Imagina 48

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El horno sonó indicando que el pan para el pastel estaba listo, me levanté rápidamente, tomé los guantes y saqué el pan, el glaseado ya estaba listo por lo que lo coloqué en la mesita y comencé con mi parte favorita: la decoración.

Quería que fuera un pastel minimalista,  a Tom le gustaban las cosas sencillas, entonces lo hice de color azul pastel con unas letras en cursiva que decían "Happy birthday Tom" quedé satisfecha con el resultado, pues no solo era mi esfuerzo en hacerlo, si no también lo había hecho con todo mi corazón, pues aunque Tom no lo sabía, yo me había enamorado de el. Quería que su cumpleaños fuera especial, y no quería comprarle un regalo, sino, darle algo hecho por mi que es más especial ¿no?

Estaba nerviosa, me miraba al espejo un poco insegura ¿realmente me veo Bonita? Mi madre miraba desde el marco de la puerta, me di cuenta y con una sonrisa volteé a mirarla

—Te ves hermosa con ese vestido —habló mi madre acercándose a mi.

Eso fue un punto para que mi inseguridad se esfumara

—Ay mamá no estoy segura —dije soltando un suspiro.

—Sabes que eres hermosa, además tienes un gran corazón lo que te hace un más hermosa —dijo con una sonrisa y acariciando mi mejilla.

—Gracias mamá —sonreí y la abracé.

Ella correspondió al abrazo, pude sentir su sonrisa, me sentía muy feliz de tener una madre que me apoyara en todo, y también en el hecho de poderle declarar mis sentimientos a Tom.

El timbre sonó interrumpiendo el abrazo

—Debe ser Danny, me tengo que ir mamá

—Que te diviertas, y no estés nerviosa, va a pasar lo que tenga que pasar sin importar que, tu entrega tu corazón en ese momento, y me cuentas que pasó ¿okay?

Mi madre siempre me estaba preparando mentalmente para un posible rechazo o si el también correspondía a mis sentimientos, me sentía lista pero al mismo tiempo nerviosa ¿era muy prudente decirle mis sentimientos el día de su cumpleaños?

—Okay mamá —sonreí.

Dicho esto bajé las escaleras para encontrarme con mi mejor amiga, ella me sonrió y yo también, anunciando que estábamos listas para lo que venía, o eso pensaba yo.

Al llegar había muchas personas en el patio, decidí poner el pastel en el refrigerador para después llegar de sorpresa con Tom. Finalmente lo vi, platicando cómodamente con Harrison y sus hermanos, mi corazón comenzó a latir como loco

—Ve —dijo mi amiga dándome un codazo.

—Si, si ya voy —respondí nerviosa.

Me acerqué a Tom, el muy contento me saludó, cuando llegó el momento de darle su abrazo de cumpleaños sentí como mi corazón quería salirse de mi pecho.

—Feliz cumpleaños  Tom—hablé en el abrazo.

—Gracias _____ —el sonrió.

Otros amigos de el llegaron para felicitarlo, poco a poco me alejé de él, aún seguía nerviosa. Llegué a donde estaba Danny

—¿Como te fue? —preguntó curiosa.

—Bien —sonreí como tonta. —Tom huele súper rico

Danny comenzó a reír levemente

—¿Por que no le llevas el pastel de una vez?

—Por que....

—Anda, traelo y yo te acompaño

Yo asentí convencida con una sonrisa, fui al refrigerador y busqué el pastel pero no estaba, el miedo me invadía ¿por qué fui tan tonta y lo dejé aquí? ¿Y si alguien ya se lo comió? Nonono, comencé a sentirme aún más nerviosa.

Rápidamente fui con Danny y le conté lo que había pasado

—No está —susurré con miedo.

—¿Como que no está? —preguntó un poco alterada.

En cuanto preguntó eso, todos se acercaban a Tom mientras una chica sostenía un pastel y una vela prendida le cantaban a Tom

—¿Pero que carajos? ¡ESE ES MI PASTEL! —Solté con rabia.

