Según Reebekah, su hermana Freya, si la misma que Dahlia se llevó, había vuelto, estaba viva y era la que estaba con ella cuando la encontré. Aunque habían algunas cosas que no concordaban, como, ¿Cómo rayos seguía viva después de mil años? Parece que se le pasó ese pequeño detalle…
Como siempre al llegar me dejaron de lado, haciéndome subir a mi habitación para ellos hablar de lo sucedido en el al parecer manicomio, al final me quede dormida esperando que alguien me dijera algo de su conversación…
—Hey perezosa, ya levántate—escuché que alguien decía a los lejos sacándome de los brazos de Morfeo, para luego sentir que me sacudían—. Al aparecer llevas muy literal lo de dormir como una roca…—se burló haciéndome abrir los ojos encontrándome con la persona que menos creí que vendría a despertarte.
— ¿Hiciste una apuesta y perdiste? —le pregunté a Reebekah y ella rió.
—Estoy aquí por voluntad propia…—soltó sonriendo negando por lo que le vi extrañada.
— ¿Te golpeaste la cabeza acaso?, ¿o de verdad estás loca? —solté mirándole algo asustada, jamás hay que confiarse que alguien que te odie te trate bien.
—Ninguna, anda ya levántate, le prometí a Elijah que me encargaría de ti hasta que vuelva…—soltó ella seriamente levantándose de mi cama, y al fin entendía la razón de porque estaba aquí.
—ya sabía yo que algún gato encerrado había…—solté riendo mientras me levantaba e iba a darme una ducha.
Al salir del baño en toalla aun se encontraba ella, pero esta vez con un sándwich a medio comer en una mano, uno entero en su regazo, y vaso de jugo en la otra mano.
—Este es tu desayuno, no está mal para nunca haber hecho algo por mi misma…—soltó terminándose el que tenía en las manos y dármelo.
—Nada mal, pero Elijah lo hace mejor…—solté terminándome el emparedado y el juego, para luego vestirme.
—O sí, me contó del súper desayuno que te hizo, quiso que te hiciera algo igual, pero solo en su imaginación sucedería…—soltó riendo por lo que le miré extrañada, y algo asustada de que Nik estuviera escuchando la conversación—. Nik no está si es lo que te preocupa…, jamás te diría esto si estuviera…—dijo encogiéndose de hombros.
— ¿Y dónde está? —pregunté poniéndome mis botas, al terminar de vestirme.
—Con Kol, a un supuesto encuentro con Finn…—soltó ella despreocupadamente—, iba a ir, pero le prometí a Elijah que te cuidaría como ya dije…
—Así que te dejaron de niñera de una embarazada—solté burlonamente por lo que miró algo molesta.
—No sé lo que traes ahora con Elijah, pero me hizo prometérselo aunque ya comienzo a arrepentirme…—soltó ella saliendo de mi habitación y yo seguirle—. ¿Qué quieres?
—Ponerme al tanto de lo que sucede…—solté sinceramente haciendo que girara hacia mí.
—Kol está muriendo gracias Finn que lo maldijo, al principio no le creímos pero dice la verdad. Finn está detrás de la verdad de nuestro secreto es decir de Hope, por lo que estamos tratando de que no lo sepa…—terminó de decir rápidamente por lo que asentí—. ¿Alguna otra cosa para que me dejes en paz?
— ¿Qué sentiste cuando tocaste mi abdomen? —le pregunté sonriendo algo emocionada y ella negar sonriendo también.
—No estoy segura aun, pero es algo bueno no te preocupes…—soltó ella sonriendo, antes de sonara un ringtone, y sacara su celular—. ¿Qué sucede? —Preguntó preocupada al otro lado de la línea—. Sí, está aquí…. ¿Cómo que lo sabe?, de acuerdo, iré para allá.
