☞13.☞Canciones de este capítulo:
. I want you boy de Lana del rey
. Happiness is a butterfly de Lana del Rey
. In my time of dying de Led Zeppelin
·Groupie love de Lana del Rey
·Special de LP
·Breathe de Pink Floyd
·Afraid de Lana del ReyGracias por las 3k, estoy sorprendida por todo el apoyo.
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☞[Reproduce I want you boy de Lana del rey]
Jade se abrazó a la almohada. Alguien había tirado de su cobija. Otra vez. Eso le hizo extrañarse, Mick se metía a la cama sin avisar; al ver quien era se llevó una sorpresa. Era Nicholas y tenía la cara roja, y estaba llorando.
—Oh, no, ¿qué pasó, cariño? —apartó la cobija, sentandolo en la cama antes de encender la luz.
—Es que, es que me caí. —la abrazó tan pronto como pudo. Jade le acarició el cabello, abrazándolo.
—Ya, ya pasó. —besó su frente, antes de hacerlo separarse para así poder limpiarle la cara —. ¿Dónde te pegaste?
El niño señaló su frente, le dolía. Después de tallarse los ojos, Jade pudo ver que pasaba. Tenía algo hinchado, además de un pequeño raspón. No tenía ni idea de la hora que era, pero asumió que era tarde. Se levantó con el pequeño en brazos, yendo al baño para así limpiar con agua ese pequeño raspón.
—Vamos a buscar a tu mamá. —le tomó mejor de la mano, para poder llevarlo a pie. No tenía fuerzas para cargarlo en ese momento.
Nicholas se dejó guiar. En el sofá estaba Marianne junto a Mick, picandose la vena del brazo con una jeringuilla. Rápidamente cargó a Nicholas, llevándolo a dormir con ella. No iba a dejar que viera eso, no mientras pudiera.
—Espérame aquí, cariño, no tardo. -lo arropó en las cobijas, antes de salir de la habitación.
Iba a encarar a Marianne, ¿cómo era posible que hicieran eso con un niño en casa? Mínimo debieron asegurarse de que estaba dormido. Al llegar a la estancia los vio besarse, y aunque por un momento pensó en retroceder, se dio fuerza a sí misma. No iba a callarse, no iba a dejar que un niño como Nicholas viera y creciera como ella lo hizo.
—Al menos podrían asegurarse de que Nicholas está dormido. -estaba cruzada de brazos, molesta.
—Ya lo está. —Mick le sonrió, tendiendole una mano para que se uniera a ellos. Jade se acercó, pero soltando una palmada en su mano.
—¿Oíste? ¡Nicholas casi te ve, carajo! —hasta ella sentía más vergüenza por sus adicciones, era algo que difícilmente podía esconder.
—Pero no lo hizo, y ya relajate, tu te metes lo mismo por la nariz. —siseó Marianne, sonriendo, Jade resopló.
—Al menos no tengo hijos a lo idiota sabiendo que no los voy a cuidar. —refutó antes de recibir una bofetada, aunque en la oscuridad no sabía de quién vino eso.
—Jade, vete a dormir, mañana tienes escuela, ya, adiós. —Mick se puso de pie, tomándola del brazo para llevarla a su habitación.
Aunque tenía ganas de responder a eso, no era momento. Simplemente se soltó de su agarre, yendo a meterse a la cama. Abrazó a Nicholas, que ya estaba más que dormido.
—Ojalá no tengas que ver lo que yo. —susurró, besándole la frente.
Se quedaron dormidos ahí. Jade sabía que Mick y Marianne seguramente se pasaron toda la noche despiertos, y fue evidente al asomarse a la sala de estar, viéndolos dormir en el sofá, con la ropa incluso algo desaliñada. Simplemente suspiró y buscó preparar algo pronto para Nicholas, él tenía que ir al preescolar y su madre evidentemente no iba a llevarlo.

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Memorias de una groupie.
أدب الهواةJade Byrne es, aunque para su nieta no parezca, una de esas groupies de las que jamás supimos nombre, de las que no quedaron en la gloria y de las que no se orgullecen de su pasado en los 60's y 70's. Pero después de tantos años, es hora de sacar se...