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—¿Y?¿ No vas a responder? —Pregunto sin apartar la mirada de Damien. —No pienso decir nada más.

Su mirada es intensa, puedo reconocer cada emoción que pasa por ella, pero ya le abrí mi corazón es hora de que el haga lo mismo, y cuando creo que va a hablar comienza a sonar Youngblood de 5 Seconds of Summer interrumpiéndolo. Es el tono de mi teléfono.

—Hola Jon. —Lo respondo al ver el nombre de mi hermano junto a una foto nuestra en la pantalla.

—La liga enloqueció. —Es lo primero que dice dejándome sin palabras. —Se fueron a enfrentar a DarkSeid solos.

—¿Qué? —Veo como aparece la preocupación en los ojos de Damien, reflejo de los míos.

—Lo que escuchas hermana. —Son sus palabras suena aterrado. —Nos dejaron encerrados en la Batcueva y se fueron a combatir la invasión.

—¡¿Están jodidamente locos?! —Grito. —Voy a por ustedes.

—¿Qué pasa? —Pregunta Damien.

—Nuestros padres que decidieron hacerse los héroes mártires y fueron a combatir solos la invasión. —Según digo eso noto que su ansiedad aumenta. —Dejó a los chicos encerrados en la Batcueva.

—No podrán solos. —Es lo que dice.

—Lo sé. Tengo que irme. —Cuando voy a salir volando, siento que sujeta mi mano.

—Me voy contigo.

...

Rompo la puerta de la Batcueva y noto como ya los chicos se encuentran listos, Jen corre a abrazar a su hermano mientras que yo hago lo propio con Jonathan.

—Chicos. —Damien nos mira a todos. —Hoy nos graduamos de héroes. Es hora de ir a salvar al mundo.

—Don y Dawn repararon el transbordador. —Le informa Jen. —Y le incorporaron armas a tu moto. Yo preparé esto junto a Atenea. —Muestra una flecha. —Es única, pero solo tendrá efecto si conseguimos herir a DarkSeid.

—Vamos. —No consigo escuchar el resto de lo que hablan los hermanos Wayne porque Jonathan me lleva hasta el avión gigante. —Pase lo que pase, nos mantendremos juntos.

...

Llegamos y escuchamos el sonido de disparos y explosiones, hay para demonios por doquier, con un asentimiento y con el plan ya trazado salgo volando junto a mi hermano.

Es hora de probar mi valía. Veo cono los gemelos tornados comienzan  dar vueltas a gran velocidad al rededor de la gran torre rodeada de de energía oscura, producto de la ecuación antivida. Dentro es la batalla. Desde aquí los escucho. Debemos crear un medio para entrar, así que Joni y yo hacemos lo mismo que los gemelos, solo que nosotros lanzamos rayos lásers

Poco a poco entre nuestros ataques y el de los rayos lanzado por los gemelos se habré una brecha lo suficientemente grande para que entre el trasbodardor.

Varios parademonios se interponen en mi camino y no dudo en atacarlos. El transbordador también pasa y rápidamente ubico a mi padre y Diana en el centro de la pelea. Luchando directamente contra el gran villano.

También observo a Cyborg, conectado con la fuente de energía oscura, tratando de desactivarla. —Superboy, ve a ayudar a Cyborg. —Escucho a Damien por los auriculares. —Gemelos traten de contener el avance de energía oscura.

—A la orden jefe. —Escucho a Don. —Un gusto tenerte de vuelta.

—Moonligh.

Sonrío activando un pequeño botón a mi traje, botón que incluyó Alfred para que el blanco brillante no llamase tanto la atención de noche. Mi traje se vuelve negro como el que usa mi padre. —Drakmoon, cariño. —Informo y lo escucho reír.

—Bueno, Darkmoom. —Sonríe. —Ve a patear traseros y trata de herir a ese desgraciado.

Mis labios se curvan en una media sonrisa y usando toda mi fuerza me lanzo al ataque aprovechando que sus manos están ocupadas con mi padre y Tía.

—¡A mi familia no la tocas! —Le atino un golpe en la quijada que consigue desetabilizarlo.

—Eso se pone interesante. —Lo escucho mascullar cuando me paro entre mi padre y tía que me miraran sorprendidos. —¿Esta es la supuesta esperanza de todos? —Le habla a mi papá. —Es algo pequeña.

—Esta pequeña te ha hecho escupir sangre. —Mascullo. —Y ahora te va a matar.

Voy a darle otro puñetazo cuando me soy detenida por su gigante mano y sujeta mi cabeza impidiéndome que le atine otro golpe. Aplica presión y siento como poco a poco el aire comienza a faltar

—¡Lara! —Escucho el grito de mi padre. —¡Dejala ir!

En los labios de DarkSeid parece una sonrisa, mientras que sus ojos se tiñen de un rojo brillante. —Pensé que me darías más batalla.

Antes de que el calor salga en forma de rayo de sus ojos, hago que salga también de los míos creando mi última barrera de protección.

Escucho los gritos de mi padre, siento fuertes contusiones contra el gigante, siento como poco a poco me quedo sin aire y mis rayos pierden fuerza.

Pero no voy a morir, me niego, escucho una voz, la de Damien, recuerdo la historia hecha por mi tía sobre como Ares casi lo mata con su hacha, y no se por que razón veo una imagen de la espada de Damien.

Mis manos pierden la fuerza y dejan de ejercer presión sobre la que sujeta mi cuello, las siento caer.

No voy a morir.

—¡Damien! —Grito y extiendo mi mano en su dirección, y como si me entendieran lanza su espada hacia mi.

Apenas y consigo encajarla en el hombro consiguiendo que una pequeña herida sea abierta.

—Un arma forjada con un metal de los dioses, no es digna de manos mortales. —Dice lanzándome al suelo. —Lo acabas de demostrar ahora. Debiste apuntar a la cabeza.

—Tranquilo. —La voz de Jen sonó segura en mi oído, ni siquiera sé donde se encuentra. —Que yo no fallaré.

Veo la flechar cruzar el campo a toda velocidad, es demasiado rápida hasta para mi. La flecha está iluminada, brilla con luz propia como si fuese una flecha de

—Artemisa. —Escucho murmurar a mi tía quien mira al cielo.

La flecha se encaja justamente en la herida provocada por mi.

Veo como la mirada de DarkSeid cae en la flecha en su hombro y luego mira hacia nosotros, mi madre aparece de entre los arboles portando un escudo junto  Jen, Damien y Bruce se hubican junto a mi y mi padre, Jon y Cyborg llegan junto a los gemelos tornados y Flash.

—Los dioses están aquí. —Masculla retrocediendo. —Están dentro de ustedes

—No me siento poseído por nadie. —Masculla Damien con su habitual sonrisa de superioridad. Los parademonios comienzan a caer. Y la mirada de DarkSeid va hacia mi. —La unidad, eres la misma unidad.

Pierde fuerzas y se arrodilla. Camino hasta él por instinto propio. —No, soy Lara Kent, Moonligth o bueno en este caso Darkmoon. — Recuerdo que mi padre estuviese muy herido para proteger a mi familia de Lex, pienso en todos los muertos que sus parademonios han provocado y ni siquiera lo considero más veces y corto su cabeza con la espada de mi novio. —Y soy tu final.

💙💙💙💙💙

Para justificar la mala batalla. Hace tiempo que no escribo una batalla. Así que lo siento si no es lo que esperaron y como deben imaginarse. Pos estamos despidendonos. Pronto subiré el epilogo y esperemos que estemos a la altura.

Con amor.

Hielo

Moonlight ➳ a Dc fanfic Donde viven las historias. Descúbrelo ahora