Amor Honor y Venganza

Capítulo 27

Al llegar Gulf a la escalera, vio que Kao y Perth, en compañía de Leo, subían a Mew por la escalera. Un nudo de angustia invadió su garganta al verlo, parecía inconsciente, con la ropa manchada de sangre, la cara golpeada y la boca partida.

—¡Mew! —grito.

—Déjanos pasar, Gulf —ordenó Leo y por primera vez el omega acató una orden suya sin chistar.

El corazón golpeó fuerte contra el pecho de Gulf, le dolió de angustia cuando pasaron por su lado, pero que ni pensaran que lo dejarían afuera: Mew era suyo, para cuidarlo y amarlo a pesar de los dolores de cabeza que le causara.

Se encaminó delante de ellos hasta la habitación, aunque quería llorar necesitaba mantenerse fuerte, no podía mostrar su miedo y vulnerabilidad, lo dejarían fuera enseguida.

Abrió la puerta de la habitación, y ellos entraron. Enseguida el omega fue y deshizo la cama. 

Leo empezó a quitarle la ropa a Mew.

—Él está...

—Está vivo, pero su pulso es débil. ¡Dónde está el maldito doctor! — refunfuñó Leo hacia uno de los hombres.

—Llevémoslo a un hospital.

El omega traía un par de toallas humedecidas del baño.

—¿Y qué mierdas le vamos a decir, que los hermanos del ex de su novio llegaron a casa a matarlo? Joder, Gulf.

El omega se envaro enseguida.

—No quiero que se muera.

—No ocurrirá, hemos pasado cosas peores. ¿Champ dónde está? —Gulf miro al alfa en la cama, tenía golpes por todo su pecho y un impacto de bala en el estómago—. Presiona aquí, fuerte, Gulf, tenemos que detener la hemorragia en lo que llega el médico.

El omega presiono la herida con una de las toallas húmedas. En el momento en que llegó, el Doctor lo observó de arriba abajo. Lo había visto las veces que vino a la mansión después de la herida con la que Mew había llegado el día que se reunió con Yang Yang , el día que el alfa murió.

Champ dio la orden a todos de salir de la habitación. Gulf paseo por el pasillo, no supo por cuánto tiempo, hasta que vio salir al doctor, inmediatamente se acercó a él preguntándole por el estado de Mew. Trago la obstrucción en su garganta mientras el doctor le hacía un inventario de las heridas y le daba una serie de recomendaciones, el omega vio a Leo dar órdenes a uno de los hombres para quedarse en la entrada de la habitación antes de internarse en ella, Gulf estaba casi seguro de que le había dado órdenes estrictas para que no lo molestaran.

Para que Gulf no lo molestara, sin embargo, necesitaba saber cómo estaba, así que se acercó a Kao una vez salió de la alcoba, pero tratar de sacarle información fue tan difícil como hacer hablar a un muerto.

La cabeza de Gulf y sus sentimientos eran un caos como el que observaba en la mansión: los hombres de Mew se movían rápidamente sacando cadáveres, limpiando la parte destruida.

Se sentó en uno de los escalones de la escalera sintiendo como su pecho se oprimía por todo lo sucedido segundos atrás, una especie de zumbido le golpeó al recordar la primera detonación, el miedo lo inundó completo.

Había estado y seguía estando tan enojado por la mentira de Mew, por todo lo que le ocultaba, si bien le creía que Yang Yang no había muerto por su mano, él sabía lo demás, sabía que Qiu y Hao Mei eran unos traidores, si le hubiese contado todo a lo mejor Qiu no hubiese estado a punto de convencerlo de irse con él.