°Capítulo 5°

282 20 28
                                    

“Le gusto a la persona que me gusta. Es como un milagro”.

—Mi Love Alarm está apagada.

Ok Lara, no debes entrar en crisis, no va a sonar... Relájate.

Mi cerebro no estaba ayudando en nada mientras Johnny encendía su alarma.

Suspiré mientras se encendía, era raro.

Miraba mi teléfono y Johnny miraba el suyo esperando que alguna alarma sonará... Y pasó.

Él giró su celular para que yo lo viera mientras sonreía... Había hecho sonar la Love Alarm de Johnny.

—¿Sonó la tuya?— Me miró con una sonrisa en su rostro.

Iba a responder y Dylan entró corriendo al salón.

—Necesito hablar contigo, Lara.

—Perdón Johnny.— Tomé mi mochila y corrí hacia Dylan, para después salir del salón.

—Lara, ¿Qué estaba pasando ahí adentro?— Dylan preguntó mientras caminábamos por el pasillo.

—Hice sonar su Love Alarm.— Suspiré y sonreí.

—¿Te gusta Johnny?— Dylan me miró y asentí.— ¿Y él hizo sonar la tuya?

—¿Qué querías decirme?— Cambié el tema de conversación.

—Noak y yo sonamos nuestras alarmas, tendremos una cita está noche y necesito que me ayudes a salir sin que mis papás sepan.— Mi hermana estaba convencida.

—Te voy a ayudar, pero, necesitamos que Nadia y Ruby nos ayuden también.— La miré.— Vamos a decirle a nuestros papás que tenemos un trabajo en equipo con Nadia y que pensamos hacer una pijamada.

En ese momento, nuestras mejores amigas iban pasando.

—¡Chicas, vengan!— Dylan la llamó, a lo que ellas llegaron.

—¿Qué pasa, chicas?— Nos miró Nadia.

—Necesito que me ayuden.— Dylan suplicó y les contó lo que me dijo.

—¿Y qué tenemos que hacer?— Ruby preguntó curiosa.

—Mira, lo que tenemos que hacer es decir que tenemos un trabajo en equipo y que nos invitaste a quedarnos en tu casa.— Miré a Nadia quién asentía.— Obvio tienes que hacerlo porque no podemos llegar en la noche a nuestra casa.

—Cuenten con eso, par.— Nadia nos miró.— Las esperamos en casa en la tarde.

Dylan y yo nos sonreímos y asentimos mientras Ruby daba saltitos de alegría.

°•°

—Entonces, eso vamos a hacer.

Hablé mientras Nadia maquillaba a Dylan.

—¿Me vas a acompañar a mi cita?

—¡No!— Reí.— Solamente voy a acompañarte a dónde te quedaste de ver con él, después me regreso, además, necesito comprar algunas cosas.— Sonreí.

Love Alarm; Johnny Orlando.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora