✨SOULMATE✨ [Katsuki Y Izuku]

4. Hospital

El rubio se sentó en el escritorio y tecleo rápidamente el apellido.

—Blasty ¿Que haces?—Se hacerco su amigo a ver qué hacía—¿De quien es ese apellido?

—De mi soulmate.

—Ouu.

—Lo dijo casualmente, buscaré algo relacionado.

Doctora Midoriya Inko

No había mucha información que le fuera útil, solo aparecía los lugares donde ella había trabajado, de donde se graduó, donde trabajaba actualmente y que era una madre soltera.

—Nada útil, no aparece el nombre se su hijo—Murmuro.

Vio mejor el nombre del hospital.

—Broo, ¿En ese lugar no es donde está Mirai?

—Si...—Murmuro.

—Listo, ya tienes una razón para entrar, tu pequeña hermana, hablando de ella ¿Cómo se encuentra?—pregunto con una sonrisa, esa niña de no más de 8 años era bastante linda y agradable.

—No hay mejoría, sigue igual—Murmuro algo molestó.

—Ya veo—Dijo un Kirishima decepcionado—Entonces ¡Vallamos a animarla!

Despues de hablar un rato, Bakugou se despidió y se fue a su cuarto, eran probablemente las 10 PM y aún no podía consiliar el sueño, la voz de su soulmate no era lo que lo fastidiaba, está vez lo fastidiaban sus propios pensamientos.

—Hey, si hay alguien ahí, buenas noches, espero que tengas lindos sueños

Bakugou sonrio, y por algún motivo, esas palabras, lo ayudaron a quedarse dormido.

A la mañana siguiente todo fue como una rutina, su mente no estaba allí, y su cuerpo se movía por mera inercia.

Las clases pasaron volando, y así llegó el momento de ir al hospital.

Y Katsuki no quería hacerlo.

—Vamos Blasty—Le dijo Kirishima que estaba emocionado por ver denuevo a Mirai.

El rubio suspiró y siguió a su amigo, tomaron un taxi y fue cuestión de minutos cuando ya se encontraban frente al hospital.

Camino hasta recepción siendo seguido por Kirishima.

—¿Puedo ayudarles en algo?—Pregunto la mujer sonriente.

—Si, venimos a visitar a un paciente—Dijo Bakugou.

—Claro, ¿Nombre?—Pregunton la mujer tecleando su computadora.

—Bakugou Mirai—La mujer tecleo el nombre.

—Lo siento, de no ser tutores de la niña, no puedo permitirles el paso, a no ser que traigan con ustedes uno de los tutores de ella—Dijo la mujer sonriendo comprensiva.

—Soy su hermano mayor, Bakugou Katsuki, uno de sus tutores—La mujer miro denuevo la pantalla, pidió la identificación y al confirmar la veracidad de sus palabras los dejaron pasar.

—Pense que te conocerían—Dijo Kirishima.

—No vengo a visitarla muy seguido

Caminaron en silencio unos momentos, subieron por un ascensor y volvieron a caminar, hasta que llegaron a una zona VIP, tocaron la puerta y está no tardó en ser abierta por una enfermera.

—Bakugou-Kun ¡Hola!—Dijo muy emocionada una castaña.

—Hola cara redonda—Paso como si nada, Kirishima lo siguió de cerca.

—Que cruel.

En una cama de hospital bastante más gruesa se encontraba su hermana menor, estaba dormida y cubierta con una sábana hasta su pecho.

—Hace realmente poco se durmió, estábamos estudiando un poco de matemáticas y le dio sueño, perdona Bakugou-kun, no acabamos la lección de hoy.

La mujer conocía a la perfección al hombre que la había contratado, le gritaria y la llamaría inútil ¿Por qué no dejaba el trabajo? Fácil, la paga era buenísima.

—Esta bien, si estaba cansada, no hay mucho que pudiéramos hacer—Acaricio con cariño el cabello rubio de su hermana, el de el era ceniza, el de su madre también, y su hermana no era la ecepcion, la única diferencia es que ella no lo tenía en punta.

Bakugou se veía tan en paz al ver la cara adormilada de su hermana.

¿Hace cuanto no la veía? Creía que desde diciembre, y actualmente se encontraban en abril, solía llamarla, por lo menos 1 vez a la semana.

¿Por qué no venía más seguido a verla? Sus pensamientos solían carcomerle, ver a su hermana tan débil lo ponía de mal humor, pero no de ira, si no de tristeza, el es un héroe, el salva personas diariamente, ¿Por qué no podía salvar a su hermana? A, cierto, el villano que la tenía así, era el propio corazón de la niña.