Mi Dueño El Ruso

sensación amarga

Nicolette

los rayos del sol se posan en mi rostro haciendo que despierte , lo primero que veo es Adrik durmiendo placidamente a mi lado, me levanto despacio para no ir a despertarlo, decido bajar como de costumbre y revisar el correo , se ha convertido en un pasatiempo ultimamente aunque no suelo abrirlas , solo separar las cartas dependiendo el asunto, obviamente la mayoría son para Adrik pero me sorprendió ver mi nombre en una de ellas, decido guardarla para después mientras termino de organizar el resto de ellas. 

- ¿Qué tienes ahí? -la voz ronca de Adrik me saca de mis pensamientos con un enorme susto - aún sigo sin entender por qué te encanta organizarlas , a veces ni las leo

- Deberías empezar a hacerlo , nunca sabes que sorpresa te puedes llevar - digo alzando mis hombros con una mueca de burla - además es entretenido que más puedo decirte.

Una llamada del telefono de Adrik interrumpe nuestra conversación, lo ultimo que veo es como se aleja hasta desaparecer por la puerta , aprovecho la oportunidad para leer aquella carta misteriosa.

Querida Nicolette

No me conoces pero yo a ti sí , te he observado desde hace mucho y aún logró comprenderte , se que has pasado por mucho desde muy niña , conocí a tu madre , era una mujer un poco incomprendida y fuera de sus cabales pero al fin y al cabo era tu madre, no entiendo como le haces para vivir bajo el mismo techo del asesino de tu madre, lamento mucho tu perdida , quería desearte mis condolencias, espero te encuentres bien.

......

la carta en mis manos no deja de temblar , lagrimas brotan de mis ojos , siento como la pesadez en mi pecho aumenta y mi respiración se dificulta , pierdo la fuerza en mis piernas y caigo al piso y suelto un grito, uno que hace que mi garganta arda,  observo como Adrik se dirige hacía mi con cara de preocupacion , intenta sostenerme en sus brazos pero lo aparto bruscamente, mientras noto la confusió en su mirada.

- ¿Qué ocurre? por favor... dime - su voz se quiebra un poco - por qué me apartas - no pude decir nada , solo entregarle esa carta para que el mismo la leyera

- Dime , es cierto eso - su cuerpo se tensa ante mi pregunta, sigue leyendo la carta sin hablarme - dime Adrik, es cierto... es cierto lo que dice esa maldita carta - él sigue sin responder...

-¨¡¡¡MIERDA ADRIK , POR UNA VEZ EN TU MISERABLE VIDA , DIME QUE NO ES CIERTO , DIMELO!!! - siento como todo se nubla a mi alrededor, lo unico que deseo es escuchar de su boca que todo es falso , que mi madre no esta muerta.

- lo siento... pero no puedo mentirte, tu madre esta.... muerta - mi pecho arde, no puedo hablar , solo quiero desaparecer , mi madre no puede estar muerta...

- ¿como pudiste? ¿por qué lo hiciste?.... no te bastó con tenerme  que la tuviste que matar  - mi voz se quiebra - se que fue una mierda de madre pero era mi madre Adrik , mi madre

- mira lo siento ¿si? lo siento en verdad , pero tu madre no te quería, ¿no te das cuenta?, ella solo decia cosas horribles de ti , te veía como algo negociable , sin ningun remordimiento por provocarte tanto sufrimiento como lo hizo, odiame todo lo que quieras , lo voy a entender - toma un respiro antes de continuar , yo simplemente dejo de pelear y escucho lo que tiene para decir - asesiné a tu madre , porque era un monstruo contigo , porque no podia soportar verla y pensar en todas esas cosas horribles que te hizo durante toda tu vida , tenía que deshacerme de ella, quitarla de tu vida para siempre

no pude decir nada más , las palabras de Adrik habían abierto una herida del pasado , recorde las veces en que mi madre me abofeteaba porque me parecía a mi padre , cuando llegaba borracha con hombres distintos , las veces que tuve que salir a rebuscarme el dinero para comer e incluso cuando abandoné la escuela , ella nunca habia estado para mí , siempre decía que yo era el problema en la vida de ella , la responsable de que mi padre nos abandonara

solo eres un maldito estorbo , muerete ya

no te quiero no lo ves?

mirate , eres igual a él , miserable

de ti depende si quieres comer , no me interesas

debí abortarte cuando tuve la oportunidad

mis lagrimas cesaron pero la tristeza seguía ahí , ¿por qué lloraba por alguien a quién le daba igual tenerme o no? , esa mujer quien consideraba mi madre estaba muerta, pero al recordar todo eso que me hizo , solo me llené de rabia y la tristeza fue desapareciendo.

-necesito estar sola , no quiero que nadie me interrumpa , ni tú , puede que mereciera morir pero no debiste hacerlo , esto...es algo que no podré perdonarte jamás...- le lanzo una mirada de tristeza antes de retirarme y salir corriendo hasta el bosque...