Jackson Mi eterna perdición #1 《COMPLETA 》✔

14°

Los días y semanas pasaban y podíamos decir que cada vez me acercaba más a Jackson.
Obviamente que mi cautela se había ido al caño aquella noche que termine acostandome con él.
El maldito alcohol solo había ayudado a que perdiera por completo mi vergüenza, pero no a mantener mi sentido común.

Ya no faltaba nada para el gran "baile primaveral", y los alumnos del último año lo haciamos saber más que nunca.

Había llegando el viernes y con eso la hora del arte. La profesora Aitana nos ayudaría a armar cada parte del baile.

—Hola mis pequeños gigantes—

Nos llamaba de esa forma tan cariñosa porque cada vez estábamos mas cerca de concluir nuestro ciclo. Y para ella siempre íbamos a ser sus pequeñitos.
Aitana fue la única profesora que tuvimos desde el primer años hasta ahora y es por eso que cada uno de nosotros le teníamos una gran estima.

—¿Qué tienen pensado hacer?—

—Queríamos poner guirnaldas y luces de colores por todo el anfiteatro para darle mucho más llamatismo— habló una de mis compañeras.

—Si yo también contrar un DJ para ambientar el sitio con buena música—agrega otro.

—Me gustan muchos sus ideas— ¿Algo más?

—Si, como no se puede consumir alcohol, estuvimos pensando encargar ponche o alguna bebida sin contenido alcohólico—

—Bien pensando— ¿Y van a ir de traje o informal?

—La mayoría quiere acudir formal— esta vez hable yo.

—Cambiando de tema, tiene pensado realizar alguna feria antes del baile— Digo para recaudar un poco de plata.

Esta idea no estaba nada mal, y nos vendría muy bien para cuándo hiciéramos el último baile del año, antes de la graduación.

—Solo piénsenlo, todavía les queda un poco de tiempo podrían aprovecharlo para organizar bien la feria—

—Yo estoy de acuerdo— comentó.

—Levanten la mano lo que les parece acertado realizar una feria colectiva para recaudar dinero— menciona la presidenta de curso.

Prácticamente todo el salón había aceptado, era muy necesario realizar eso. Nos vendría de maravilla.

Solo pensar que ya tendríamos nuestro primer baile emocionaba y mucho y más ahora que le sumabamos la feria colectiva. Este último años me había propuesto disfrutar cada parte, cada detalle aunque sea lo más simple del mundo, porque se que lo que voy a vivir con mis compañeros no se va a volver repetir dos veces.

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Las semanas seguían pasando y hoy era el día que nos entraban las notas de los exámenes de matemáticas. La profe nos había avisado que la dejaría colgada en el pasillo escolar.

En bien ingrese a la escuela, me fui hasta la cartelera a ver los resultados. Solo esperaba pasarla con o si una buena nota era lo mismo.

Camiene lo más rápido que puede llegando a esta. Espere que las personas buscaran sus nombres, mi impaciencia se notaba mucho, me movía de un lado y pasaba mi peso de un pie a otro.

Una vez que llego mi turno busque con desesperación mi apellido. Cuando vi la nota colocada al lado de mi nombre pegué un grito llamando la atención de muchas personas. La verdad que no importa nada si me consideraban una loca. Lo unción que interesaba era que habia pasado la maldita materia.

Samanta llega a mi lado mirándome con la misma cara de otros alumnos.

—Eso solo puedo significar una cosa— ¿Es lo que estoy pensando?