- Pero Damián es un gran luchador, fue preparado por Batman y sigue un arduo entrenamiento constante. - Replicó Mar'y, olvidando el hecho de mantener su identidad secreta. - ¿Cómo es posible que sucediera?
Nadie pasó por alto las palabras "Damián" ni "Batman", más estas no eran las circunstancias para fijarse en detalles tan mínimos como ese.
- Tal vez sea un adivino o ve el futuro. - Disparató Lucy, aunque en un mundo así la teoría no sería tan descabellada.
- O te ha estudiado tan bien que puede pasar como un fan... - Contribuyó Dany, dirigiendo la mirada a Damián.
Y el hijo del murciélago se inclinó a creer la segunda teoría. Analizó cada movimiento ejecutado, y se dio cuenta de ciertas irregularidades. La forma de esquive, dejarse golpear, la energía que le traspasaba el cuerpo... Ese tipo no era un tipo cualquiera, estaba claro, pero ahora se hacía mucho más extraño, porque conocía el modo de ataque de Damián. Aunque odiara aceptarlo, no era una pelea que podría ganar, no con sus conocimientos en lucha al menos.
- Pues sea como sea, se sobreestima demasiado, la rubia lo espantó mucho. - Agregó Jack.
Y era cierto. Damián dirigió sus ojos hacia la pequeña silueta, y por primera vez en la noche se preguntó quién demonios era esa chica y porque le resultaba conocido su rostro. Pronto recordó a la cobriza y que aquella rubia había aparecido junto a ella, también recordó la tacleada que le había dado y la pregunta que le hizo.
- Hey tú. - Le llamó, a lo que Lucy simultáneamente le miró. - ¿De dónde eres tú? ¿De dónde han salido ambas?
Lucy se alarmó ante la pregunta, y no supo que responder. No había considerado que atacar así a aquel chico y entrometerse de forma tan impertinente podía jugarle a la libertad. Pronto se dio cuenta que cuatro pares de ojos la miraban esperando un respuesta, y deseaba salir corriendo en ese mismo instante, pero no podía hacerlo, no podía abandonar a Lena allí. No podría mentir tampoco, debía decir la verdad.
- Si quieres saberlo debes prometer algo, niño maravilla. - Mencionó seria.
Damián arqueó una de sus delgadas cejas detrás del antifaz. No iba a dejar que una niña idiota le pusiera condiciones, pero de cualquier forma la iba a complacer, aunque fuese una vulgar mentira.
- Habla.
- No vas a llamar a la policía si te lo digo, ¿Entiendes? - Ahora las miradas eran más profundas.
Damián sonrió de forma superior, ¿Que tan malo debía ser para que le propusiera eso? La idea de verla detrás de rejas resultaba extrañamente reconfortante.
- Muy bien, nadie va a llamar a la policía. - Aceptó con una burla que la chica no supo captar.
Y estuvo a punto de contar que era hija de la gran Harley Quinn, y que había escapado para encontrarla, además de ser perseguida por la policía, pero pronto cayó en cuenta de que no debía confiar. Había sido un paso estúpido gritarle y atacarle tan de la nada, y si quería encontrarla debía fijarse en alguien más accesible que Damián, alguien más comprensivo, no el loco que tenía en frente.
- Lena y yo escapamos de un orfanato en Chicago hace algunos meses. - Mintió, intentado que aquello no la consumiera viva.
- ¿Por qué vinieron a Gótica? - Preguntó ahora Mar'y, quien estaba también curiosa.
- Solo caminamos por días sin saber a dónde ir, hace unas cinco horas no teníamos idea de donde estábamos. - Volvió a mentir.
Y Mar'y se dio cuenta, pero se mantuvo en silencio. Damián también encontraba sospechosa la situación.
- ¿Y por qué una metahumana estaba contigo, en un orfanato?
- ¿Quien dice que es una metahumana? - Cuestionó Jack. - Solo resistió formidablemente un ataque, pero no estamos seguros de que sea una metahumana, solo una chica increíblemente resistente a la electricidad.
- Joder chico, si tú mismo lo has dicho: Su cuerpo es extraño, se cura distinto. - Mencionó Dany.
- ¿Y que dices entonces? ¿De dónde sale la rubia esa? - Volvió a preguntar Damián.
- No lo sé, nos conocimos en el orfanato. No sabía que podía hacer esas cosas, nunca lo mencionó. - Inventó Lucy nuevamente, aunque era obvio que llevaba cierta verdad en ella.
Esta vez el hijo del murciélago se quedó callado. No había encontrado la respuesta que buscaba, pero no creía poder sacarle más información a la cobriza. Además, apenas despertara la rubia le haría un buen mazo de preguntas con respecto a su origen y la razón por la que su rostro se le hacía tan conocido.
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Silencio en ciudad gótica. [New Teen Titans]
Hayran KurguLuego de que nuestros súperheroes, los jóvenes titanes, disolvieran su grupo, todo se ha encontrado en bastantes buenas manos, y la paz parece reinar entre las personas... O parecía, pues nuevas amenazas aparecen en ciudad gótica con la partida del...