Danny también se molestó mucho, la chica que lo sostenía era la odiosa y fresa de Edith, la muy descarada se veía muy sonriente entregándole el pastel a Tom.

—Wow que lindo pastel Edith —dijo emocionado Tom.

—Gracias Tom, yo misma lo preparé —sonrió ampliamente.

Maldita hipócrita mentirosa, pensé, fruncí el ceño enojada, me acerqué a ellos y caraspee mi garganta

—Oye Edith, que lindo de tu parte pero ese pastel yo lo hice especialmente para Tom —solté enojada parándome frente a ella.

Tom me miró confundido.

—¿De que hablas ridícula? —respondió molesta barriendome con la mirada.

—De que yo hice ese pastel con mis manos, no tu, no es de buena educación dar regalos que ni siquiera soy tuyos, que descarada.

Tom nos miraba aún más confundido

—Comprueba que tu lo hiciste —dijo Danny.

Ella quedó balbuceando

—Pues lo hice de chocolate y no le puse decoración por que a el no le gusta

Yo comencé a reír

—El pastel es de vainilla, Tom es alérgico al chocolate

La chica balbuceo, le entregó el pastel a Tom y salió de ahí, humillada quedó.

La bolita se separó, cada quien se fue a seguir con la fiesta, mientras que yo me acerqué a Tom muy apenada.

—Lo siento Tom —me disculpé triste. —Este no era mi plan para entregarte este pastel que yo misma hice

—No te preocupes, yo lamento el comportamiento de Edith, ¿cómo se atrevió a hacer eso? —el suspiró. —Te agradezco bastante que hayas hecho esto por mi, lo aprecio bastante y además se ve delicioso —dijo con una sonrisa.

Me sentí en otro mundo, sus palabras me hicieron sentir muy bonito, no pude evitar sonreír. Después de eso me separé, no quería que viera mis mejillas rojas y que mi nerviosismo se hiciera notar.
 
Danny había ido al baño y me había dejado sola en el balcón, tenía una vista hermosa al gran y verde jardín, las luces lo iluminaban de una manera tan bella que hacía juego con la luz de la noche. Sentí una presencia, no quise voltear por que sabía de quién se trataba.

—Linda vista ¿no? —preguntó una voz que no era de Daniela.

Al escuchar su voz volteé confundida, pero cuando lo vi mi corazón volvió a latir como un loco.

—Sí —respondí nerviosa.

—Quiero agradecerte de nuevo por el pastel —sonrió. —Estaba muy delicioso, y el azul me encantó

—Me alegro que te gustara —sonreí.

Y fue cuando pasó, sin querer, tocó mi mano, yo me sonrojé y miré nuestras manos unidas, el también las miró pero ninguno de las dos las quitó. Tom la tomó con más fuerza, se acercó y como si fuera en cámara lenta me besó.

Sentí sus labios chocar con los míos, sentía una fiesta en mi estómago, mi corazón como loco, me había sorprendido pero correspondí el beso con mucha felicidad y emoción

—Me gustas ____ —soltó al separarnos.

Yo no respondí, mi cabeza me daba vueltas con muchos sentimientos, sentía que esto era un sueño pero no, era realidad.

—Gracias por darme un hermoso cumpleaños —sonrió y se dio media vuelta dispuesto a irse.

Salí de mis pensamientos, reaccioné y lo tomé de la mano antes que se fuera

—Espera Tom, Tu también me gustas

El volteó, yo tomé valor y lo besé, el de nuevo correspondió mi beso, nuestros labios se movían en sincronía, al separarnos ambos nos vimos al ojos y nos sonreímos sin soltar nuestras manos. Al llegar a casa le contaría ansiosa a mi madre que ahora, Tom correspondía a mis sentimientos.

Imaginas De Tom Holland✨💙Donde viven las historias. Descúbrelo ahora