29

2.7K 149 19
                                    

A R I E L  A R É C H I G A

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

A R I E L A R É C H I G A

-Todo estará bien cuñada, mi hermano es fuerte.-Iván habló mientras que yo sollozaba por su hombro, habían pasado algunas horas desde aquel atentado o enfrentamiento con la DEA y mis nervios estaban de punta. No podía creer que podía perder a mi Ovidio, el que me hacía sentir mujer, el papá de mis hijos, el que me consentía en todo lo que podía y me protegía a capa y espada de todo lo que me pudiera tocar. En cambio, Salma, la que le había disparado a mi novio, estaba siendo buscada por mar y tierra, yo por primera vez en la vida sentía la enorme necesidad de matar, de ver cómo corriera la sangre por su cuerpo, de que pagara por el daño que le estaba haciendo a mi pequeña familia, que pagara por tener el papá d ella hijos en esa camilla. Griselda estaba llorando por el hombro de su novio, no había dejado de llorar desde que habíamos visto como en aquel frío corredores se llevaban a mi novio, hermano, mejor amigo, papá, y sobrino.

Y estaba en todo su derecho de llorar, habia rechazado a mi novio por años, por años haciendo que el volviera a la misma solución, a aquella que le hacía mal y que en una día como este, le podía cambiar la vida. Habían sido muchos años de ingerir todo tipo de drogas, y su síntoma ya no era el mismo, algo que solo Sebastian y yo sabíamos.

Acaricié con mucho cuidado mi vientre, tenía que ser fuerte por mis dos bebes, pero Ovidio, ellos necesitan un papá, ellos necesitan a Ovidio y yo más. Habían sido tantos meses de acostumbrarme a el, a sus besos, sus apodos, sus bromas, sus caricias, sus caprichos. Cómo le hacía si tenía toda una vida planeada a su lado. Iván acaricio mi mejilla y me abrazo de nuevo, aunque lo negaran, a los hermanos Guzmán estaba destruidos, no sabíamos que hacer pero ya habían cerrado el hospital. Iván y Alfredo se estaban haciendo los fuertes, pero sabíamos que les dolía en el alma ver como su hermano se perdía en aquel corredor, sin más diciendo "si no me lo salvas, te mueres junto con toda tu familia"

Mis ojos estaban hinchados, había llorado toda la noche anterior recordado como mi papá había sido, toda la gente que lo quería, como era el. Haciendo que mi perdida fuera aún más dolorosa, su gente ahora estaba bajo mi mando por ser la mayor, a el igual que el cartel de Ovidio quedaba bajo mi mando, por ahora ser reconocida por mucha gente como la señora de Guzmán. Pero en mi mente se ponían miles de imágenes, con mi papá o Ovidio, solo quería que el estuviera bien y que todo esto fuera una pesadilla. Quería despertar de este sueño y mirar como Ovidio descansaba a mi lado, mientras que acariciaba mi vientre y me decía lo mucho que me amaba, dándome besos por todas partes.

-Buenos días.-Ovidio habló mientras que besaba mi cara y cuello, con sus manos sobre mi vientre donde estaban los bebés. De solo pensar en que me abrirán o en los dolores que sentiré, me da mucho miedo. Pero por esas cositas hermosas, soy capaz de todo.-¿Como amaneció la mejor mamá de el mundo?

Cicatrices | Ovidio Guzmán | TERMINADA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora