16.

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☞16.

☞Canciones de este capítulo.

·Trátame suavemente de Soda Stereo.
·Tusk de Fleetwood Mac.
·Season of the Witch de Donovan
·Broken Bells de Greta Van Fleet
·Heart full of soul de The Yardbirds
·Black Magic Woman de Santana
·Move Over de Janis Joplin

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☞[Reproduce Tratame suavemente de Soda Stereo]

—¿Aquí vives? —le dijo Az, un tanto impresionado al ver tremendo edificio.

—Es mi última noche aquí, vamos a mudarnos. —le dijo mientras abría la puerta que al menos a esa hora no tenía que atravesar un montón de fanáticas —. Pasa.

Entraron mientras reían emocionados. A lo que conversaron de camino a Harley House, Az sabía algo básico en cuanto a temas de ocultismo, y con aquellos libros le dijo que iría bien encaminada.

Sorprendente no había nadie en el apartamento, por lo que estarían tranquilos un rato. Jade sabía que Mick podía ser posesivo, demasiado, no podía verla mirar aunque sea a un tipo cualquiera porque ya le tiraba del cabello o buscaba lastimarla de cualquier manera para darle una "lección".

—No me creo que estoy en casa de Mick Jagger. —le dijo Az, mientras se sentaba en la cama de Jade —. Igual admito que es mucho más bonita de lo que imaginaba.

—Ay, cariño, que con el tiempo vas a estar de visita, te lo aseguro. —sonrió ella, dejando esos libros en la cama también. Realmente le agradaba y sentía que serían grandes amigos.

—Ya imagino que sí. —se levantó, acercándose a ver los discos que tenía.

—¿Juegas cartas? —le dijo Jade, mientras buscaba un encendedor, con el cigarrillo en los labios.

—Sí, toma. —le dijo él, tendiéndole una cajetilla de fósforos, viéndola encender su cigarrillo.

Pasaron un largo rato jugando, y aunque comenzaron con cartas tranquilamente, acabaron pasando a damas chinas y luego al ajedrez. Az le estaba enseñando a Jade, los movimientos básicos, las reglas, hasta que un par de toques en la puerta los interrumpió.

—Gatita, ¿qué hace...?, ¿quién es él?— Mick se detuvo al ver a aquel joven ahí en su casa a solas con su Jade, ella ya sabía que en su mente ya se imaginaba que habían hecho de todo.

—Mick, cariño. —se levantó de la cama, yendo a besarle las mejillas—. Él es un amigo, Az, y bueno, Az, seguramente tú ya conoces a Mick. —rió un tanto nerviosa, hacía no mucho le había dado tremenda golpiza, le temía.

—Un placer conocerte sin duda. —Az también se puso de pie, saludando animadamente, claro, contenía sus nervios de fan y también los impulsos a algo más.

Jade notó que Mick no estaba contento, pero no iba por ello a echar a Az. Y aunque ella quiso continuar aprendiendo con los juegos de mesa, Az entendió que no debía estar ahí.

—Debo irme, querida, pero podemos vernos en la semana. —dijo mientras anotaba su número de teléfono en una hoja de sus libretas, tomando sus cosas cuanto antes.

—Espero que sí, hay tanto que me gustaría aprender. —le dijo con una sonrisa, era una totalmente honesta y sabía que él era alguien que podía enseñarle.

—Sí puedo encontrar algún artículo de tu interés no dudaré en traértelo, por lo mientras es hora de volver a casa. —se puso el abrigo, Jade le acompañaría hasta la puerta sin mayor problema.

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