Possessed - Bucky Barnes x OC. Traducción

Parte 14

"Vale, vale, ya estoy aquí". Natasha gritó en el apartamento de Maggie, irrumpiendo en la puerta, cargando con bolsas de opciones de ropa y maquillaje. "Vamos a trabajar".

Tan pronto como James había colgado el teléfono antes, Maggie había soltado un chillido de emoción y al instante llamó a Natasha diciéndole que necesitaba desesperadamente ayuda para arreglarse. Se imaginó que saldría absolutamente despampanante, si contaba con un par de manos hábiles adicionales.

Iba a ser su primera cita real en un tiempo, la primera a la que realmente quería ir, al menos. Las mariposas le llenaban el estómago, haciendo que se retorciera de ansiedad. Claro que había estado cerca de James muchas veces antes, pero esto era diferente. Esto era real.

Natasha se puso a difuminar la sombra de ojos color champán sobre los párpados de Maggie, que estaba sentada sobre la encimera del baño. Después de dibujar un delineado negro limpio por encima y colocar un par de pestañas, la hizo girar para que se mirara en el espejo. Las cejas de Maggie se torcieron al ver lo glamurosa que estaba. Nunca se había maquillado mucho, así que le sorprendió que sus ojos se vieran tan llamativos. "Bien, ¿eh?" Natasha le sonrió a través del espejo.

Después de ponerle un poco de espuma para definir los rizos en el pelo, se dirigieron al dormitorio para repasar las opciones de vestuario. Una vez que eligieron el vestido perfecto, Natasha sacó una gran caja de regalo blanca, con un gran lazo dorado en la parte superior. Maggie trató de protestar, pero, por supuesto, acabó siendo convencida de aceptar el regalo después de que le lanzaran unas cuantas pullas.

Al abrir la tapa, apareció un conjunto de lencería perfectamente doblado en su sitio. Suave encaje de color marfil, cubierto de bordados florales de color rosa pálido y azul; lazos de color menta en las caderas de las bragas y uno en el centro de las copas del sujetador. Los bordes de cada una de las piezas estaban adornados con divertidos volantes.

"Nat, ¿estás de broma?" Maggie levantó la etiqueta de Agent Provocateur, con el precio a la vista.

Natasha soltó un resoplido irritado y se la arrancó de la mano. "Dios, le dije a la chica que quitara las etiquetas antes de envolverlo". Rompió el papel en pedazos, sosteniendo los jirones en su puño. "No te preocupes. En serio. Quiero que te sientas segura esta noche".

Maggie dejó escapar una sonrisa mientras ponía los ojos en blanco. "Gracias, Nat. Eres la mejor".

"Sí, lo sé."

Antes de que Natasha se fuera por la noche, amenazó a Maggie con la muerte si James arruinaba su maquillaje antes de que llegaran a la cena, pero una parte de ella como que quería que eso sucediera si era honesta. Una vez que Maggie estaba sola, se puso el vestido con el nuevo conjunto de lencería debajo. Se ató los tacones a los pies y se retocó el pintalabios, lista para la noche.

Justo cuando cogió su pequeño bolso, otra cosa que le había prestado Natasha, llamaron a su puerta. Miró el reloj que marcaba las ocho en punto. Dios, este tipo era puntual.

Se acercó a la puerta y la abrió suavemente para recibir a su cita. James estaba en su alfombra de bienvenida con un aspecto tan elegante como siempre. Un traje de Armani limpio y entallado en su color favorito, el negro. Zapatos de cuero italiano, limpios y brillantes, que le hacían estar en su sitio ante lo más impresionante que había visto en años.

Maggie se había arreglado a conciencia para él. Su maquillaje era impecable, con ligeros toques de color que realzaban sus ya impresionantes rasgos. Llevaba un vestido satinado de color rosa. La tela brillante se doblaba en forma de pliegues, lo que dejaba claro lo hermosas que eran sus curvas. Largos rizos oscuros caían sobre la delicada piel de sus hombros, hasta llegar a su pequeña cintura. Los ojos azules se desviaron hacia abajo, hacia sus Jimmy Choos de tiras, de color champán brillante.