Love Alarm; Johnny Orlando.

°Capítulo 1°

"¿Por qué tu Love Alarm no sonó?"

—¡Lauren!— Nadia gritó mientras corría a abrazar a una rubia.

Detrás de ella, venía un chico castaño y las Love Alarm de la mayoría de estudiantes sonaba. Excepto dos, la de Ruby y la de Nadia.

—¡Dios!— La rubia habló y luego me miró.— ¡Tu Love Alarm no está sonando por mi hermano, que bueno!

—¿Tu hermano?—La miré confundida.— No importa, supongo.

Reí mientras la rubia saludaba a Ruby, después, me miró de nuevo.

—Soy Lara.— Me presente.

—Soy Lauren.— Sonrió.— Nadia me ha hablado mucho de ti.

Antes de que yo pudiera responder, la Love Alarm de Lauren sonó.

—¡Oh por Dios!— Lauren medio gritó y nos miró.

Nos giramos y ví a Hayden, nadie a excepción de Nadia, Ruby y yo le habla.

—¿Quién la habrá hecho sonar?— La rubia preguntó.

—Vengo en un momento.— Hablé y caminé hacia Hayden.

—Hola.— Lo saludé.

—Hola.— Me miró.— ¿Te diste cuenta que su app sonó por mi?

—Si.— Reí.— Tienes suerte de que ella no lo sepa.

—Ella no lo sabe, pero, su hermano si.

—¿Su hermano?— Hice una mueca de confusión.

—Si, antes de que te mudarás aquí, éramos amigos, después volvieron a Canadá, pero, Johnny se convirtió en mi mejor amigo.— Sacó su celular, entró a su galería y buscó una foto para mostrarme.— Mira, es él.

—Oh.— Suspiré cansada.— Es al chico que no le para de sonar su celular, que aburrido.— Confesé.

—Ya te dije, si tuvieras Love Alarm entenderías.— Me miró.

—Ay cállate.— Reí.— Tu Love Alarm suena mínimo dos veces al día y eres aburrido también.— Bromeé.

—¿Quieres qué te presente a Johnny?

Preguntó con una sonrisa pícara en su rostro.

—No, adiós.— Me levanté de la banca donde estábamos sentados.— Te veo después.

En cuánto me levanté mi celular sonó, era un mensaje de Nadia diciendo que ya se habían ido al salón.

Suspiré y comencé a caminar para llegar a la escalera, iba subiendo cuando un chico se me paró enfrente.

Unas chicas que iban bajando hicieron sonar su Love Alarm.

Decidí ni siquiera verlo a la cara, solamente lo rodeé y seguí mi camino.

Después de clases, estaba junto a Lauren, Nadia y Ruby, sentada en las escaleras que estaban afuera de la escuela.

—Creo que la persona que hizo sonar la app de Lauren fue Noah.— Nadia habló.

Yo hice una mueca, ¿Noah? ¡Dios! Creo que Noah sería la última persona en hacer sonar la app de Lauren, es decir, ella es adorable y linda, Noah no.

—Necesito hablar con tu amiga, Lauren.— El hermano de Lauren llegó.

—Ay, Nadia también es tu amiga, grosero.— Lauren lo miró mal.

—No con Nadia, yo le hubiera dicho que quería hablar con ella.— Rió.

—Ruby está chiquita, así que, cuidadito con lo que haces.— Nadia soltó.

—Tampoco quiero hablar con Ruby.

Eso quería decir que yo era la que hacía falta, bueno, en caso de que Lauren me considerara una amiga o inicio de eso.

—No.— Lauren me miró.— Deja a Lara en paz, ella es muy dulce para ti.

—Oh vamos, ella debería decidir si quiere hablar conmigo o no.— Me miró.

—Está bien, Laur.— Suspiré, las tres asintieron y se levantaron.

Cuando estaban algo lejos, el castaño se sentó a mi lado.

—¿Por qué?— Me miró.

—¿Por qué, qué?— Estaba confundida.

—A excepción de ellas, todas las chicas de la escuela han hecho sonar mi Love Alarm, pero, tú no.— Seguía mirándome.

Sabía que no podía decir "Oh, es porque no tengo la app", sería más arrogante de lo que ya es.

—Es porque no me interesas.— Solté de repente.— Es decir, no tienes nada increíble, eres un chico más en la escuela.

—¿Tengo que impresionarte para que mi app suene contigo?— Me miró levantando una ceja.

—Nop.— Me levanté.— Mira, hermano de Lauren.— Reí.— No trates de hacer sonar tu Love Alarm conmigo, porque eso nunca pasará.

—Me llamó Johnny.— Se presentó tratando de calmar la tensión que él sentía.— Y, no digas nunca, no sabes que es lo que pueda pasar.

—Como digas.— Comencé a caminar ignorando su presencia.— Hermano de Lauren.— Agregué.

—¡Me llamo Johnny!— Se quejó de nuevo haciendo que yo riera.