Julieta.
— El vestido, es completamente hermoso. Tenes buen gusto, Julieta.
Una sonrisa se forma en mi rostro después del comentario de Aldana, la novia de uno de los amigos de Mauro. Dos meses. Dos meses que se hicieron eternos hasta por fin, llegar a este día. La culpa me sigue consumiendo, de eso no tengo dudas. Todos los días pienso en lo mucho que me arrepiento de haber estado con Tomás. Pero; Es demasiado tarde para arrepentirse como dice el dicho. Cada vez que miro a Mauro a los ojos, pienso en que debería decirle pero, eso nos arruinaría. Lo arruinaría cuando, esta en su mejor momento. No puedo defraudarlo. No después de todo lo que hizo.
— ¿Cómo está la novia? — Levanto mi cabeza al ver a Lucas, el mejor amigo de Tomás — No sabes la cantidad de gente que está afuera esperándote.
— ¿Mauro, llegó? — Niega con la cabeza. Supongo que debe estar cambiándose, igual que lo estoy yo — ¿Cómo está Tomás? Me imagino que venís a hablarme de él. Hace dos meses que no sé nada.
— Intento contactarte por todos los medios posibles hasta que se cansó. Sigue igual. No cambió. Cada vez está peor pero, necesita que lo escuches.
— Hoy no.
— Es mi mejor amigo; Una sola conversación y después, no lo ves nunca más. Yo me voy a encargar de eso.
Abro la boca para decir que no pero, fue en vano. Tomás está parado en el marco de la puerta. Bajo mi cabeza, no quiero mirarlo a los ojos. No quiero recordar lo que pasó entre nosotros. No ahora.
—Al parecer hasta Lucas, piensa que vos y yo tenemos que hablar.
Rompe el silencio cuando entra al vestuario. Niego con la cabeza. No quiero hablar con él.
— Porque es tu mejor amigo, no el mío.
— Julieta; No te cases. Por favor.
— Todos los amigos de Mauro y él, me están esperando.
— Nunca vas a ser feliz si te casas con él. Porque siempre vas a estar pensando en mí. Nosotros tendríamos que ser los novios; No vos y él.
— ¿Nosotros? No existe un nosotros, Tomás. Nunca existió. Tampoco va a existir. Solo fue irnos a la cama una sola vez.
— ¿Y él lo sabe? — Pregunta, de forma sarcástica. Tanto, que me da escalofríos — ¡Mauro, no te vi que estabas ahí! ¿Todo bien, campeón?
Levanto rápidamente mi cabeza. Trago saliva, pienso que me está haciendo una joda pero siento como respiran atrás mío. Tomo aire antes de darme la vuelta. Mauro está ahí. Roto. Por mi culpa. Él siempre tuvo razón, por culpa de Tomás estoy a punto de perderlo todo.
— Entonces, es verdad. Te acostaste con él.
— Creo que estoy demás; Así que voy a proseguir a dejar a los novios solos. Felicidades.
— Yo te voy a matar, hijo de puta.
Mauro sube su tono de voz y antes de que Tomás pueda salir por la puerta trasera de la iglesia, mi novio o próximamente ex; Agarra al que algún día fue mi colega por la espalda para darlo vuelta de un tirón y empezar a golpearlo. Quiero separarlos. Pero, son más fuertes que yo..
— ¡Basta, Mauro lo vas a matar! — Tiro de su brazo y a pesar de que en estos momentos, de seguro me odia, deja de golpear a Tomás — Y vos ándate, lo único que haces es generar problemas. Sos un bardo. Ojalá puedas rescatarte.
— Si esa perra quiere drama, no se la des.
Dice el verso de una de sus canciones y acto seguido, desaparece por una de las puertas. Mauro está frente a mí y tampoco soy capaz de mirarlo a él a los ojos.
— Decime por favor que no es verdad lo que él dijo. Solo de esa forma vamos a poder llegar al altar y casarnos como siempre quisimos.
— Ojalá pudiera decirte que no es verdad pero, te juro que me arrepiento día a día de lo que hice.
— ¿De qué sirve arrepentirse? Te acostaste con él y después llegaste desesperada para acostarte conmigo y borrar sus restos. "Haceme el amor, como vos solo me lo sabes hacer." No soy pelotudo, mucho menos tuyo.
— Entonces; ¿Siempre lo supiste y no me dijiste nada?
— No tenes derecho a hacerme ningún planteo, vos fuiste la que me engañó y me mintió a la cara como siempre, desde que apareció él.
— Mauro...
— No voy a casarme con vos, Julieta. Ni hoy; Ni nunca.
Cierro los ojos a punto de quebrar en llanto. Mauro se retira y me deja completamente sola. Humillada, como me lo merezco y esperando un hijo de él. Uno que no sabe que existe.
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colegas | cro ft cazzu y lit killah
Fanfiction"Y que si se gasta tu suela, sabes de sobra que tienes mis zapatos, soy tu colega" "Aun sabiendo que yo la quiero y vos no"