en realidad era mentira).

—Estás loco—exclamó Aiden asombrado y con la boca llena.

—¿Es por eso que tienes dinero? —exclamó Jack fascinado—debí volverme pirata en vez de...

—Yo sólo tuve suerte—se excusó Ethan riendo—y aunque enfrente a muchos piratas...al final mi tripulación se dispersó, otros murieron, u otros persiguieron sus sueños.

—¿Y dónde entra él? —preguntó Rossbeth mirando a Aris.

—Vivía en una isla lejana, donde sólo hay soledad y personas insufribles...fue ahí donde nos conocimos. En el mar—respondió Aris con rapidez antes de que Ethan pudiera decir algo—Él me salvó...

—¿Y te uniste a él? ¿eres su mano derecha? —y mirando con más dudas Jack continuó—¿por qué ocultas tu rostro? ¿eres feo?

—Jack, por los dioses, que preguntón te levantaste hoy—exclamó Verónica con enfado.

—Sí, me uní a él—respondió con gran gusto y movió su cabeza hacia Ethan, quién estaba a su lado.

—Yo era el príncipe de esas tierras, pero no quería ser rey. Me llevó con él y ahora quieren matarnos.

Ethan palideció y lo miró extrañado. Pero Aris dijo rapidamente:

—Es broma—y riendo tomó del vino—sólo soy...un simple don nadie, de una aburrida y lejana isla.

Todos suspiraron de alivio en sus corazones, pero por un instante creyeron tal extravagante mentira...

—Y preguntan que si soy su mano derecha...por supuesto que lo soy—tomó su capucha y dijo en voz baja—¿soy feo? tal vez no, eso depende del gusto.
¿Por qué lo oculto? Bueno, por muchas cosas. Codicia, lujuria, deseo, maldad, o también celos, Ethan es un poco celoso, y no lo culpo, yo también lo soy. Una belleza como él es muy codiciada y observada.

Retiró su capucha y sonrió con dulzura.

—Y es mejor viajar así, a veces siento que llamo mucho la atención—y bajando la mirada sonrió un poco apenado.

Todos los miraron, a Ethan y Aris, perplejos.

—Maldita sea...—musitó Jack—es jodidamente hermoso. Está decidido, también seré un pirata.

Aris rio y bebió del vino.

—Su nombre es Aris, y estoy casado con él—anunció Ethan con un leve sonrojo y una sonrisa tonta.

—¿Ah? —exclamó Len—¿y-ya estás casado?

—S-Si—respondió con una risa nerviosa.

— Felicidades—dijo Corwin encantado.

—Gracias.

—Estoy tan feliz por ti—musitó Verónica—al fin eres feliz...

—Lo soy.

—También quiero agradecerles—Aris miró a Ethan con melancolía y dijo con sinceridad—si no fuera por ustedes nunca hubiera conocido a mi querido Ethan.

—Fue un placer tener a tan gentil y amable niño con nosotros—respondió Corwin.

—Por cierto, ¿ahora te llamas Ethan? —interrogó Jack frunciendo la entreceja.

—Yo...—bajó la mirada y continuó—en realidad les mentí, por favor perdónenme.

—¿A qué te refieres? —interrogó Len sin entender.

Príncipe rebelde© ✓ [Secuela]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora